Estructurar un sistema acusatorio en los juicios penales, cambio radical: Elías Azar

Para el primer bimestre de 2011 habrá juicios orales integralmente en justicia para adolescentes

Foto: Gustavo Camacho

En una ceremonia muy emotiva, efectuada la tarde de ayer, el magistrado Edgar Elías Azar, presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, dio la bienvenida a los magistrados de la comitiva de la Corte Suprema de Justicia de Chile, quienes se encuentran de visita en territorio azteca, y donde por cierto el discurso giró en torno al gran afán del Tribunal de Justicia capitalino de conocer el modelo de justicia chileno y observar sus avances y progresos.

A colación de lo anterior, el magistrado aseguró que distintos miembros del Poder Judicial capitalino se han trasladado con gran interés a Chile, con el propósito de tener cercanía con este modelo judicial, al tiempo que se aleccionan en este campo.

Elías Azar subrayó que en cada visita que realizan, siempre han encontrado en la representación diplomática del hermano país un trato fraterno y una disponibilidad abierta para que los funcionarios judiciales mexicanos cuenten con todas las facilidades en esas visitas tan aleccionadoras.

Estructurar un sistema acusatorio en los juicios penales, que deje atrás el tradicional sistema mixto y que imponga la oralidad, la imprescindible inmediatez procesal, exige un cambio radical que abarca no sólo la parte legal, sino también la  práctica y cultura jurídicas. Se trata de un giro de 180 grados, que va de la formación de juristas hasta la investigación confiable y oportuna del delito, sin olvidar a las ciencias forenses y a la policía científica, dijo el doctor Edgar Elías Azar, magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF).

“Es especialmente grato para este pleno de magistrados del Honorable Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal recibir en esta sesión solemne al excelentísimo ministro Milton Juica Arancibia, presidente de la Excelentísima Corte Suprema de Chile.

Le damos a él y a don Jaime Rodríguez Espoz, ministro de la Sala Penal de la Excelentísima Corte Suprema de Chile; a don Roberto Contreras Olivares, ministro de la Excelentísima Corte de Apelaciones de San Miguel; a doña Carla Troncoso Bustamate, juez de Garantías; a don Francisco Hermosilla Iriarte, juez oral en lo Penal; a don Rodrigo Quintana Meléndez, coordinador del Proyecto “Apoyo a la Reforma Judicial en México”, comentó en su discurso el magistrado Édgar Elías Azar.

De igual modo, Elías Azar agradeció la presencia en el inmueble de Andrés Mahke, experto en la implementación de políticas públicas del sector justicia, así como de Juan Enrique Vargas, experto asociado al proyecto “Apoyo a la Reforma Judicial en México”. Finalmente, el magistrado mexicano agradeció muy especialmente al excelentísimo embajador de la República de Chile en México, Germán Guerrero Pavez.

Asimismo,  Elías Azar también agradeció la presencia de la consultora Jurídica y Legal del gobierno capitalino, Leticia Bonifaz, así como del procurador general de Justicia del Distrito Federal, doctor Miguel Ángel Mancera Espinosa, mismo que es secretario Técnico de la Implementación de la Reforma Constitucional en el Distrito Federal.

“Estoy seguro de que la suma de los esfuerzos de la Procuraduría y del Tribunal Superior de Justicia del DF harán que este proyecto tan novedoso tenga el éxito que la ciudadanía espera.

Elías Azar resaltó que el monto de los recursos   que se requieren en el Distrito Federal para establecer el nuevo sistema de justicia desborda toda previsión presupuestal utilizada para otros casos y experiencias. Para atender debidamente la reforma de justicia penal se deben evitar simulaciones o respuestas que dejan una reforma inacabada. “Por apresuramientos, por llenar páginas de discursos políticos, se anunciaron con mucha antelación implementaciones del nuevo sistema judicial acusatorio y oral, y hoy día se cae en la cuenta de la simulación, pues todo se cambió para que nada se cambiara; un “gatopardismo” judicial verdaderamente imperdonable y siempre cuestionable”.

Son muy importantes este tipo de encuentros y por eso nos congratulamos con su presencia, amigos chilenos, amén del mero placer de contarlos entre nosotros este día. El Distrito Federal es la gran capital de la República mexicana, histórica y jurídicamente; es una de las macrourbes más extendidas en el planeta, con una población que supera los 10 millones de habitantes”, aseveró el magistrado.

Agregó: “El Distrito Federal cuenta con otra población flotante de similar cuantía, que encontramos habitando en los municipios conurbados del Estado de México y quienes vienen hasta aquí a hacer su vida cotidianamente, trabajando, estudiando, divirtiéndose, comerciando, en fin, como personas que generan a nuestro territorio actos jurídicos que a la postre vienen a impactar nuestros aparatos de justicia y de servicios. Hablamos de un conglomerado humano que supera los 20 millones de personas, sin tomar en cuenta el turismo en la capital mexicana”.

Por otro lado, el presidente del Tribunal de Justicia en el Distrito Federal afirmó que si el problema de la Reforma de Justicia se advirtiera solamente desde un punto de vista cuantitativo, se habría rebasado ya cualquier cálculo que se hubiera tomado como referente en otros lugares para medirlo y atenderlo. Expresó que la sola atención de los problemas de recursos en el Distrito Federal para implementar un nuevo sistema de justicia, como el que se impulsa ahora en México, desborda toda previsión presupuestal contemplada para otros casos y experiencias.

“Ustedes en Chile, llevan ya casi una década instrumentando su exitoso modelo de justicia y saben bien a qué me refiero, cuando a gastos e inversión en esta parafernalia judicialista se alude; no es poca cosa, ni es poco su monto. El esfuerzo es mayúsculo. No admite simulaciones, ni permite respuestas de medio camino, inacabadas o simplemente, enunciadas”, señaló.

En el acto, el magistrado enfatizó que en una República como la nuestra, es fundamental hacer coincidir la autonomía y soberanía de cada entidad federativa, con una fuerza que tienda la mejor homologación de sistemas, para seguridad y certidumbre del ciudadano. Comentó que la dispersión de criterios, la diversificación de las instituciones legales y gubernamentales; la separación en los procedimientos, dañan al hombre común, que lo que desea es una justicia eficaz, honrada y transparente.

“En el Distrito Federal, como capital de los mexicanos, con un gobierno electo democráticamente e integrado por sus tres poderes clásicos, debemos ser capaces de dar ejemplo de eficacia, pero siempre con la celeridad que estos cambios exigen. Toda norma jurídica que se expide para regular nuestra vida institucional y para proteger y garantizar derechos fundamentales, debe estar siempre acompañada de sus respectivo estudio de impacto financiero, pues sin esa característica todo se vuelve quimera, queda en ensoñación y al final del día, en frustración e irritación sociales”, dijo.

Finalmente, Elías Azar dijo a la  comitiva de la Corte Suprema de Chile y a todos los ahí presentes, que México era un país abierto a escuchar propuestas que puedan mejorar o perfeccionar el modelo de justicia en esta nación.