Pronto, Atlas de Riesgos y Centro Nacional de Emergencias
Roberto Vizcaíno miércoles 12, Feb 2014Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- El objetivo del gobierno, manifestó Osorio Chong, es establecer un mecanismo preventivo y no reactivo
- César Camacho dice estar seguro que las reformas rendirán pronto beneficios a las familias mexicanas
- Por una mayoría casi absoluta, los diputados aprobaron aumentar castigos a autosecuestradores
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, adelantó ayer que por instrucciones del presidente Enrique Peña Nieto pronto habrá en el país un Atlas Nacional de Riesgos y un Centro Nacional de Atención de Emergencias.
Las dramáticas y muy costosas experiencias, tanto en infraestructura como en vidas, debido a fenómenos naturales y desastres causados por personas, dijo, hacen necesario que los programas de protección civil sean un objetivo fundamental para el gobierno de la República.
Por ello –dijo al entregar equipos a Unidades para la Atención de Emergencias–, es fundamental fortalecer las capacidades y la inversión para obtener mejores resultados en la salvaguarda de la vida de los mexicanos, ante cualquier evento producido por efectos naturales o por el hombre mismo.
Ahí recordó que una de las metas del presidente Peña es realizar el Atlas de Riesgos, documento que contendrá información de calidad que permitirá adoptar decisiones en la aplicación de medidas preventivas y no reactivas.
“Más recursos para lograr un mejor equipamiento es lo que nos ha instruido el presidente de la República Enrique Peña Nieto, para tener una mayor infraestructura operativa y tecnológica para poder cumplir “, indicó.
Consideró que la aplicación del Atlas Nacional de Riesgos y los servicios que otorgará el Centro Nacional de Emergencias, tendrán su mecanismo de evaluación, como todos los demás programas de protección civil.
BENEFICIOS… PRONTO
El presidente del CEN del PRI, el doctor César Camacho, dijo estar seguro y muy confiado en que las reformas estructurales, reformadoras del presidente Enrique Peña Nieto, sacarán pronto de su desesperanza a aquellos mexicanos que de alguna forma se encuentran desencantados con este gobierno.
Dijo que mantener la estabilidad macroeconómica es el primer paso para lograr la seguridad y el crecimiento microeconómico, el que lleva los beneficios a las bolsas y mesas de las familias.
“La crisis es parte de un proceso complejo, pero estamos seguros, confiamos, en que las reformas transformadoras del presidente Enrique Peña Nieto serán un instrumento para el despegue económico que impactará en el bienestar de los ciudadanos”, agregó.
Pidió reconocer que las reformas logradas hasta ahora son parte de un proceso para tirar lastre y permitir que el potencial de los mexicanos pueda desplegarse con toda fuerza. Pero a estas les hacen falta sus leyes secundarias y en eso estamos, dijo.
– ¿El Pacto por México, es necesario?, se le preguntó.
“Hacer política va de la mano con la concertación… de ahí surgen las políticas públicas. Por eso el PRI mantiene su mano tendida hacia todas las fuerzas políticas… nosotros siempre insistiremos en sentarnos a la mesa con otros partidos.
“Por otra parte está claro que hay relación del gobierno con los partidos… no ha dejado de haber contacto y encuentros. Nosotros queremos honrar los compromisos que firmamos el 2 de diciembre de 2012 (en esa fecha en el Castillo de Chapultepec se creó el Pacto por México)… todavía hay pendientes importantes: una reforma municipalista, lo del campo, la igualdad de género… estamos listos, dispuestos para continuar en la mesa”, subrayó.
A quienes viven hoy el desaliento les dijo que este año los mexicanos van a percibir beneficios concretos con la entrada en vigor del Seguro de Desempleo, la Pensión Social Universal, “esos son asuntos de cortísimo plazo… las reformas comenzarán a fructificar este mismo año…”, concluyó.
DURO CONTRA SECUESTRADORES
La votación realizada ayer en San Lázaro dejó en claro que los mexicanos estamos hartos de los delincuentes, pero más de los secuestradores.
Y es que ayer el Pleno de los Diputados aprobó por 441 votos a favor y 4 abstenciones, cero en contra, una enmienda a la Ley General para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de Secuestro a fin de aumentar las penas a quienes simulen la privación de su libertad, o la de otras personas.
