Sí se puede (cuando se quiere)
¬ Augusto Corro viernes 13, Sep 2013Punto por punto
Augusto Corro
Las dos caras de una moneda se notan en las últimas competencias deportivas de México a nivel internacional. Por un lado, aparece el triunfo de la selección de basquetbol que obtuvo la medalla de oro del premundial de FIBA de las Américas 2013, al derrotar a Puerto Rico, el jueves en la noche.
Por el otro se ve, lo que se siente ya como una tragedia: la derrota del Tri ante Estados Unidos, en la eliminatoria para el campeonato mundial de futbol, en Brasil. El juego se llevó a cabo el martes en la noche, en Columbus, Ohio.
En las actitudes de ambos grupos se notaron diferencias profundas. Mientras que en los basquetbolistas fueron ejemplo de entrega total, los futbolistas nunca pudieron demostrar ni esfuerzo ni empeño.
La quinteta de básquet con su triunfo logró la calificación para el mundial que se realizará en España el año próximo.
Por otra parte, los ratones verdes con su derrota tendrán que seguir con su viacrucis con la esperanza de que se realice un milagro que les permita participar en el mundial brasileño.
Los basquetbolistas pusieron muy en alto el nombre de México. Por primera vez nuestro país alcanzó la gloria en un juego lleno de tensión, de altas y bajas que ganó el mejor.
Se trató de un juego, en el que la quinteta mexicana venció a su rival de Puerto Rico, que hasta el último luchó por el triunfo.
Los mexicanos nunca se dieron por vencidos. Al contrario, conforme avanzaba el tiempo, el esfuerzo de los mexicanos era cada vez mayor. El marcador final fue de 91-89. La potencia que es Puerto Rico quedó vencida.
En el juego de las selecciones de futbol, se vio a los ratones verdes correr tras el balón sin orden ni meta. Completamente desorganizados. Esperanzados en los goles de Gío o de El Chicharito Hernández.
Nunca llegaron las anotaciones por parte de una selección desmadejada, sin estímulo y con la presión de obtener el triunfo.
Terminaron los noventa minutos y los seleccionados estadounidenses se levantaron con un triunfo más sobre el Tri.
Ahora, viene lo más difícil para la Selección Mexicana que hacer milagros para participar en forma directa en el mundial de Brasil, o a través de un camino sinuoso que lo lleve a buscar la reclasificación con el equipo de Nueva Zelanda.
Una ruta tortuosa en la que se espera un milagro para calificar. Vaya, vaya.
La gran potencia futbolista que se dice que es México, solo ha servido como hazmerreir de los equipos de futbol centroamericanos que se han convertido en “cocos” del Tri.
Los “ratones verdes” se ponen a temblar cuando escuchan los nombres de las selecciones de futbol de países que están muy lejos de ser potencias, en ese deporte de las patadas.
VUCETICH A REMAR CONTRACORRIENTE
Aquí entre nos, pensar que vamos a hacer un papel digno en los mundiales de futbol siempre ha sido algo así como una ilusión.
Por ejemplo, son miles de personas las que sueñan con que el Tri algún día sea campeón del mundo. Una forma de pensar muy respetable; pero que se encuentra fuera de la realidad total.
A veces se alcanza a contemplar la cadena de derrotas y la incompetencia de nuestra selección de fut. ¿Qué es lo que les falta a nuestros jugadores para ser como esos cracks que brillan en ese deporte?
La tragedia en el balompié mexicano se veía venir. Después de tantos empates, lo indicado era cambiar al director técnico, el Chepo de la Torre, pero la Federación Mexicana de Fútbol se encargó de mantenerlo en el cargo contra viento y marea.
Los resultados negativos son más que suficientes para comprobar que los directivos no quisieron escuchar ni ver lo que le pasaba a la selección de los ratones verdes.
De última, Víctor Manuel Vucetich, un brillante director técnico, se encargará de dirigir a la selección de fut que se encuentra en “artículo mortis” y su meta será salvarla. Ojalá, los fanáticos del futbol se lo agradeceríamos mucho.
Felices Fiestas Patrias