Camacho le jala las orejas a Castro Trenti
Roberto Vizcaíno viernes 8, Feb 2013Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- El presidente del PRI le advierte que existen normas y tiempos y que por ahora sólo es un aspirante más
- Los otros son: Jorge Hank, Carlos Bustamante, Francisco Pérez Tejada y Eduardo Martínez Palomera
- Todo se decidirá en una Convención de Delegados y no por dedazo, afirmó Camacho
Suave como es, de trato siempre amable, el presidente del PRI César Camacho Quiróz reconvino al diputado federal Fernando Castro Trenti por haberse autodestapado como candidato del tricolor a la gubernatura de Baja California.
“Hoy, diríamos, en términos formales es (solo) un aspirante”, aclaró el dirigente nacional del tricolor durante una tamaliza con reporteros de la “Fuente” del PRI.
Luego subrayaría que en este partido ya no existen los dedazos, las designaciones verticales de candidatos. Casi como una advertencia para quienes pudieran intentar desde posiciones políticas de coordinación legislativa tratar de imponer a Castro Trenti.
De acuerdo a la apertura de su diálogo con los periodistas, podríamos señalar que Camacho Quiróz recurrió al pretexto de convocar a la tamaliza a los periodistas, para crear las condiciones de hablar de lo que realmente le interesaba.
Con esto inició el dirigente su encuentro con los reporteros:
“El proceso interno de Baja California está por iniciar, el proceso interno formal. Se expidió la convocatoria… (y) el proceso interno inicia con la presentación de una solicitud de quien considera tiene los apoyos que la convocatoria demanda para ser primero aspirante y después tener la condición de precandidato y, en su momento, candidato… pero el Comité Ejecutivo Nacional ( o sea él, César Camacho) no ha dejado de tener contacto con los siete aspirantes que han hecho pública su intención de participar”.
Es decir:
1) El PRI todavía no tiene candidato a gobernador en Baja California.
2) Los que quieran serlo, primero tienen que inscribirse como aspirantes, luego de recibir sus documentos el partido dirá si cumple con los estatutos y requisitos y entonces pasan a ser precandidatos, y finalmente la Convención de Delegados dirá quién de todos ellos es el candidato formal.
No es necesario aclarar que esta lectura de cartilla fue para Castro Trenti, quien, como Usted fue debida y oportunamente informado aquí mismo, se “autodestapó” desde su natal Tijuana el martes pasado como “el candidato de unidad” del PRI al gobierno de Baja California.
No sólo se lanzó e hizo pública su autopostulación, sino que dio conferencias de prensa, entrevistas radiofónicas y hasta convocó a mítines y reuniones de apoyo.
De ahí que ayer Camacho Quiróz haya dicho que él continuaba teniendo comunicación con los 7 aspirantes a esa postulación, entre ellos Castro Trenti.
Y es que entre los otros 6 aspirantes están nada más y nada menos que Jorge Hank Rhon, de quien Castro Trenti fue empleado primero en el municipio de Tijuana y luego durante la campaña de hace 6 años, cuando el hijo del Profe compitió y perdió la gubernatura frente al panista Guadalupe Osuna Millán.
Una contienda plagada de irregularidades y acciones para evitar que Hank ganara. Dentro de estas irregularidades se habló mucho de traiciones dentro de su grupo de campaña, que por cierto estuvo coordinada por Alcides Beltrones, hermano del padrino político-electoral ahora de Castro Trenti, de Manlio Fabio Beltrones.
Los otros aspirantes son también los alcaldes Carlos Bustamante Anchondo de Tijuana y Francisco Pérez Tejada de Mexicali, así como al industrial-maquilador Eduardo Martínez Palomera quien ha sido dos veces presidente municipal de Mexicali.
Se dice que entre todos estos existe un fuerte rechazo a darle su apoyo a Castro Trenti, porque todos ellos sí han ganado contiendas electorales, menos él.
Y es que el diputado federal nunca ha ganado una elección. Como lo informamos antes, todos los cargos que ha ocupado han sido gracias a la abierta ayuda del sonorense Manlio Fabio Beltrones.
