No perder rectoría del Estado
Ramón Zurita Sahagún lunes 11, Feb 2013De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
El PRI está encaminado para ir por la reforma energética, pero sin perder la rectoría del Estado sobre los recursos del país, ese es el gran reto que enfrenta.
Los priístas están decididos a discutir y aprobar ese tema, al igual que otros más, que son considerados como necesarios para el desarrollo del país.
El propio dirigente nacional del partido tricolor, César Camacho Quiroz, lo dejó en claro al responder sobre el tema energético y la reforma hacendaria, dos de los grandes proyectos que impulsa la administración del presidente Enrique Peña Nieto.
Cómo hacerlo, es lo que tiene que definir, aunque el proyecto se tiene listo, para discutirlo en el momento oportuno.
Los tricolores no quieren dejar pasar la oportunidad de enfocar sus reformas en los temas prioritarios que tanto se anunciaron durante la campaña electoral, ya que se trata de temas sensibles, pero que se consideran necesarios para convertirlos en motores del despegue económico.
Los temas se encuentran agendados, por lo que se deberá poner especial atención en la forma en que repercuten en los comicios locales que se celebrarán en 14 estados del país, donde el PRI evaluará si es real su repunte o si la elección presidencial fue solamente una quimera. El dirigente nacional del PRI se muestra confiado en que el triunfo corresponderá a su partido en cada una de las entidades en que habrá comicios.
De ellos, solamente uno, Baja California, podrá dilucidar en las urnas el partido que los gobernará por los siguientes seis años.
En los otros 13 estados se votará por presidente municipales y/o diputados locales. Los priístas saben que no será una elección fácil, ya que de los 14 estados con comicios locales, cuatro de ellos son gobernados por adversarios del partido tricolor y en otros más, las pésimas administraciones de militantes delPRI pueden sumir al partido en el caos. Puebla, Oaxaca y Sinaloa fueron ganados mediante una coalición formada por la izquierda y la derecha, mientras que Baja California se mantiene como el estandarte de Acción Nacional desde hace 24 años.
En los tres estados gobernados por ex militantes priístas adoptados por otras corrientes ideológicas, se ve difícil el triunfo de los del tricolor. Puebla se advierte con triunfos de la alianza que formarán PAN, PRD y Panal, principalmente. Oaxaca no encuentran los priístas quien los encabece en su propósito de rescatar posiciones y en Sinaloa pueden obtener algunos triunfos de resonancia, pero hasta ahí.
Donde el PRI sí puede soñar con la victoria es en Baja California, donde los dados se acomodan en favor del tricolor, si es que mantienen la unidad y marchan de la mano en busca de la victoria.
La candidatura de Fernando Castro Trenti fue bien recibida por los priístas y hasta logró el consenso entre militantes de otros partidos que encuentran en el diputado federal con licencia al político idóneo para ganar en las urnas y conducir los destinos políticos y económicos de la entidad. Castro Trenti consigue respaldos del Partido del Trabajo y de militantes perredistas que están en contra de que su partido forje alianzas con el Partido Acción Nacional.
En los restantes 10 estados el PRI presenta fisuras en muchos de ellos, en otros se advierte la aproximación de una debacle y en los menos se percibe la posibilidad de triunfos en las principales plazas.
Quintana Roo y Tlaxcala son dos entidades que se encuentran en la mira de la oposición, basada en la percepción ciudadana.
Veracruz se contempla como una dura lucha electoral, donde el cacicazgo de la familia Yunes en la zona conurbada de Veracruz, Boca del Río, Medellín, Alvarado, plantea una disputa interesante con los priístas. Chihuahua e Hidalgo son entidades en las que el PRI se ve triunfador, aunque más en el segundo estado que en el primero, donde los panistas tienen una fuerte base que les redituará algunas victorias.
Tamaulipas, Coahuila y Aguascalientes son claros ejemplos y se avecinan tiempos difíciles para Egidio Torre Cantú, Rubén Moreira Valdés y Carlos Lozano de la Torre, respectivamente.
Zacatecas y Durango son verdaderas incógnitas, por la presencia de la delincuencia organizada y las no tan buenas administraciones de Miguel Alonso Reyes y Jorge Herrera Caldera.
GINA TRUJILLO Y LA EDUCACIÓN
Sin duda, la mala educación es uno de los peores defectos de un político y más cuando este ya fue alcalde, diputado, federal, senador, dirigente estatal de su partido y ahora funge como subsecretario federal.
La tabasqueña Georgina Trujillo es uno de esos personajes que disfruta de ello, sin importarle el sitio en que se encuentra.
Hace unos días, la ahora subsecretaria de la Reforma Agraria, acudió a un velorio, de un paisano suyo y amigo de toda la vida y sin importar que estuviera frente al ataúd y con los deudos del fallecido, se la pasó enfrascada en su Black Berry, enviando mensajes y sosteniendo conversaciones evasivas. Ese es un recurso que la tabasqueña usa desde hace mucho tiempo, para aislarse de sus contertulios, sin importar de quienes se trate. Con la única que dejaba en paz el teléfono y los mensajes, era en las largas conversaciones que sostenía con su jefa política, Beatriz Paredes Rangel, a quien debe extrañar, ya que fue enviada como embajadora de México a Brasil.
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