El ratón
¬ Juan Manuel Magaña lunes 10, Jun 2013Política Spot
Juan Manuel Magaña
Cayó un ratón en la ratonera. Pero no la rata. Que no se nos olvide. Que eso no aplaque la indignación.
José Manuel Sáiz Pineda, quien fuera secretario de Finanzas de Tabasco durante la administración del gobernador priísta Andrés Granier, robó, huyó y lo pescaron, como en el famoso título de una película de Woody Allen.
Fue a él al que le encontraron los casi 90 millones de pesos en efectivo —casi cien, pues- en una casa de su propiedad. Y lo sorprendieron mientras quería pasar a los Estados Unidos, para luego ser entregado a autoridades federales mexicanas en Reynosa, Tamaulipas.
¿Qué quería? Escabullirse como vil delincuente, pero no tenía visa, pequeño detalle.
El ex funcionario de Tabasco dijo que quería viajar al país vecino para ver a sus hijas. Pidió un pase provisional y asilo, que le fueron denegados. ¿Quién que quiere ir a ver a su hijas sin visa, antes de ser deportado a México, pide asilo político al gobierno estadounidense?
El tipo había sido citado a declarar, el pasado 5 de junio, pero no se presentó a la Procuraduría General de Justicia. En su lugar asistió su abogado Xavier Olea Peláez, quien aseguró que su cliente no llegó a la cita judicial porque no estaban dadas las condiciones para que compareciera personalmente, ya que “pudiera ser detenido o arraigado a su llegada”.
Apenas unos días atrás se le había visto en fotografías con su poderoso auto Ferrari, a la Carlos Romero Deschamps. Un modelo F430 valuado en 4.6 millones de pesos. A su abogado no le quedó más que decir que Sáiz ya era adinerado antes de ser funcionario público “y que él podría comprar lo que quisiera”.
Y, como dijo su abogado, el tipo se había comprado algunas motocicletas y hasta 10 trajes especiales completos para andar en ellas, que fueron incautados por la Procuraduría General de Justicia del estado el jueves 6 de junio. Pero no eran unas motocicletas cualquiera, lo eran modelos Honda R600, BMW F800 y dos Ducati tipo Monster y MB Agusta.
O sea, entre el automóvil, las motocicletas y el equipo especial, el tipo se gastó algo así como cinco millones 880 mil pesos. Está en fotos y ese es su aporte al impresionante show de la corrupción.
Si este cuate quería darse así a la fuga, lo menos que uno puede preguntarse es ¿y Granier?
¿Ese sí ya se fue? La mentalidad delictiva de su ex tesorero ubica al ex gobernador en esa fase de huída. ¿Lo habrá logrado ya?
Y además hay, al parecer, un ratoncito en el asunto, que sería Uriel Sánchez Barrios, chofer de Sáiz, que presuntamente transportó el dinero en efectivo en una Suburban blanca blindada.
El sujeto convirtió una pequeña vivienda del fraccionamiento Santa Fe, en la colonia Parrilla, en Tabasco, en una casa de tres niveles, con una decena de cámaras de vigilancia y fortificada con alambre de púas. Y a unos 500 metros construyó en sólo dos meses una residencia con acabados de lujo con un valor de siete millones de pesos de acuerdo a estimación de una arquitecta. ¿Ladrónde?