Los empresarios y los indocumentados

¬ José Antonio López Sosa martes 4, May 2010

Detrás del Poder

José Antonio López Sosa

La nueva ley promulgada por la gobernadora de Arizona nos lleva a reflexionar una vez más el fenómeno migratorio que se vive en los Estados Unidos, sobre todo en entidades limítrofes con México.

Por un lado, es bien conocido que el gobierno mexicano no ha tenido la capacidad de darle empleo a toda esa gente que decide aventurarse a cruzar ilegalmente a los Estados Unidos, esa me parece una de las razones sustanciales de dicho fenómeno social. Por otro, las empresas estadounidenses se han convertido en compradoras de mano de obra mexicana en ciertos nichos del mercado laboral, lo que genera un aparente círculo virtuoso donde el inmigrante llega y es requerido para cumplir con un trabajo bien remunerado.

Ahora bien, empresas y empresarios que contratan ilegales están muchas veces enteradas de ello y, lejos de ayudar a dicho inmigrante a tener documentos de estancia legal, fingen demencia y usan esta circunstancia a su favor pagando salarios más bajos y estableciendo condiciones de trabajo distintas a la ley, aún después de esa acción ilegal por parte del empresariado creen que coadyuvan en el desarrollo del inmigrante.

Muchos mexicanos que obtienen niveles gerenciales o de supervisión se encargan de contactar con indocumentados y contratarlos, a pesar que están cometiendo un delito, cuando la autoridad correspondiente llega a supervisar y detecta a los trabajadores indocumentados simplemente argumentan desconocimiento -o papeles falsos que desconocían- para evadir las multas, entonces la responsabilidad va completamente sobre el trabajador y no sobre el empresario.

Ahora que la ley Arizona se promueve, vale la pena retomar el tema de los inmigrantes a fondo, ¿habrá modo de crear responsabilidades parejas a empleador y empleado en estos casos? Para el empleador solo es un trabajador menos que será seguramente sustituido de forma ágil, nada más pasa, en cambio para el trabajador representa una deportación, una negación para reingresar a los Estados Unidos, dejar su familia, bienes, dinero y regresar a México con una mano atrás y otra adelante, ¿es pareja esta situación donde ambos tuvieron responsabilidades en el tema legal?

Finalmente, el gobierno mexicano no toca esa clase de temas, ellos sólo se avocan a contar los dólares que mandan nuestros migrantes a sus familias siendo ello uno de los tres principales ingresos del país.

NO CUMPLEN EN LA DELEGACIÓN BENITO JUÁREZ

Mario Palacios, jefe delegacional en Benito Juárez, se comprometió la semana pasada entre otras cosas a retirar a “don Memo”, un individuo que vive en la calle Aniceto Ortega de la colonia Del Valle, pero literalmente en la calle postrado en su camioneta y hojalateando carros en vía pública. Al día siguiente de la promesa fueron de vía pública a quitarle su herramienta, ayer ya estaba de vuelta como si nada pasara, ¿qué pasa pues con la gente que trabaja en la delegación?, ¿será que Mario Palacios es cómplice o actúa con omisión?

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