Big leaguers
¬ Juan Manuel Magaña viernes 12, Jul 2013Política Spot
Juan Manuel Magaña
Las fotos del encuentro fueron muy afortunadas. Estuvieron en las primeras planas, en los portales y hasta en la tele.
Afortunadas, sobre todo si se toma en cuenta que los partidos pasan ahorita las de Caín por los malos resultados de las elecciones. Cuando el PRD muestra su encogimiento.
Me refiero a las fotos del partido de béisbol en las que aparecen “jugando juntos” -ese es el significado político del hecho- el dos veces candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador y el jefe de gobierno del DF, Miguel Angel Mancera.
A invitación del Peje, Mancera lanzó la primera bola de la Liga de Veteranos de Béisbol que se lleva a cabo en el Deportivo Alianza de Tranviarios de México. Y hasta hubo breve discurso.
Según el gobierno capitalino, López Obrador agradeció la presencia de Mancera a quien le deseó éxito para gobernar “la ciudad de la esperanza, la ciudad del deporte y por qué no, la ciudad del béisbol”.
Se dirá bueno y qué que estén juntos, si Mancera ha sido capaz de juntarse y mostrarse hasta con la inefable Martita Sahagún, que ya es decir.
Pero en realidad lo del Peje y Mancera tiene su buen significado, más que el de la más reciente ocasión en que ambos coincidieron en el homenaje póstumo que el GDF organizó al escritor José María Pérez Gay, cuando el fundador de Morena aseguró que le tenía confianza a Mancera y dijo que es un hombre honesto y recto.
Hace unos días decíamos que frente a lo que viene, la cuestión petrolera, la parte más importante de la izquierda dejó ver una postura ya bastante articulada, tenga o no que ver con el PRD.
Dijimos: “Y la planteó sorpresivamente el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, al afirmar su oposición a reformar el artículo 27 constitucional y sostener que la postura de la izquierda es la que encabeza el ex candidato a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, de impulsar la reforma energética propuesta por Cuauhtémoc Cárdenas”.
Hay que decir que después de las elecciones que hubo en 14 estados, el país queda enfilado a dos procesos de la mayor importancia: la reforma petrolera que las fuerzas políticas piensan de manera distinta, y también la reforma fiscal.
Mientras un maltrecho PRD es llamado de nuevo por el gobierno federal a la mesa del Pacto, el otro sector de izquierda, el que jugará el papel más importante, exhibe de nuevo su alineamiento fundamental.
Por eso la foto muestra a dos big leaguers calentando el brazo. Y de aquí a septiembre.