El dictamen, presentado por la Comisión de Seguridad Pública, detalla que se aplicarán de tres a ocho años de prisión a quien finja el secuestro de una persona, para obtener rescate o cualquier beneficio.
Y es que de vez en vez ocurre que luego de un secuestro, se sabe que o fue fingido por el supuesto afectado… o fue realizado por un pariente o amigo del plagiado.
Por ello lo aprobado ayer impone de 200 a 700 jornadas de trabajo, o de tres a seis años de prisión, al que aparente la privación de su propia libertad, por sí mismo o en complicidad.
El dictamen reconoce que en México los ciudadanos hemos sido testigos de casos donde algunas personas han simulado el delito de secuestro con la finalidad de obtener recursos económicos de sus propios familiares o amigos, sin importarles que eso les provoca angustia y desesperación en su afán por conseguir los recursos para obtener los rescates que deben entregar a los supuestos delincuentes.
Es por ello que los diputados consideraron que es necesario aplicar una sanción mayor para quienes cometan dicha simulación, y así inhibir la comisión de este tipo de actos, y evitar que se sigan efectuando porque no había un freno en la legislación.
Las sanciones estipuladas hasta ayer en la ley, “no eran suficientes”, indicaron varios diputados durante la discusión de la aprobación de esta reforma de Ley.
“La misión de los legisladores debe ser prevenir la delincuencia, haciendo conciencia en la ciudadanía sobre las consecuencias que puede haber cuando se daña a otra persona, mediante sanciones que tengan un peso significativo que reflejen un riesgo elevado al considerarse llevar a cabo este delito”, señalaron.
En su intervención para expresar su apoyo al dictamen, el diputado panista Humberto Armando Prieto Herrera consideró que esta reforma busca disminuir el secuestro, que se ha incrementado en 20 por ciento, según datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Los diputados tienen el compromiso, agregó, de generar leyes racionales y efectivas para atender un delito que lastima gravemente a la sociedad, ya que éste ha mutado y ahora se simula el secuestro para que padres, amigos y conocidos paguen el rescate por la supuesta liberación.
Con la aprobación de estas reformas, dijo, se dotará de mayores elementos jurídicos para la disuasión de la comisión del delito de secuestro.
En su oportunidad, la diputada neoaliancista Sonia Rincón Chanona señaló que el autosecuestro se ha convertido en un jugoso mecanismo de obtención de recursos que involucra desde transportistas, empresarios, comerciantes, estudiantes, parejas en conflicto hasta jóvenes que solicitan cantidades de dinero para solventar gastos extras.
Explicó que durante 2012 fueron secuestradas 288 personas al día en todo el país, según se desprende de cifras de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de Seguridad Pública de 2013.
Ante este panorama, comentó, es necesario que se ponga un freno a este tipo de delitos y se amplíen las penas en materia de secuestro y de autosecuestro.
A su vez la diputada Lilia Aguilar Gil, del PT, dijo que la aprobación del dictamen permitirá aumentar las sanciones a quienes cometan este delito, lo cual es necesario, pues según datos del Inegi en el 2012 se perpetuaron más de 105 mil 600 secuestros.
En su intervención, el diputado del MC, José Francisco Coronato Rodríguez aclaró que el secuestro no sólo afecta a personas de altos recursos económicos, sino también a las de menores recursos.
A su vez el ex gobernador de Zacatecas, el diputado Ricardo Monreal Ávila, quien votó a favor, indicó que delitos como la extorsión y el secuestro han aumentado de manera alarmante durante los últimos años en el país y dudó que estas reformas y aumentos de los castigos vayan a resolver el delito.
El problema, dijo, es más profundo, ya que el delito se genera por la inseguridad, el desempleo y la falta de oportunidades y alternativas para los jóvenes.
Consideró que este fenómeno debe ser tratado de manera más integral, porque el país está sediento de justicia.
“No hay justicia y no se va a resolver con más cárceles, más jueces, más policías, más soldados. Es un problema más integral, de reconstruir el tejido social, de atender los problemas fundamentales que originaron este cáncer que está provocando zozobra y un gran desastre en la nación”.