Historias de violencia y excentricidad
¬ Augusto Corro martes 26, Nov 2013Punto por punto
Augusto Corro
Edgar “N”, conocido como “El Ponchis”, es el niño sicario que podría salir libre en los primeros días de diciembre.
El menor ingresó al reclusorio a los 14 años de edad para cumplir una pena de tres años. Esto sucedió en el 2010. Concretamente, “El Ponchis” fue acusado de participar en el asesinato de cuatro personas, cuyos cuerpos colgó de un puente. Hechos ocurridos en el estado de Morelos.
La carrera delincuencial del mencionado sicario tuvo una duración de tres años. Las investigaciones policiacas lo relacionan con 300 homicidios.
“El Ponchis” y sus actividades delincuenciales tendrán que ser analizados detenidamente para decidir su suerte.
De acuerdo con las leyes, el menor ya cumplió legalmente su compromiso con la sociedad. Sin embargo, es necesario saber si recibió la educación necesaria para que, una vez libre, se olvide de sus andanzas criminales.
¿Alguien estuvo pendiente de la rehabilitación de “El Ponchis”? ¿Cómo lo recibirá la sociedad?
Por ejemplo, Lucero Benitez Villaseñor, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos (CDHEM), dijo que “El Ponchis” libre puede “poner en riesgo a los ciudadanos, porque no sabe si el menor cumplió el programa de reinserción al que fue sometido”. Señaló la funcionaria que la mencionada comisión integró un comité para saber que se hizo con el menor.
Es decir, conocer cuál es la responsabilidad de cada institución en la rehabilitación de “El Ponchis”: “si realmente está preparado para volver a la calle, buscar trabajo, seguir en la escuela, integrarse a una familia, así como averiguar de qué gente buscaría rodearse y cuáles son sus expectativas”. Sin lugar a dudas, la opinión pública se encuentra atenta al desenlace de la historia del niño sicario.
SERAFÍN
El 21 de noviembre fue detenido Serafín Zambada hijo del narcotraficante “El Mayo” Zambada por la policía estadunidense, cuando intentaba ingresar al vecino país del norte. A raíz de esa captura se conoció parte de la vida pública del citado Serafín, así como de los lujos en armas y animales que presume en Facebook o Twitter.
Sus excentricidades no tienen límite. Esto se ve en las fotografías que exhiben en las que aparecen armas de asalto, inclusive una con chapa de oro o al lado de un tigre, como mascota.
No faltan las fotos con “distinguidas” personalidades del espectáculo y del mundo deportivo.
El derroche de dinero se ve por todos los ángulos de la vida de los hijos de narcos, como ocurre con algunos vástagos de políticos o de líderes sindicales.
Para no ir tan lejos, Fabián Granier, hijo del ex gobernador Andrés Granier, tendrá que enfrentar a la justicia porque se encuentra involucrado en los delitos de “lavado” de dinero, defraudación y enriquecimiento ilícito.
El junior, según se dijo, es propietario de inmuebles en Miami, cuyo valor es de millones de pesos. Y como “Los Zambada” no resistió la tentación de mostrar en las redes una fotografía de un yate llamado “Andrecito”, que se encuentra en un muelle de Miami.
PAULINA
El exhibicionismo también se da en las familias sindicales. Paulina, hija del líder petrolero Carlos Romero Deschamps, es el modelo del derroche. De acuerdo con lo publicado, la joven es aficionada a las excentricidades que incluyen “viajes por todo el mundo en aviones comerciales como privados, comilonas en los restaurantes más exclusivos, paseos en yates y vinos con un costo de más de 10 mil pesos”.
Claro no podía faltar la exhibición de las bolsas de Louis Vultton y de sus mascotas, unos bulldogs ingleses que viven como reyes. Por cierto, Paulina gusta de comer carne de res Kobe, una de las más caras por su calidad.
En fin, la riqueza bien habida o mal habida no puede ocultarse.
