Última llamada a las autoridades capitalinas
¬ José Antonio López Sosa lunes 1, Jul 2013Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Mucho se ha presumido desde el gobierno del Distrito Federal, en torno a los niveles de seguridad pública, comparándonos con otras entidades del país, y en efecto, hasta hace poco tiempo en la capital del país no había “levantones”, tampoco homicidios seriales intempestivos y menos aún, descuartizados o degollados por doquier como ocurre en Tamaulipas o Nuevo León (por citar dos ejemplos).
Ya hace algún tiempo aparecieron degollados en la zona de Milpa Alta, al sur de la ciudad de México, es de conocimiento público el levantón en el bar “Heavens” hace pocas semanas y ayer, una mujer descuartizada fue hallada en la Unidad Nonoalco Tlatelolco.
De acuerdo a la información dada a conocer por las autoridades en la entrada “A” del edificio “Juan Álvarez”, ubicado en la avenida Ricardo Flores Magón número 53, casi esquina con la calle Lerdo.
Eran las 11 de la mañana cuando en ese punto se halló una bolsa negra con el pie de una mujer, más tarde alrededor de las 3 pm en las inmediaciones del edificio “Presidente Juárez” (edificio de 14 pisos sobre la calle Lerdo) hallaron otra bolsa negra con el dorso de una mujer. Una tercera bolsa negra apareció con un zapato tenis y el sostén de una mujer.
¿Frente a qué estamos en el Distrito Federal?, las autoridades de justicia y seguridad pública no pueden permitir que este tipo de brutalidades se den con plena impunidad. De no resolverse este atroz delito en breve, puede detonar una serie de eventos trágicos y parecidos ante la falta de acción por parte de las autoridades, a cargo de Miguel Ängel Mancera. No se trata de implorar delitos de este calibre con un ánimo sensacionalista, simplemente el tema es la exigencia a las autoridades para que no permitan que esta ciudad, la más grande e importante del país, se convierta en lo que grandes extensiones de estados son ahora: tierra de nadie.
Así ha sido el comienzo de la escalada de violencia en las ciudades que lo han padecido, poco a poco ante la pasividad de las autoridades lo que fueron hechos aislados se convirtieron en cosa del diario. Esa es la alerta para la administración del gobierno capitalino.
Este hallazgo en Tlatelolco debe prender las alertas máximas en las autoridades, debe ser un lamentable y desastroso último aviso antes que la violencia escale a niveles insostenibles.
lopez.sosa@mexico.com
@joseantonio1977
www.formulaconfidencial.com.mx
