Más sesgos interesantes
¬ Juan Manuel Magaña miércoles 21, Ago 2013Política Spot
Juan Manuel Magaña
Qué tal, cuánto chanfle pudiera tener lo dicho en materia energética por el poderoso secretario de Hacienda, Luis Videgaray, en su encuentro con senadores perredistas: “la idea es enriquecer las iniciativas y buscar, mediante el diálogo y el debate, encontrar una que realmente satisfaga los intereses nacionales y nos permita avanzar como país”.
Videgaray afirmó que hay coincidencias, como también diferencias, entre la propuesta presidencial de reforma energética y la que el PRD presentó el pasado lunes a través de Cuauhtémoc Cárdenas, pero dijo con ánimo conciliador que “la mesa está puesta” para un debate serio en esta materia.
“Enriquecer iniciativas”, “encontrar una que realmente satisfaga los intereses nacionales”. ¿Quién influirá más a quién?
Las iniciativas panista y perredista ven, simple y sencillamente, para lados distintos y será imposible que se acerquen. Son agua y aceite.
También es de dudar que la iniciativa panista pudiera jalar un milímetro a la priísta, siendo que el horno no está ahorita para bollos. Y, además, fue notorio el hecho de que la iniciativa gubernamental y priista no se atreviera a llegar tan lejos para decepción de ciertas miradas, sobre todo en el exterior.
Si la propuesta del Ejecutivo no abrió con una apuesta tan fuerte por el lado derecho y si es genuino el ánimo negociador, lo más seguro es que tal iniciativa se deje acercar más a las posiciones del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas y el PRD.
Ayer mismo, en consonancia con Videgaray, el presidente Enrique Peña Nieto aseguró que más allá de las eventuales diferencias que contienen las iniciativas existe una “plena coincidencia de emprender cambios estructurales en esta materia”. Y por eso dijo que las propuestas deben motivar un gran debate en el Congreso y en el Constituyente Permanente.
La presentación de la iniciativa Cárdenas ciertamente no tuvo mucho público. No faltó quien vio en ello un acto desangelado. Pero en cambio el gobierno y los políticos priístas le dieron una gran bienvenida. Si eso significa algo, acaso el oficialismo ha mostrado más entusiasmo de ponerse a trabajar por el lado izquierdo que por el derecho.
Las expresiones de Videgaray sugieren más ganas de descafeinarse que de recargarse.
Porque hay otro sesgo interesante en la situación planteado ayer por el propio ingeniero Cárdenas, quien no descartó participar en movilizaciones con Andrés Manuel López Obrador para oponerse a la propuesta de reforma energética oficial.
Esa sola expresión significa que la izquierda, lejos de dividirse, podría nuevamente converger en una gran resistencia de cara al proceso está en marcha. Esa convergencia podría mostrar de qué tamaño es el respaldo social hacia una idea de mejorar Pemex. Pero no sólo eso, ahí habrá también inconformidad y muy posible e indeseablemente habría excesos.
Dos sesgos interesantes más se han introducido en la escena: la violencia contra el Congreso en el marco de la disidencia magisterial y el anuncio de movilizaciones por parte del movimiento #YoSoy132.