Dawson City, al norte de América
¬ José Antonio López Sosa miércoles 4, Sep 2013Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Dawson City, Canadá.- Al norte del territorio de Yukón y al extremo de nuestro continente se ubica esta ciudad de poco más de 2 mil habitantes que creció de la mano de la fiebre del oro, continúa siendo uno de los polos mineros más importantes de la región y además es muestra clara de la magnificencia del continente en su región septentrional.
Si uno lee las referencias antes de viajar hasta este lugar, pudiera parecer un pequeño poblado más de los cientos que se encuentran tanto en los Estados Unidos como en Canadá. Sin embargo, al llegar hasta aquí se rebasa toda expectativa.
Dawson City está 5 horas al norte de Whitehorse, la capital del territorio de Yukón, la aerolínea “Air North” —la que nos trajo hasta aquí— opera de forma regular conectando los principales aeropuertos de la región.
En el pasado esta ciudad llegó a tener 13 mil habitantes en sus alrededores cuando el auge minero llegó al máximo.
Hoy día se combina la minería y el turismo, hay recorridos por el Río Yukón (el que rodea la ciudad y es punto de partida de la carretera del techo del mundo rumbo a Alaska), se pueden hacer todo tipo de actividades de montaña y además, hay recorridos que explican cómo se extrae el oro de forma prácticamente artesanal, —lavado en agua como le llaman—y preservando el medio ambiente.
Durante el verano los días llegan a tener más de 20 horas en los meses de junio y julio, las temperaturas son muy agradables y la naturaleza es impresionante. Las auroras boreales comienzan a vislumbrase en estos meses y durante el invierno las actividades propias de la nieve existen por doquier.
La hospitalidad de la gente, la infraestructura bien aprovechada sin atentar contra la naturaleza, los paisajes, la tranquilidad de Norteamérica, en fin, resulta difícil explicar con palabras el significado que engloba Yukón y en particular Dawson City.
La oferta hotelera, gastronómica, de transportes y de actividades es amplia y variada, un destino de primer nivel.
Finalmente, resulta curioso que una ciudad de 2 mil habitantes y pocas calles, pueda enamorar en pocas horas y ofrecer tantas cosas que no hay tiempo que alcance.
lopez.sosa@mexico.com
@joseantonio1977
www.formulaconfidencial.com.mx