Robin Hood desmitificado
* Especiales, Cine viernes 21, May 2010Vértebras del cine
Luis Diego Hernández Romero
Quizá Robin Hood sea el personaje más representado y adaptado de la tradición inglesa, incluso sobrepasando a la leyenda del Rey Arturo. Todos conocemos la historia del hábil arquero medieval que vive en los bosques para quitarle el dinero a los nobles y repartirlo entre los más necesitados. A raíz de tantas adaptaciones, la leyenda del príncipe de los ladrones es considerada como verídica, aunque, lo cierto es que existen pocas fuentes históricas que sustenten la existencia de Robin Hood.
El consagrado productor y director Ridley Scott decidió llevar a cabo la realización de una película sobre el mítico arquero remontándose a los argumentos más históricos posibles. En su cinta presenta al Robin Hood previo al mito y proyecta su grandeza en la parte más humana posible a través de Russell Crowe, actor predilecto de Scott. El reparto incluye a Cate Blanchett, en su típico papel de mujer de convicciones y fuertes principio; y Mark Strong, como el villano nato de la película. Posiblemente la actuación de mi predilección sea la de Mark Addy, interpretando al carismático Fraile Tuck, que tiene toda la picardía ausente en el personaje de Russell Crowe.
Para poder continuar, es preciso reconocer el trabajo anterior del realizador Scott, el cual incluye varias obras altamente reconocidas de la industria, como son: Blade Runner, Alien, Gladiator, la menos aclamada Hannibal, Gángster Americano, La Caída del Halcón Negro, entre otras. Sin embargo, no hay mejor ejemplo de altibajos en la industria cinematográfica que la del señor Scott quien también ha sido responsable de indiferentes películas como Un buen año, Red de Mentiras e incluso Cruzada.
En esta breve semblanza, podemos notar que Ridley Scott es un veterano del cine de aventuras, pero incluso en él mismo se puede hacer la división entre el cine épico trascendente (Gladiador) y el de entretenimiento de fin de semana (Cruzada). La expectativa por Robin Hood optaba hacia algo similar a Gladiador, sin embargo, no es, en absoluto, tan trágica como ésta. Por el contrario, si Gladiador es una tragedia, en su caso, Robin Hood es una oda sin pretensiones de alarde mítico.
Independientemente de tratarse de una especie de precuela de la leyenda del justo ladrón, el argumento carece del crucial momento del clímax que lleva a los mordiscos de uñas. En su moderado ritmo, el destino no deja de sonreírle a los buenos, a pesar de las injusticias del tirano Rey Juan.
En el intento por mostrar un Robin lo más verosímil posible, el personaje ha perdido todo rasgo característico, incluyendo su arco, el cual es prácticamente sustituido por una espada. Y es que un personaje de estas magnitudes, como es Batman, el Rey Arturo e incluso El Santo, se forma a partir de símbolos y firmas, ya sea una máscara, una capucha, una frase, etc. De modo tal que no es el personaje quien porta dichos elementos; sino que son los elementos los que definen al personaje y que sin ellos no hay tal.
Quizá lo más complicado de la cinta tenga que ver con la multitud de aristas que trata de unificar, aunque sí se consigue el intento de Scott por presentar un Robin Longstride totalmente distinto, tan es así que el personaje es todos los héroes, menos el que supuestamente debía ser. Para obtener una idea, Robin Hood aparece como una fusión entre Gladiador y Corazón Valiente sin todos los condimentos trágicos de éstas.
Cuadro por cuadro
El director de Resident Evil, Paul W.S. Anderson será el responsable de readaptar la novela de Alejandro Dumas: Los Tres Mosqueteros, la cual contará con un reparto deslumbrante que incluye a Milla Jovovich, Orlando Bloom y el oscarizado Christoph Waltz, entre otros. *** Porque los rumores siempre son buena publicidad, ahora se escucha el murmullo de que Megan Fox podría estar fuera de Transformers 3, para ser sustituida por Gemma Arterton (Furia de Titanes, El Príncipe de Persia).