Bajacalifornianos
Ramón Zurita Sahagún miércoles 4, Sep 2013De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Los bajacalifornianos se encuentran de plácemes, pues confían en que su nuevo gobernador, Francisco (Kiko) Vega, si les cumpla en el terreno de los hechos, todas las promesas de campaña.
El panista asumirá funciones hasta el mes de noviembre, aunque desde ahora ya disfruta de las mieles del poder y continúa con el festejo del triunfo obtenido en las urnas el pasado 7 de julio.
A diferencia de otros políticos, Kiko cumplió con una de las promesas realizadas con anticipación a su victoria electoral y formalizó su unión matrimonial con su pareja.
Una de las promesas de campaña de Kiko Vega le fue realizada a su pareja Brenda Ruacho. Si gano las elecciones nos casamos y serás la esposa del gobernador y primera dama del estado, le ofreció.
Por eso, cuando se formalizó su triunfo electoral, se pasaron los tiempos de impugnaciones, Kiko cumplió con lo prometido y sin fastuosidad de ninguna clase procedió a hacer realidad su oferta.
Él y Brenda contrajeron matrimonio y sabedor de que tendrá que cumplir con los otros compromisos contraídos en campaña y que lidiar con los ciudadanos no será tarea fácil, la nueva pareja decidió irse de luna de miel, antes de cualquier otra cosa. Kiko y Brenda, se dice, se fueron de luna de miel al continente africano, tal vez para eludir miradas indiscretas y disfrutar de su nueva vida legal.
El próximo gobernador panista tendrá que cumplimentar las otras promesas de campaña, luego de que saltó todos los obstáculos sembrados en su camino a la victoria en las urnas. Kiko Vega sabe que los próximos seis años le serán de absoluta entrega a los trabajos administrativos y políticos, si es que desea cumplir con sus otras promesas y continuar con una carrera ascendente dentro de la actividad política.
Caso contrario el de su antagonista en la disputa por el gobierno de Baja California, Fernando Castro Trenti, quien pasa por momentos amargos.
Fernando decidió no regresar a la diputación federal y dejó su sitio a su suplente, quien disfruta de los placeres de ser legislador federal y gozar de los privilegios que disfrutaba el diputado propietario.
Claro que la comisión que presidía Castro Trenti y la cercanía con el coordinador de la bancada priísta, Manlio Fabio Beltrones, no la pudo heredar, pero algo es algo. El candidato derrotado en la contienda por el gobierno de Baja California sufre al desconocer su futuro. Fue sondeado con la posibilidad de ser enviado como embajador de México en Argentina, aunque parece ser que la oferta no es la de ser embajador, sino se reduce a enviarlo de Cónsul en ese mismo país, pero en una de sus provincias, aunque se trata de una de las más hermosas.
Castro Trenti pensaba que el triunfo lo tenía en la bolsa, por lo que no necesitaba negociar una posición futura, en el remoto caso de perder ante el panista Vega, lo que finalmente sucedió.
Hasta ahora se sabe que cuenta con el respaldo de Manlio Fabio para negociar una buena posición, aunque del palto a la boca se cae la sopa. De los priístas comisionados en Baja California, sea como candidatos u operadores del PRI, varios de ellos recibieron premios de consolación, a pesar del fracaso.
Orlando Arvízu Lara, quien fracasó nuevamente como operador en Baja California, recibió como premio su designación como cónsul mexicano en Puerto Rico.
Arvízu está lejano de pertenecer al cuerpo diplomático, por lo que su categoría no podía ser arriba de ese nombramiento.
Héctor Yunes Landa, senador de la República y delegado general del PRI en Baja California, se encuentra encargado del proceso de modernización del PRI en la parte norte de la península y del cambio de dirigencia, dentro de la reestructuración que planea el partido para resarcirse de la paliza recibida en julio, cuando perdió la mayoría en el Congreso y de las cinco alcaldías que mantenía en su poder, solamente rescató dos.
En los altos mandos del PRI no importó el fracaso de Yunes Landa, aunque se le dio la nueva encomienda para mantenerlo alejado de Veracruz y de la obsesión que mantiene por ser candidato al gobierno estatal.
MISÓGINOS
Ahora que Ricardo Monreal Ávila arremetió contra todos en la Cámara de Diputados, guardó un sitio especial contra las diputadas federales, de las que dijo, que pena me dan las mujeres que las contratan como diputadas federales con un sueldo de 200 mil pesos, solamente para gritar tiempo, tiempo.
Con esta frase célebre, el ex gobernador de Zacatecas y actual coordinador de los diputados federales del Movimiento Ciudadano, tiene un sitio preferencial dentro de la lista de políticos misóginos.
En esta depurada lista, Francisco Moreno Merino guarda un sitio especial, con su frase: “no hay caballo fino que no tire a mula, ni mujer bonita que no llegue a ser meretriz, ni hombre bueno que no tire a penco”. Después de pronunciar la frase, Moreno Merino fue bajado de la fórmula senatorial del PRI, donde estaba posicionado como uno de la mancuerna de su partido.
El descolón le ganó reconocimiento a los priístas de parte de los otros partidos, aunque al final, Moreno Merino resultó beneficiado, ya que los candidatos de su partido perdieron en Morelos y a él mismo se le hubiesen reducido sus posibilidades de contender por el gobierno estatal, luego de la pérdida electoral. Su sacrificio le fue recompensado, pocos meses después cuando fue designado Procurador Federal de Protección Ambiental, una posición cómoda dentro del gobierno federal. Con este antecedente, Monreal Ávila puede estar seguro que podría formar parte del cuadro de honor y conseguir un espacio dentro del gobierno federal, aunque no sea priísta.