Mondragón, un funcionario de chile, dulce y manteca
Roberto Vizcaíno martes 18, Mar 2014Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- Llegó hace un año 5 meses como titular de Seguridad Pública y se va a una dirección
- Manlio Fabio Beltrones subraya que esta legislatura ha privilegiado las reformas sociales
- Rosario Robles busca empoderar a los adultos mayores y de entre estos a la mujer
A punto de cumplir los 81 años –lo que lo hacía el funcionario más longevo del equipo de Enrique Peña Nieto, a quien casi le saca el doble de años–, hoy será relevado el doctor Manuel Mondragón y Kalb como Comisionado Nacional de Seguridad.
Pasará, según lo adelantó su casi exjefe, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, de lo operativo al área de diseño de la Seguridad Pública.
Con esta decisión Mondragón no sólo deja el primer círculo del gobierno federal, sino que lo hace en forma extraordinariamente rápida convirtiéndose en el primer funcionario federal del régimen que se hunde en la burocracia como si tuviera una pesada piedra política amarrada a su cuello.
Para entenderlo hay que recordar que apenas el primero de diciembre de 2012 –hace 15 meses– Mondragón fue nombrado encargado de la Secretaría de Seguridad, es decir con la posición pública de secretario del ramo.
Asumía el control nada más y nada menos de una controvertida dependencia de la que salía el personaje más oscuro y cuestionado del régimen anterior, Genaro García Luna.
Casi tres meses después, el martes 26 de febrero de 2013, luego de la fusión de la Secretaría de Seguridad dentro de la de Gobernación, Mondragón pasó de encargado a Comisionado Nacional de Seguridad.
Hoy, un año y un mes después de esa comisión pasa al área de diseño de Seguridad, ¿cómo director general?. Al paso que lleva a lo mejor llega a finales del régimen a la intendencia de Gobernación.
La verdad es que los analistas de asuntos de seguridad pública y de seguridad nacional advierten que Mondragón y Kalb nunca debió haber llegado de donde ahora cae.
Un repaso de su vida profesional y pública indica que el cirujano y cardiólogo egresado hace más de 50 años de la UNAM, carece de ideología y preparación para conducir el área nacional de seguridad de México.
Nacido el 30 de abril de 1933 en la ciudad de México el primer dato que se conoce de Mondragón y Kalb es como disidente en aquel movimiento médico de 1965 previo al movimiento del 68.
Pero luego reaparece en 77 como entrenador de karate y otras artes marciales de agentes de la Dirección Federal de Seguridad. Es decir, al otro extremo.
Contralmirante médico naval por la Armada, con postgrado en medicina interna y reumatología por los Institutos Nacionales de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán y de Cardiología, José Ignacio Chávez, Mondragón cuenta con estudios de Alta Dirección de Empresas y Administración Pública en el IPADE, reconocida institución del Opus Dei.
En los últimos 40 años este médico ha pasado de la Dirección General de Operación de la Secretaría de Salud Federal; la Subsecretaría del Deporte de la Secretaría de Educación Pública; la Subsecretaría Forestal y de la Fauna en la Secretaría de Agricultura Federal; la Coordinación Nacional de Participación Social de la Procuraduría General de la República a la secretaria de Salud del DF con Marcelo Ebrard, y de ahí a la de Seguridad Pública capitalina tras la defenestración de Joel Ortega luego del desastre del “News Divine”.
Una carrera pública que si fuese cosa de tamales, se podría calificar de chile, dulce y de manteca.
Y es con este curriculum que en la última campaña presidencial de 2012, el candidato de la llamada izquierda, Andrés Manuel López Obrador, lo anunció como su posible secretario de Seguridad Pública.
Quizá por eso o quien sabe por qué, es que el primero de diciembre de 2012 Enrique Peña Nieto, se la hace efectiva y lo deja como encargado de ese despacho.
Hoy Mondragón y Kalb pasa al área de diseño de seguridad pública, quizá a dar clases de karate y otras áreas marciales las que practica desde hace ya casi 60 años.
