Las plazas disputadas
Ramón Zurita Sahagún viernes 5, Jul 2013De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Llegó la fecha fijada para los procesos electorales en 14 estados del país y, como siempre, los partidos contendientes adelantan vísperas y se asumen como ganadores de la jornada electoral.
Hay una gran variedad de posiciones en juego, aunque las más llamativas resultan ser el gobierno de Baja California y un puñado de alcaldías, repartidas en esa casi mitad de entidades del total que forman parte de la República.
Dentro de este compacto grupo de procesos electorales se coló un distrito de Sonora, donde el diputado electo suplente mandó asesinar al propietario, por lo que se encuentra vacante esa curul.
Pero resulta curioso que dentro de este segmento de elecciones, sean consideradas como de mayor peso específico las alcaldías que los congresos estatales, donde contar con la mayoría es fundamental para el partido que detenta el gobierno estatal.
Se olvidan, tal vez, que en los congresos locales se ven presupuesto, se aprueban y reprueban, según sea el caso, cuentas públicas y se discuten leyes, reglamentos y ordenamientos que competen a esas legislaturas.
Y es que las alcaldías, principalmente de las capitales, se convirtieron en un trampolín para acceder a las candidaturas a los gobiernos estatales.
Los dos contendientes al gobierno de Baja California, fueron, en su momento, candidatos a la misma alcaldía, donde uno perdió y el otro ganó, pero consiguieron su propósito de ser postulados al gobierno del estado.
Francisco (“Kiko”) Vega, candidato del PAN, fue alcalde de Tijuana, mientras que Fernando Castro, candidato del PRI, no lo logró.
De los actuales gobernadores, hay varios que fueron alcaldes, como son los casos del gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval (Tepic); de Tlaxcala, Mariano González Zarur (Apizaco); Tamaulipas, Egidio Torre Cantú (Ciudad Victoria); Campeche, Fernando Ortega (Campeche); Durango, Jorge Herrera Caldera (Durango); Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval (Guadalajara); Oaxaca, Gabino Cué (Oaxaca); Sinaloa, Mario López (Ahome); Estado de México, Eruviel Ávila (Ecatepec); Hidalgo, Francisco Olvera (Pachuca), entre otros, mientras que otros gobernadores fueron derrotados en su intentona de ganar una alcaldía.
Para esta ocasión, 12 de los 14 estados con comicios irán al relevo de gobernadores en tres años más y varios de los hoy aspirantes a alcaldes confían en que ganando van a representar a sus respectivos partidos en esa contienda.
De ahí, que las principales plazas en disputa sean, desde luego, la gubernatura de Baja California, donde priístas y panistas, anticipan la victoria.
Caso curioso que el PRD que en esta ocasión es partido pegote vaticina una victoria para ellos, como si con ello obtuvieran un triunfo contundente que le abonara algo a su partido.
Después del gobierno de Baja California, la segunda joya en disputa es el ayuntamiento de Puebla, con 3 mil millones anuales de presupuesto, donde priístas y panistas confían en ganar.
Enrique Agüera, candidato priísta y el panista Antonio Gali, sostienen una cerrada batalla electoral, donde se han dado con todo y se acusaron todavía de más.
Los dos son poseedores de una cuantiosa fortuna y representan una buena opción para sus partidos.
En tercer lugar se encuentran dos alcaldías veracruzanas, la de Boca del Río y la de Veracruz, con férrea disputa entre panistas y priístas. La familia Yunes convirtió a Boca del Río en su feudo particular y saben que de ganarla nuevamente uno de los hijos de Miguel Ángel (Miguel Ángel, candidato o Fernando, senador) sería el abanderado del PAN al gobierno de Veracruz en tres años más. La alcaldía del principal puerto del país es atractiva también y ya fue detentada por los panistas hasta en cuatro ocasiones.
Benito Juárez es la siguiente plaza en importancia en disputa, ya que se trata de un reducto de la izquierda que trata de mantener. Recuperarla es primordial para los priístas, que buscarán el triunfo a toda costa.
La capital de Oaxaca es parte fundamental de la estrategia de la izquierda y la derecha que van de la mano en busca de ese ayuntamiento. Los priístas están conscientes de que ganarla les puede dar el punch necesario para aspirar a gobernar nuevamente ese estado.
Ciudad Juárez fue un activo de los panistas, desde se lanzó la ofensiva por el gobierno estatal que consiguió el legendario Francisco Barrio. Luego, la plaza se trocó en priísta y por más esfuerzos del panismo, no han logrado su reconquista. Esta ocasión se presenta propicia para ello.
Mazatlán fue divisa panista por varios años, por lo que la disputa actual es sumamente cerrada.
Ciudad Victoria es epresentativa para el priísmo, ya que los dos más recientes gobernadores de Tamaulipas pasaron por esa aduana, donde Eugenio Hernández tuvo como sucesor a Egidio Torre.
Los demás ayuntamientos en disputa guardan su importancia, aunque en realidad la lucha se centra en esos cargos en disputa, donde los tres principales partidos nacionales están dispuestos a no ceder ni un ápice.
FETICHES
Los resultados electorales del próximo domingo permitirán conocer si la aportación de las dos principales figuras femeninas del PAN contribuyeron o no, para mejorar el voto obtenido.
Josefina Vázquez y Margarita Zavala aprovecharon la fiebre electoral en 14 estados para reaparecer políticamente, asistiendo a la mayoría de los estados con procesos electorales.
Ambas dejaron el semirretiro en que se encontraban, para convertirse en activos de su partido y motivar el voto en favor de los candidatos de Acción Nacional.
Se dice que las dos buscarán, en su momento, la posibilidad de impactar dentro de la sucesión del nuevo presidente del partido, que tendrá lugar en diciembre próximo, donde Gustavo E. Madero deberá decidir si participa y sus opositores elegir un buen candidato que pueda enfrentarlo y hasta derrotarlo.