Casas de empeño irregulares afectan patrimonio familiar
* Especiales, Nacional martes 5, Feb 2013- Hace 15 años sólo había 40 instituciones de este tipo y actualmente ya rebasan las 6,500, de las cuales mil laboran ilegalmente
Las casas de empeño irregulares han provocado graves daños al patrimonio de los mexicanos, que “han caído en manos de agiotistas” que cobran tasas anualizadas hasta de 120 por ciento, advirtió el director general de la sociedad financiera Ficrea, Sergio Ortiz Valencia.
Refiere que hace 15 años sólo había 40 instituciones de esta índole y en la actualidad se calculan más de 5 mil 500 -de las cuales más de mil sin regulación de ningún tipo- en todo el país.
Asegura que estos establecimientos abusan de la pobreza de la gente y prestan el dinero en condiciones de robo, toda vez que toman a la gente desesperada, que ante la necesidad de recursos aceptan el dinero a sabiendas que será muy difícil cumplir con las exigencias.
“Las reformas y adiciones a diversos artículos de la Ley Federal de Protección al Consumidor para regular las casas de empeño evitará en muchas de ellas la arbitrariedad, abusos y engaños a los usuarios que por desconocimiento de lo que firman se convierten en víctimas de cobros e intereses leoninos”, puntualiza el directivo en un comunicado.
Estima que “alrededor de 40 millones de mexicanos, clientes recurrentes de prestamistas y casas de empeño, no tienen la posibilidad de acceder a ningún tipo de financiamiento de la banca, que no ha hecho un esfuerzo sustancial para acceder a estas personas ofreciendo productos financieros con intereses blandos”.
Lamentablemente, el sistema financiero en el país no considera esquemas para satisfacer las necesidades inmediatas de la población en cuestión de imprevistos y ello provoca que caiga en manos de verdaderos agiotistas.
Por ello, el director de la sociedad financiera Ficrea hizo un llamado a las autoridades federales para que se fortalezcan las campañas de concientización encaminadas al ahorro y a las instituciones reguladas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, a fin de establecer esquemas para satisfacer las necesidades de la población.