Los medios de comunicación, un servico público
¬ José Antonio López Sosa jueves 7, Nov 2013Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Hace un par de noches, entrevistamos al senador Javier Corral con relación a las nuevas tecnologías en materia de telecomunicaciones y la reforma que espera el reglamento para entrar en vigor.
Dentro de todo lo que nos expuso el senador –cosas sin lugar a duda de interés general que nos permiten vislumbrar la capacidad de las telecomunicaciones en un país como México— hubo una parte que llamó la atención en específico, el hecho que los medios de comunicación deben ser considerados un servicio público y no solamente de interés público.
Si bien los medios de comunicación son en su mayoría concesiones privadas del estado, al final del día negocios, existe una responsabilidad al ocupar el espacio radioeléctrico de la nación.
Lo que se dice, lo que no se dice, lo que se denuncia, lo que se omite, lo que se interpreta, en síntesis, lo que se transmite —sea lo que sea— resulta un ente que va al público en general, por lo tanto se trata de un servicio público en manos de privados.
El tema no es restringir esas concesiones, sino garantizar el acceso público no sólo a los contenidos, sino a las réplicas y al verificar que existan contenidos de calidad, con un respeto por las audiencias.
En este sentido, lo más complicado —desde nuestra visión— es que las grandes televisoras: Televisa y Televisión Azteca, entren en esta dinámica, cuando han estado acostumbrados por años a ser los dueños no sólo de las concesiones sino de los contenidos, sin dejar lugar al escrutinio público y menos aún, a una equidad sobre todo informativamente hablando.
Tenemos antagonismos enormes, como puede ser el hecho que una televisora (Televisa) tenga un proyecto anual de recaudación de fondos (el Teletón) a cambio de desfilar en horario estelar en el canal más visto del país y al mismo tiempo, tenga contenidos denigrantes para el ser humano, como es el programa de la conductora peruana Laura Bozzo.
Hoy día, no hay forma que las audiencias tengan derecho alguno sobre los contenidos, ni siquiera el hecho de opinar sobre ello, la “caja de los sueños” cumple a diario el cometido que lanzara algún día el fallecido Emilio Azcárraga Milmo: trabajamos para los jodidos.
En fin, el ver a los medios de comunicación como un servicio público representa un reto y un avance para nuestra sociedad, afortunadamente hay legisladores como Javier Corral, comprometidos con ello y con la democratización de los medios de comunicación.
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