¿Qué pasará con Granier?
Ramón Zurita Sahagún lunes 7, Ene 2013De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Nunca tan pocos le robaron a tantos, publicó a ocho columnas uno de los principales diarios de Tabasco, el último día del gobierno de Andrés Granier Melo.
El diario en cuestión (Novedades de Tabasco) establecía como cómplices del saqueo a tres personajes: Amílcar Sala Villanueva (cerebro del saqueo y prestanombre del fraccionamiento Altozano), Fabián Granier Calles (enriquecido con los actos de corrupción de su padre) y José Manuel Sáiz Pineda (endeudó al estado con diez mil millones de pesos, cómplice y beneficiario de este saqueo).
La indignación ciudadana en Tabasco es mayúscula y el juicio a la administración saliente es devastador, tanto que el discurso de toma de posesión de Arturo Núñez Jiménez tocó el tema y fue el aplauso más nutrido de su decálogo de gobierno.
Sin acusar a nadie en especial, ni mucho menos iniciar una cacería de brujas, el nuevo gobernante advirtió que nadie quedará impune y que los causantes del desastre en la administración pública serán castigados.
Y es que en Tabasco nadie entiende qué pasó en el gobierno saliente, donde el endeudamiento público aumentó considerablemente (400 millones de pesos en la gestión anterior y 10 mil millones —hasta el momento-, de herencia del granierismo), sin obra pública justificable y con tantos rezagos. ¿Qué pasó con Granier Melo?
Acaso fue engañado, ya que sus defensores aducen que el ex gobernador tabasqueño fue víctima de sus operadores y que de lo que se le puede culpar es de incauto.
Responsabilizan a su asesor y compadre, Amílcar Sala Villanueva; al ex secretario de Gobierno, Humberto Domingo Mayans Canabal; al ex secretario de Finanzas, José Manuel Sáiz Pineda; al ex secretario de Obras, Héctor López Peralta y al director de la Junta Local de Caminos, Francisco Vega Celorio, entre otros, de ser los principales beneficiarios del desastre tabasqueño.
El desastre del gobierno tabasqueño es tal que los hospitales se quedaron sin abastecimiento médico y sin alimento para los pacientes desde un mes antes de terminar el gobierno de Granier Melo.
Los pagos a proveedores fueron suspendidos y la administración saliente dejó sin recursos económicos a la entrante.
Tabasco viene a ser el mejor ejemplo de la improvisación de políticos, donde personajes no capacitados, pero populares se lanzan a la búsqueda del poder político, movidos como marionetas por políticos mediocres, pero ambiciosos, carentes de personalidad para ganar el voto ciudadano.
Andrés Rafael Granier Melo fue, hasta la elección, un químico identificado con el pueblo, accesible y conocedor de las carencias del pueblo, sin ambiciones políticas y con un talento especial para las relaciones humanas.
Todo eso lo cambió, cuando uno de sus maquiavélicos compadres le lavó el cerebro y lo convenció de lanzarse a la política, sin conocimientos previos en la materia. La situación sería sencilla, él mismo lo guiaría en el quehacer político.
Todo fue un fracaso, perjudicado por los elementos naturales y sin brújula alguna o faro que lo guiara a buen puerto, Granier Melo fracasó y sus amigos —y tal vez él mismo- se enriquecieron.
Si Granier Melo no se enriqueció con el erario público y con los contratos gubernamentales, varios más si lo hicieron y la responsabilidad es suya, por lo que tendrá que responder por ello.
Esos son asuntos por los que deberán responder las autoridades, aunque Tabasco inicia ahora una nueva vida, con un gobernante esperado desde hace doce años, con visión política y que asumió la administración pública estatal con enormes proyectos.
No se trata de un borrón y cuenta nueva, pero Arturo Núñez Jiménez fue enfático en lo que pretende hacer en los seis años de gobierno que tiene por delante.
Por inicio, anticipó, no encubrirá a nadie: “a esos no les espera el disfrute de rentas mal habidas: les espera todo el peso de la ley y la cárcel”.
Arturo Núñez Jiménez llega al gobierno de Tabasco en una situación difícil, donde la carencia de recursos será un gran obstáculo, ya que el presupuesto se encuentra etiquetado por la anterior administración, aunque su experiencia política y los contactos que mantiene en el gobierno federal, le permitirán encontrar las vías de financiamiento para ejecutar los programas anunciados.
Con una vasta experiencia que lo llevaron a ganar tres elecciones: la de diputado federal, la de senador y la de gobernador, aunado a su paso por la subsecretaría de Gobernación, la dirección del Infonavit y ser el segundo director del IFE, hacen de Núñez Jiménez uno de los políticos más completos del país y en ello radica parte de la confianza de la población hacia su gestión pública.
HUYERON
Como se está haciendo costumbre en gobiernos de alternancia, Andrés Granier Melo no acudió a la toma de posesión de Arturo Núñez Jiménez, aunque hay quienes señalan que no lo hizo por miedo a ser abucheado e incluso a ser detenido.
Los enterados aseguran que salió a temprana hora en vuelo privado con rumbo a Miami, para pasar un buen fin de año.
Quien sí acudió a la toma de posesión y aplaudió a rabiar cuando Arturo Núñez increpaba al anterior gobierno y anunciaba cárcel para los causantes del desastre tabasqueño fue Humberto Domingo Mayans Canabal, principal operador de Granier Melo y frustrado aspirante a la candidatura priista al gobierno estatal.
RAÚL OJEDA
Tres veces compitió, sin poder ganar, por el gobierno estatal César Raúl Ojeda Zubieta, un político bien visto en el estado y habilitado por Arturo Núñez Jiménez como secretario estatal de Gobierno, una de las designaciones más aplaudidas.
Estamos de regreso y esperamos que este sea un buen año para todos.