¿QUIÉN LO SUSTITUYE?
Hasta ayer no había una señal clara del sustituto de Mondragón. Es, dijeron los consultados con total conocimiento de causa, una decisión absoluta y personal del presidente Enrique Peña Nieto.
Seguro que el de Atlacomulco sondeó a quienes tenía que consultar para tomar esa decisión. Y que además lo meditó con su almohada.
La experiencia, el momento de la República, el perfil de este gobierno indican que el personaje que sustituya al añejo cirujano debe ser alguien que cuente con la confianza y el visto bueno de las Fuerzas Armadas, con el apoyo del Procurador General de la República y muy especialmente con el consentimiento de las autoridades de EU. Y sin duda con un historial ajeno a cuestionamientos de las organizaciones civiles nacionales y extranjeras. Sin antecedentes de escándalos mediáticos. Con una carrera civil antes que militar.
Algunos medios adelantaban al senador priísta, presidente de la Comisión de Seguridad de la Cámara Alta, el ex alcalde de Pachuca, Omar Fayad y a Eugenio Imaz, efectivísimo director del Cisen.
Puede ser. Pero esta no es una decisión del secretario de Gobernación, quien seguramente se inclinaría por algún conocido del terruño. Es una decisión de su Jefe el Presidente de la República.
PREDOMINA LO SOCIAL
Para el experimentado coordinador de los diputados federales del PRI, el sonorense Manlio Fabio Beltrones –quien en estos días estará en el ojo mediático por haber tenido una de las más determinantes cercanías con Luis Donaldo Colosio, quien el domingo próximo cumplirá 20 años de haber sido asesinado en Lomas Taurinas, Tijuana–, la constante de la presente legislatura ha sido la de aprobar reformas sociales.
“La aprobación de la pensión universal y del seguro de desempleo son las medidas de mayor trascendencia social en lo que va de la presente Legislatura”, indicó.
Y es que hoy será dado a conocer el dictamen que expide la Ley de la pensión universal y de reforma de diversas leyes para establecer estos mecanismos de seguridad social.
La pensión universal, explicó, está diseñada de tal forma que garantizará un ingreso vitalicio básico para una vejez digna de quienes tengan 65 años de edad o más.
Esta ley reforzará a su vez al programa de Sedesol que ya otorga un ingreso mensual de 580 pesos, el cual se ajustará anualmente hasta alcanzar la cifra de 1,092 pesos, precisó Beltrones.
Recordó que está previsto que en una primera etapa, el seguro de desempleo cubrirá a quienes tienen un trabajo formal y que han pagado sus contribuciones al Infonavit y a las instituciones de seguridad social.
El beneficio de este seguro le llegará luego de permanecer 45 días naturales sin percibir ingresos, pero atendiendo los programas de promoción y capacitación laboral.
Eso y más es lo que contiene el dictamen que será puesto a debate y aprobación hoy, indicó el sonorense.
MUJERES, EL OBJETIVO
En forma colateral , la Secretaría de Desarrollo Social que comanda Rosario Robles dio los siguientes datos:
En 2013 el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores, el INAPAM, atendió a 723 mil 348 mujeres a través de clubes de la tercera edad. Estos fueron creados en 1982. Sólo en la Ciudad de México hay 119 de ellos con una membresías que asciende a 4 mil 919 mujeres que mejoraran su calidad de vida a través de bailar, cantar, leer, dibujar y estudiar.
El Censo de Población y Vivienda 2010 realizado por el Inegi dejó en claro que la población mexicana mayor de 60 años es de 10 millones 55 mil 379 personas, de las que el 54 por ciento son mujeres, es decir, el 9.06 por ciento de la población total del país.
De ahí que la dependencia que encabeza Robles, busca superar el asistencialismo a través de un enfoque proactivo, a través de empoderar a los adultos mayores con una atención integral que contribuya a mejorar sus niveles de bienestar y a fortalecer el pleno ejercicio de sus derechos.