La mala impresión
¬ Juan Manuel Magaña miércoles 29, May 2013Política Spot
Juan Manuel Magaña
Esos del pacto dan mala impresión.
Dan la impresión de que no tienen nada qué hacer o de que sólo están matando el tiempo, leyéndose las manos como entre gitanos.
Será porque este es un tiempo de dejar malas impresiones. Y hasta se compite por a ver quién deja la peor. Ahí están el ministro Góngora y el descamisado magnate Azcárraga.
Pero los del pacto no cantan mal las rancheras con sus debates mediocres y sus discursos nada inteligentes. Se acusan de lo obvio, de lo que unos y otros se han criticado y hasta odiado para terminar todos convertidos en lo mismo.
Es el caso de la instalación de la mesa para negociar la reforma política electoral en el Pacto por México. El ambiente era de reproches de PAN y PRD hacia el PRI y de bravos revires de éste para aquellos.
El líder del blanquiazul, Gustavo Madero, recriminó la prevalencia de un ciclo perverso del autoritarismo en los estados. Y el dirigente priísta, César Camacho, le respondió que algo no tan bueno han hecho quienes habiendo logrado la alternancia no volvieron a beneficiarse con el voto.
¿Le ven ustedes alguna altura a esta calidad de intercambio? Madero reprochó que el autoritarismo, la opacidad y la impunidad se han acuartelado en los gobiernos estatales, y recordó que el PRI ha bloqueado históricamente las reformas necesarias para el país.
¿Acaso no se mordió la lengua? ¿Qué no se enteró de las gracias que hicieron Fox y Calderón?
Y luego el “chucho” Zambrano, administrador del PRD, se quejó de que vivimos en una disfuncionalidad institucional, y consideró necesario evitar el regreso al viejo régimen de partido de Estado o de partido cuasi único, del poder concentrado sin equilibrio verdadero de poderes, fuertemente centralizado, sin federalismo ni municipalismo real.
¿Pues no son los “chuchos” los que se la han pasado dinamitando la única opción de oposición competitiva que queda en este país que es el “Peje” López Obrador?
Y es que es ahora cuando faltan 40 días para las elecciones en varios estados del país, que los que aparentan estar unidos comienzan a comportarse como el comal y la olla. Las puras conveniencias.
En algo tuvo razón Madero. En que se supone que este país tiene 84 años de vida democrática. Pero con 13 estados en los que el PRI ha gobernado durante 78 años, y nueve estados donde ha gobernado durante esos 84 años. Y los que están en el pacto parecen sólo esperar un mejor reparto.