Sic gloria transit…
Francisco Rodríguez lunes 20, Ene 2014Índice político
Francisco Rodríguez
El arzobispo Antonio Chedraoui está de capa caída. El tradicional festejo anual por su cumpleaños, el pasado viernes 17 de enero, resultó deslucido. Cierto, sí, que hubo 3 mil comensales. Cierto, sí, que por ahí desfilaron empresarios, políticos, periodistas. Pero no los más importantes. Ya no asistió, como solía hacerlo, Enrique Peña Nieto. Tampoco Carlos Slim. El representante presidencial fue Guerra Abud.
Ya ni las revistas llamadas del corazón le dedicaron sus principales espacios en sus versiones electrónicas. Una de ellas lo brindó al cumpleaños de los trillizos de Inés Gómez Mont. La otra, a difundir un rumor sobre un posible embarazo de la actriz Anahí, quien aparece al lado del también presunto responsable: el gobernador chiapaneco.
Saydena debe estar triste. Uno de los juniors de Slim no es Slim el de a de veras. Guerra Abud fu el representante del Presidente.
Muy diferente lo sucedido este fin de semana, a lo acontecido hace dos años. Se lo comenté aquí. Y le decía entonces que “no le conozco un solo sermón. Ni una sola obra pía. Ni tampoco muchos feligreses. Pero es un obispo harto taquillero entre la clase política. Un facilitador, más que un religioso. Enlace entre los hombres del poder y los hombres del dinero. Por eso lo buscan. Lo hacen grande. Lo festejan.
“Sus cumpleaños son verdaderos hitos de las páginas y revistas ‘de sociales’. Por ahí, invariablemente, Carlos Slim, el verdadero patriarca de la comunidad libanesa. Y los gobernadores. Y miembros del gabinete. Políticos y empresarios de toda ralea.
“El de este martes 17 de enero (de 2012) no fue muy diferente a otros ágapes previos. Si acaso, con menos figuras políticas. Por ejemplo, no anduvo por ahí ninguno de los presidenciables.
“Misa, primero; comida, después. Como tres mil invitados y como 22 mil guaruras. La mayoría, de los políticos. Sí, de quienes se comprometen a cada rato -aunque sea nada más en los discursos— a combatir la inseguridad.
“Autos de lujo y una veintena de helicópteros..
“Y entre tanta y tanta cordialidad, apretones de mano y abrazos con estentóreas palmadas en la espalda, hubo pleitos para ocupar lugar en el presídium. A grado tal que el homenajeado tuvo que llamar la atención a los ‘colados’, pues le quitaron su lugar -¿premonición?- a Beatriz Paredes Rangel.
“¿Quién sería? ¿El actor Güicho Domínguez? ¿El fajador La Chiquita González? ¿Cuál de los dos arribistas?
ECUMENISMO ECONÓMICO
“Quienes no perdieron su asiento de privilegio fueron Norberto Rivera, Onésimo Cepeda, Vicente Fox y Marta Sahagún, Ivonne Ortega, Carlos Peralta, Juan Francisco Ealy, ni Eruviel Ávila.
“Todos ellos se dieron cuenta de que el arzobispo de la ciudad de México no saludó, ni siquiera volteó a ver —¡se acabó el amor!— a la mal llamada ex pareja presidencial.
“Otros gobernadores: el de Hidalgo, a quien el presentador llamó “electo”.
“Y una pléyade de empresarios, de origen libanés en su mayoría, a quien el obispo ha llenado de bendiciones, merced a sus contactos entre los administradores públicos.
“De tantos favores cruzados, estoy cierto, todos los asistentes, por ‘buenas gentes’ (sic)’ se van a ir derechito al cielo. La asignación de mesas contó a la hora de la hora.
En primera línea, María de los Ángeles Moreno. Y Raúl Salinas de Gortari con novia nueva, joven y guapa, a grado tal que, retador, parecía entonar mentalmente aquella clásica de José Alfredo: “pero voy a sacar juventud, ¡¡¡de mi carteeeera!!!
“Atrasito más empresarios —los que se sabe poseen cuentas bancarias menos abultadas; tal vez hasta en cartera vencida—, comunidad libanesa, el ex procurador Mancera, diputados —la mayoría priístas, como Omar Fayad—, el pre-candidato verde, verde, verdísimo a la gubernatura de Chiapas, la ex subprocuradora Fromow…
“En la tercera y cuarta fila más miembros de la comunidad libanesa. La local, del DF. Pero también la que se descolgó desde Campeche, Puebla y Yucatán. Y de ahí hasta la última fila, empresarios de medio pelo, estirando el cuello, buscando la mirada del obispo que tiene apellido de supermercado, pero que ni por “el buen fin” pone en oferta sus servicios de intermediación, lobbyst o ‘coyote’.
“Nueva en estas lides, la controvertida Isabel Miranda de Wallace llegó a la misa como a la 13:30 horas. Demasiado temprano. Lo regular es llegar tarde, para ver y dejarse ver. Y fue nombrada en el discurso del obispo sin que consiguiera arrancar muchos aplausos de los ahí presentes.
“Rueda de la fortuna. A la mesa 265 de las 300 habilitadas para que los asistentes degustaran el menú — botana libanesa, jabalí a las brasas, shawarma, carnero estilo pastor, borrego y pollo relleno y dulces árabes—estaba sentado Óscar Espinosa Villarreal. Muy pocos se dieron cuenta de que por ahí andaba. Hace 20 años hubiese estado en el presídium.
“Y ante los dedos de novia -el postre, pues—, habló el obispo festejado. Y Eruviel. Y ya para rematar se acordaron que el anfitrión, ahí en Huixquilucan, era Alfredito del Mazo III al que nombraron, ya que casi todos se iban, como para que no se sintiera.
“Hubo por ahí quien se tomó una foto con Fox. ‘Sí —aceptó el esposo de Martita—, pero rapidito porque se me va el avión’.
“Y sí. Muy frecuentemente se le va el avión.
“Por eso en la gráfica todos quienes les rodean aparecen soltando la carcajada.
“Aunque el festejo no es cosa de risa. Sí de muchos pesos, euros, dólares, contratos, firmas, promesas, apoyos…
“Lo común, pues, en el supermarket de la grilla.”
Pero ya no. Ya no fueron al festejo las principales figuras de la política y el dinero.
Sic gloria transit mundi.
Índice Flamígero: Invitado permanente a esos festejos, el promotor boxístico José Sulaimán ya no llegó a la cita con Chedraoui en Bosque Real, el inconcluso fraccionamiento al poniente del DF que parece nunca va a ser totalmente habitado. Un día antes rindió cuentas al Creador. Descanse en paz. Un abrazo a su familia.