El LSD: “Lead Singer Disease”
Opinión lunes 20, Ene 2014Los acordes de la imagen
Gerardo Jiménez S.
- ¿Qué debe tener la voz y rostro de una banda?, ¿hasta dónde sus caprichos pueden generar la ruptura del grupo? ¿Y qué tan ridículos pueden ser en cuanto a sus peticiones?
Hace ya algunas décadas a mediados de siglo pasado el “LSD” se introdujo como una droga capaz de generar beneficios psiquiátricos, pero cuando comenzó a usarse para fines recreativos y vieron su poder alucinógeno decidieron prohibirla y denominarla como ácido.
En fin, este sólo es un pequeño dato cultural ya que para escribir la siguiente columna usaré las mismas siglas (LSD) que son utilizadas para definir o etiquetar dicho enervante, sólo que yo las estaré utilizando para expresar lo siguiente: “Lead Singer Disease” que en español se traduce como “Síndrome del Vocalista Principal o Líder” .
¿Qué debe tener la voz y rostro de una banda?, ¿hasta dónde sus caprichos pueden generar la ruptura del grupo? ¿Y qué tan ridículos pueden ser en cuanto a sus peticiones?
Comencemos con David Lee Roth, vocalista fundador de Van Halen, que durante 1983 y 1984 alcanzaron fama internacional poniendo un disco como uno de los más vendidos de la historia y el tema “Jump y Panamá” le dieron la vuelta al mundo, pero este personaje logró creerse dios y exigió a los miembros de la banda que al día solo podía responder dos preguntas y hablar por medio de un traductor de señas, ya que no gastaría saliva en tonterías, pero eso y muchas otras cosas más hicieron que lo corrieran y luego lo contrataran y luego lo volvieran a correr, para luego volverlo a contratar.
Axl Rose de “Guns and Roses” podría ser literalmente la imagen perfecta de dicha enfermedad y en más de una ocasión dejó de cantar porque le tomaban fotos del público o se aventaba del escenario para golpear a los fans o le entraban sus depresiones bipolares y simplemente no cantaba, sin importar que la gente se molestara y a la fecha sigue siendo el artista más impuntual del planeta tierra y de la alineación original de este grupo solo queda él, los demás fueron despedidos gracias a su enorme Síndrome de Vocalista Líder.
Jared Leto de “30 Seconds to Mars” podría ser o definirse como el colmo del LSD, ya que si él no es el foco de atención en las entrevistas simplemente se retira, argumentando, que él es la estrella y los demás son músicos pagados, sin importar que su hermano Shannon sea parte vital en el trabajo creativo.
Liam Gallagher del hoy extinto grupo Oasis, en diversas ocasiones afirmó que eran los Beatles de una nueva era, que su imagen era la perfección del vocalista y eso sin contar que a su público se la pasaba insultándolo, por ello la disolución de la banda fue casi inmediata una vez que alcanzaron el éxito.
A estos mencionados se les puede sumar personalidades como Robert Plant, Scott Weiland, obviamente Jim Morrison y Mick Jagger, entre muchos otros, que en efecto pueden ser lo más pedante y soberbio del universo, pero en realidad. ¿Qué sería de un grupo sin estos personajes?
Pero este fenómeno “LSD”, ha ocurrido también en grupos como Wham, en donde George Michael no pudo ni quiso compartir su fama con Andrew Ridgeley y una fuerte y sólida carrera como solista es parte de su éxito.
Qué decir de Beyoncé, que sin tener problemas, ni roces con sus compañeras de Destiny`s Child emprendió una carrera como solista y ahora muchos la consideran literalmente una diva del pop.
Justin Timberlake, era el galancillo de N Sync, después de varios números uno en el Billboard probó suerte como solitario, mientras que los demás compañeros de aquella “boy band” simplemente han quedado en el olvido.
Gwen Stefani ya era demasiado fuerte en imagen y presencia para estar con No Doubt y por ello decidió marcharse, no sin antes firmar un millonario contrato para que ella y solo ella pudiera ser la única acreedora de los cheques y no compartir centavos con nadie.
Las historias del LSD pueden ser infinitas y aplicables en todo tipo de bandas, grupos, gruperos en fin y como toda adicción, puede ser nociva con el abuso y muchos fans quedan siempre con ganas de más de estos artistas, pero con sus respectivos grupos de origen.