La otra cuestión que hace olas dentro de las filas del priísmo bajacaliforniano es que Castro Trenti es ya más un chilango que un paisa.
Nació el 11 de noviembre de 1955 en Tijuana, Castro Trenti pronto emigró al DF para salir como abogado por la UNAM; fue luego delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor, así como de la Secretaría de Pesca y de la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca, todo eso como resultado de una decisión desde el Distrito Federal.
Su primera incursión en un proceso electoral fue en 1991 donde compitió por la diputación federal del sexto distrito de BC, sólo para resultar derrotado. Luego logró su primera diputación plurinominal en 2001 al Congreso de Baja California y en 2004 el alcalde de Tijuana, Jorge Hank Rhon, lo nombró secretario de Gobierno del Ayuntamiento, cargo que abandonó para ser senador pluri.
Hoy es diputado pluri (es decir, de lista no de votos directos), curul que ya dejó ayer libre al pedir licencia para competir por la candidatura a gobernador del PRI a B. C.
Reiteramos lo que indicamos hace dos o tres días: Analistas y políticos de Baja California advierten que su designación como candidato reúne todas las condiciones para que el PRI vuelva a perder la gubernatura del estado, pues Castro Trenti no tendrá los votos de los seguidores de Hank, ni de los otros tres precandidatos mencionados anteriormente.
CONSENSOS NECESARIOS
De ahí que es interesante lo señalado ayer en la tamaliza por Camacho Quiróz, quien respondió así a la interrogante de si luego de estar fuera 24 años de la gubernatura, era hora de que el PRI la recuperara en BC.
“Después de 24 años es hora de que el PRI aproveche la inercia que han construido, que han logrado los propios bajacalifornianos. En 2010 ganamos las cinco presidencias municipales; en 2012 ganó Enrique Peña holgadamente; ganamos la mayoría de los distritos electorales federales y diríamos que hemos hecho lo que se necesita para merecer el triunfo.
“Y no es un asunto de destino manifiesto ni de que ya nos toca, es un tema de trabajo, de capacidad para convencer y de construir consensos primero al interior del PRI y luego ser inteligentes, persuasivos, para convencer al electorado bajacaliforniano, que es especialmente exigente y a nadie otorga un voto de manera diríamos que espontánea y simple.
“El voto, y hacen bien, es expresión de una voluntad reflexiva y de un análisis concienzudo de los candidatos y también de la oferta política que ellos presentan”.
-¿Entonces el proceso no está cerrado… Castro Trenti no es todavía el candidato?
“No, no es el candidato… en los siguientes días los órganos internos del PRI determinarán, primero, si es precandidato. Hoy, diríamos que en términos formales, es un aspirante… incluso me atrevería a colocar un adjetivo: es un fuerte aspirante.
“Es un aspirante que está consiguiendo el apoyo de los integrantes del Consejo Político Nacional, de los eventuales delegados a la convención que ungirá al candidato y, el hecho de saber que otros aspirantes ya se han mostrado abiertamente apoyadores de su aspiración, es motivo de estímulo para el Comité Ejecutivo Nacional… Diría que las cosas van muy bien.
-¿Pero sería candidato único?, ¿es casi un hecho que va a ser candidato?
“Esto no depende de que lo declare el presidente (del PRI). Como van las cosas hasta ahora, lo perfilan como el candidato y si, en los siguientes días se van cumpliendo las etapas del proceso interno de selección, lo convertirán de aspirante en precandidato y, en su momento, en candidato.
-¿Sólo le falta trámite?
“Esto no es un asunto que el presidente del Comité Ejecutivo Nacional resuelva”.
-¿Es por convención de delegados?
“Convención de delegados, esa es la resolución del Consejo Político Estatal avalada por la Comisión Política Permanente del Comité Ejecutivo Nacional”.
Es decir, a Castro Trenti lo primero que le tiene que cuadrar, es que no va solo, y después, que hay reglas y tiempos y que por ello le falta todavía un buen de rato y de trabajo que hacer si quiere llegar a la candidatura.
Por lo pronto, todavía no lo es y quién sabe si lo vaya a lograr actuando como chivo en cristalería.