¿Qué está pasando?
¬ Juan Manuel Magaña martes 5, Feb 2013Política Spot
Juan Manuel Magaña
Una tras otra, las malas noticias traen por los suelos la imagen de México en el mundo.
La semana pasada el secuestro y ejecución de 17 integrantes -uno de ellos colombiano- del grupo musical Kombo Kolombia.
Hace unos días, la tragedia en Pemex en la que hasta ayer iban 37 muertos. Y ayer: la violación de siete turistas españolas en Acapulco por encapuchados.
La reciente noticia causó conmoción de inmediato. Sujetos armados irrumpieron en una casa de tiempo compartido en la playa Alfredo V. Bonfil, del poblado del mismo nombre, en la Zona Diamante de este puerto, donde violaron a siete turistas españolas.
Los hechos fueron informados por fuentes de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Guerrero.
De acuerdo a los primeros reportes, entre las 3 y 4 horas de ayer lunes, hombres fuertemente armados se introdujeron a una hospedería ubicada sobre el kilómetro 32 de la carretera Plan de los Amates-Barra Vieja, donde sometieron al personal e irrumpieron en el interior de las habitaciones de unos bungalows para ultrajar a las mujeres.
Se dijo que a las turistas se les brindó apoyo para que rindieran su declaración ante la Agencia Especializada de Delitos Sexuales y que fue iniciado un operativo policiaco especial en el poblado para investigar los hechos.
El asunto ocurrió cuando en México hubo luto oficial por lo ocurrido en Pemex, lo cual coincidió con el primer fin de semana largo del año que los turistas aprovecharon hasta saturar Acapulco en un 94 por ciento.
El contexto hace pensar en una intención más allá de la condenable agresión a aquellas mujeres: en que el acto criminal sea además un mensaje en sí del grupo criminal para gritar a los cuatro vientos que no hay poder que pueda frenarle.
Y parte de ese contexto es el hecho de que el gobierno de Guerrero ha mostrado franca incapacidad para garantizar la seguridad a la población, al grado de que ésta ha creado grupos de autodefensa en por lo menos 15 municipios del estado.
Esos grupos de autodefensa están resultando polémicos. Anteayer se supo de un segundo incidente armado de éstos contra la población civil, pues un auto con turistas provenientes del Distrito Federal fue atacado y al menos dos personas resultaron heridas en un retén en la comunidad de Las Mesas del municipio de San Marcos, cuando se dirigían a pasar el fin de semana en Playa Ventura.
El gobierno de Guerrero hizo en ambos casos lo que solo puede hacer en su impotencia: lamentar los hechos y ofrecer que se va a investigar.
Lo delicado es que su debilidad trasciende fronteras y no es sólo la imagen del estado sino la de México la que queda por los suelos.