Josefina se decidió
¬ Augusto Corro viernes 18, Oct 2013Punto por punto
Augusto Corro
El panorama se aclara poco a poco en el Partido Acción Nacional. Gustavo Madero, actual presidente blanquiazul, no tendrá fácil la reelección. Ayer, Josefina Vázquez Mota se autodestapó como aspirante a la dirigencia nacional panista.
Después de más de 14 meses de silencio, la ex candidata presidencial anunció su intención de competir por el liderazgo blanquiazul.
Dijo en una entrevista radiofónica: “Estoy de regreso. La propuesta es hacer una convocatoria de unidad. Hay necesidad de un PAN unido y fuerte”.
Según trascendió, Vázquez Mota tendrá el respaldo de los ex gobernadores agrupados en Panistas por México, en el que aparece el dos veces presidente de Acción Nacional, Luis Felipe Bravo Mena. Cabe señalar que el PAN al que regresa la panista no es el mismo que dejó cuando perdió las elecciones presidenciales.
Hoy, esa organización política se encuentra en la bancarrota debido a sus pugnas internas, entre otras las protagonizadas por Gustavo Madero y Ernesto Cordero. El primero buscará su reelección; el segundo es el representante de Calderón para buscar el liderazgo nacional.
Todo hace suponer que las elecciones se efectuarán en el próximo mes de marzo, mientras se espera que el Instituto Federal Electoral (IFE) avale la reforma a los estatutos. Vazquez Mota como candidata a la Presidencia de la República enfrentó un sinnúmero de problemas en el interior y exterior de su partido. En el interior no tuvo el apoyo de sus compañeros. El propio Madero asumió una actitud de indiferencia hacia la aspirante panista. Calderón se empeñó en hacerla a un lado, molesto porque su delfín, Ernesto Cordero no pudo ser el candidato presidencial blanquiazul. El regreso de Vázquez Mota viene a motivar las conciencias de los panistas que en las presidenciales pasadas vieron como perdía su candidata y el partido caía al tercer lugar en la aceptación del electorado. Fueron comicios difíciles para los blanquiazules que estaban conscientes de que las administraciones de Fox y Calderón habían sido un fracaso total.
Fox no pudo con el paquete del cambio y se dedico a gobernar frívolamente al lado de su exposa Marta Sahagún. La decepción que sembró el guanajuatense creció con Calderón. Este dejó una sociedad en crisis ocasionada por su fallida guerra contra la delincuencia organizada.
Pasará mucho tiempo para que México recobre la paz y la tranquilidad rotas por la mala administración calderonista. Más de 70 mil muertos en la lucha contra los narcos no es cosa de olvidar de la noche a la mañana.
Si a lo anterior se suma el problema del desempleo, quedaba claro que nadie votaría por el partido blanquiazul, como ocurrió.
Vázquez Mota se enfrentó a esa herencia de muertos y desempleo, pero no tuvo la suficiente fuerza para convencer a los electores. Todo quedó en un intento en vano por conseguir la Presidencia de la República.
El PAN resintió la derrota y se llegó a pensar en la posible desaparición del partido. Sin embargo, los propios panistas empezaron a buscar la reconstrucción de esa organización política.
En junio pasado, ex gobernadores panistas anunciaron la creación del movimiento “Panistas por México”.
Los ex mandatarios manifestaron que buscan fortalecer al instituto político y contribuir a recuperar su orientación humanista y reivindicar sus principios.
El ex gobernador de Baja California, Ernesto Ruffo Appel, manifestó que esa expresión democrática trata de fortalecer al PAN y “no pretende ninguna proporción de rentabilidad política sino recuperar la confianza del ciudadano”.
Participan en la mencionada corriente ideológica los siguientes ex mandatarios: Ernesto Ruffo Appel, de Baja California; Carlos Medina, de Guanajuato; Francisco Barrio, de Chihuahua; Alberto Cárdenas, de Jalisco, y de Nuevo León, Fernando Canales y Fernando Elizondo.