Peña Nieto a CNTE: “La Ley no se negocia”
Roberto Vizcaíno lunes 8, Abr 2013Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- Desde China, el presidente Enrique Peña Nieto les indicó a los de la CNTE que la ley se acata
- Chuayffet ha conversado con los gobernadores donde opera esta corriente para que apliquen sanciones y despidos
- El desarrollo y relanzamiento del país no puede esperar ni ser rehén de estos grupos, advirtió
Regreso a clases… | Trizas
Sobre advertencia no hay engaño. La clave de la solución de la batalla entre el gobierno de Enrique Peña Nieto y la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, la abominable CNTE, está en lo que ha venido diciendo el presidente Enrique Peña Nieto y en lo repetido por el secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet.
Ayer, durante su segundo día de gira por China, el mandatario mexicano fue por demás explícito:
“La ley no se negocia”.
Recordó que es el gobierno él único que tiene la atribución y obligación de usar la fuerza pública, sobre todo cuando están en riego los derechos de los ciudadanos.
Entrevistado sobre los hechos ocurridos en la Autopista del Sol y las reacciones de violencia de algunas fracciones de la CNTE en Oaxaca y Michoacán, Peña Nieto subrayó: “México no puede ser rehén de intereses particulares…”
Y reiteró lo advertido por él en Boca del Río el miércoles anterior respecto de que bajo su administración no habrá marcha atrás a la reforma educativa.
Y agregó:
“El gobierno agotará todas las vías de diálogo, de negociación y de acercamiento… pero lo que no se negocia, lo que no se pacta y no se acuerda es la aplicación de la ley.
“Y puede entenderse que se enfrenten resistencias, pero también debe haber una conciencia colectiva, una conciencia de todos, y asumir el compromiso de todos para que realmente podamos estimular el cambio en beneficio del desarrollo general del país.
“De lo contrario estaremos manteniéndonos en la pasividad y en la inercia que por sí sola no va a llevarnos a mejores condiciones, necesitamos impulsar el desarrollo y el cambio”, puntualizó.
Peña Nieto indicó que en este contexto el magisterio que hoy expresa sus inconformidades y resistencias respecto de la Reforma Educativa, tienen que tomar conciencia de que México debe hoy dar pasos acelerados hacia su transformación en todos los ámbitos, entre ellos el educativo, pues de lo contrario el país quedaría estancado.
Explicó que Asia ha vivido un crecimiento y desarrollo sin precedente durante los últimos decenios ante lo cual surge constantemente la pregunta de por qué México no puede hacer lo mismo.
Es por eso, entre otras cosas, agregó, “que no podemos ser rehenes de pretensiones particulares o de quienes se oponen al desarrollo”, afirmó.
Privilegiando el diálogo y una política de apertura para atender y escuchar a quienes tienen objeciones respecto de la reforma educativa para ampliar la explicación y alcances de esta reforma “donde caben algunas dudas y donde ha habido, me parece, desinformación”, dijo, su gobierno continuará adelante para hacer realidad la Reforma Educativa hasta en la escuela más alejada.
“Está muy claro… lo que es hoy una reforma para impulsar la calidad de la educación, no tiene marcha atrás…
“La ley no se negocia, la aplicación de un acuerdo, de una norma que ha aprobado el Constituyente Permanente tampoco se negocia, no puede apelarse a hacer valer un derecho en contra del derecho, eso está muy claro, y vamos a mantener esto en una ruta: del diálogo, del acuerdo, de escuchar pero también de hacer valer la ley.
“Y el gobierno estará siempre privilegiando espacios de diálogo, de acercamiento y de escuchar cualquier posición, pero, sin duda, lo que sí es inadmisible y es una posición clara del gobierno es que la ley no se negocia, la aplicación de la ley no está sujeta a negociación alguna”, indicó.
NO HAY OTRA
Reconocido como un buen jurista y mejor político, el titular de la SEP, el mexiquense Emilio Chuayffet reiteró:
“Sólo hay que ajustarse a la Ley”.
Y ha explicado en forma llana cuales son los límites de las acciones y reclamos del magisterio perteneciente a la CNTE –corriente dentro del SNTE que se concentra esencialmente en los estados de Chiapas, Oaxaca, Guerrero y Michoacán-, y que no van más allá de los derechos establecidos para una relación laboral:
“Si usted falta a su trabajo un día, ¿qué ocurre?”, preguntó Chuayffet a una reportera que lo entrevistaba.
Y él mismo respondió: “¡Pues le descuentan el día!, ¿no?… ¿y si falta más de tres días?… ¡le rescinden el contrato!, ¿no?… pues esa es la respuesta”, dijo el funcionario.
Los acontecimientos desencadenados por la CNTE en Guerrero y Oaxaca caminaron desde entonces más rápido que los dichos de Chuayffet durante el pasado fin de semana.
Luego del desalojo de maestros realizado por la Policía Federal Preventiva en la autopista del Sol, la dirigencia de la CNTE ha ordenado el asalto de las oficinas del PRD en Guerrero en venganza por la decisión asumida por sus diputados estatales de rechazar la contrarreforma impulsada por el CNTE.
De igual forma ha anunciado una movilización masiva y un paro de labores de maestros en las entidades donde mantienen un predominio.
Van directo al choque con el Gobierno. Y el Gobierno ha anunciado que su camino es el de aplicar la Ley, que si los maestros no acuden a clases serán despedidos.
Por ello el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong se reunió el viernes pasado con los gobernadores de Chiapas, Manuel Velasco; el de Oaxaca, Gabino Cue; el de Guerrero, Ángel Aguirre Ribero y con el de Michoacán, Fausto Vallejo, con quienes convino que no habrá modificación de la estrategia y decisión del presidente Peña Nieto de no evadir la confrontación con aquellos maestros que decidan realizar obstrucción de servicios públicos y vialidades y a la vez comenzar a aplicar la Ley a quienes falten a clases.
Habrá descuentos y despidos.
Si hubiere destrozos y daños punibles, entonces habrá juicios penales y civiles a líderes y golpeadores magisteriales.
Esa es la estrategia porque el Gobierno de la República no va a permitir retrocesos en la aplicación de la Reforma Educativa, les ha dicho a los suyos y al país entero el presidente Enrique Peña Nieto.
“Ningún intento de presión pondrá en riesgo la formación y desarrollo de las nuevas generaciones.
“Con el apoyo de todos los sectores sociales, cumpliremos los mandatos de este ordenamiento y llevaremos adelante la transformación educativa que exigen y merecen todos los mexicanos…
“El futuro de México depende en gran medida de lo que hagamos hoy por la educación de nuestros niños y jóvenes. Es por ello momento de mirar alto y lejos”.
El mensaje está enviado, y quien no lo quiera entender, que se atenga a las consecuencias.
El país entero espera que Peña Nieto cumpla porque simplemente la mayoría de los ciudadanos está harta de los de la CNTE, más que con los del SME.
