Ahí viene
¬ Juan Manuel Magaña martes 18, Jun 2013Política Spot
Juan Manuel Magaña
Se dice ya que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ha logrado ya la afiliación de 350 mil simpatizantes, cosa que superado las expectativas que se tenían para esta fecha.
La noticia es que está naciendo una oposición verdadera en México, en momentos que formalmente la oposición no existe.
El PAN ha quedado reducido a escombros, a una pocilga, según los mismos que lo han mangoneado, como el cuñado de Calderón, Juan Ignacio Zavala. Mientras, el PRD está en vías de convertirse en un cascarón tripulado por los chuchos, que son una bola de vendidos.
Según el dirigente de Morena, Martí Batres, el consejo nacional del organismo ratificó que se mantendrán al margen de los 14 comicios estatales del 7 de julio próximo, al considerar que no hay claridad en las ofertas políticas como para impulsar una coalición.
Por ahora, esa fuerza se concentrará en tres tareas fundamentales: la defensa del petróleo y de la economía popular; la constitución de todos los comités municipales, y las acciones encaminadas a alcanzar el registro como partido que les permita contender en los comicios de 2015.
El verdadero líder de esa oposición, Andrés Manuel López Obrador, ha sabido esta vez, a diferencia del 2006, moverse en aguas más tranquilas de la poselección para construir rápidamente la fuerza que millones de sus partidarios esperan.
No hay que olvidar que AMLO tuvo más de 16 millones de votos y que sorprendentemente fue el enemigo a vencer en las pasadas presidenciales, aun cuando sus detractores, especialmente la televisión, lo quería dar por muerto.
Por ahora, Batres explicó que es poco práctico contender en elecciones, por lo que se determinó acudir hasta 2015. Es ahí cuando, de volver con toda su fuerza, AMLO puede comenzar a hacer de las suyas, especialmente al descobijar por completo a los chuchos.
Por eso, dice Batres que el objetivo inmediato es avanzar en la organización del partido para contender en 2015 con un proyecto propio y para buscar ‘‘la transformación política, social y ética de la sociedad mexicana’’.
El asunto es que, guste o no, hay una importante oposición en el país que se había quedado sin partido y que ahora está por terminar de construirse su propia opción.
Es una fuerza que está probando todo lo contrario acerca de su satanización como violenta y radical. Esa es la gran noticia, es una fuerza que está optando por construir la vía democrática.