El papa Francisco y Putin abogan por diálogo en Siria
* Especiales, Mundo martes 26, Nov 2013- Se subrayó la urgencia del cese de la violencia y de hacer llegar asistencia humanitaria a la población
El presidente ruso, Vladimir Putin, se reunió con el Sumo Pontífice y decidieron unir voluntades para buscar una solución negociada en Siria.
El papa Francisco y el presidente de Rusia, Vladimir Putin, se plantearon la necesidad de una solución negociada y pacífica al conflicto sirio, con motivo de la conferencia de paz Ginebra 2, fijada para el próximo 22 de enero.
Ayer, el Pontífice recibió en audiencia privada de unos 35 minutos de duración al mandatario ruso, en la que se calificó de grave la situación siria
Reunidos en la biblioteca del apartamento papal del Palacio Apostólico, según un comunicado de la Santa Sede, “se subrayó la urgencia del cese de la violencia y de hacer llegar la asistencia humanitaria necesaria a la población, así como de favorecer iniciativas concretas para una solución pacífica del conflicto, que privilegie la negociación e implique a las distintas facciones étnicas y religiosas, reconociendo su papel imprescindible en la sociedad”.
Aunque ambos abordaron también otros temas sobre Oriente Medio, Putin agradeció al Papa la carta que envió con motivo de la cumbre del G20 de San Petersburgo el pasado septiembre para pedir que se evitaran soluciones militares.
El comunicado señala que durante el cordial coloquio se ha expresado la satisfacción (mutua) por las buenas relaciones bilaterales y se ha detenido sobre algunas cuestiones de interés común, de modo particular sobre la vida de la comunidad católica en Rusia, evidenciando la contribución fundamental del cristianismo a la sociedad”.
Luego de la audiencia privada con el Pontífice argentino, Putin trató asuntos internacionales y bilaterales entre Rusia y el Vaticano con el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, y el secretario para las Relaciones con los Estados, Dominique Mamberti.
El Papa y Putin intercambiaron regalos. El primero entregó un mosaico con una panorámica de los jardines vaticanos. El segundo dio la representación de la Virgen de Vladimir, una de las imágenes más veneradas en la Iglesia ortodoxa, cuyo original data del siglo XII. Cuando el Papa se alejaba de la mesa de los regalos, Putin le detuvo para preguntarle si le gustaba la Virgen que le había regalado, y éste se mostró complacido.
Esta fue la cuarta vez que Putin visitó el Vaticano desde el año 2000, cuando, en su primer año en la presidencia, se entrevistó con Juan Pablo II, un encuentro que se repetiría en 2003, para volver ya en 2007, bajo el papado de Benedicto XVI. El día escogido esta vez tuvo importancia para el conflicto sirio por el acuerdo final sobre la fecha de la conferencia de paz Ginebra 2, alcanzado en una reunión preparatoria.
