El adiós de Ebrard
Ramón Zurita Sahagún jueves 6, Dic 2012De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Marcelo Ebrard Casaubon se va del gobierno del Distrito Federal en busca de la oportunidad que desperdició en su mejor momento político: la anhelada candidatura presidencial. Sabe que será difícil en lo futuro, ya que en los actuales momentos, la izquierda se encuentra sumamente fragmentada y que son muy pocos los que le darían el respaldo necesario.
Careció de esos apoyos y la decisión cuando tenía estructura, poder y dinero para lanzarse a la aventura.
Marcelo deja una buena imagen como gobernante, aunque en lo político no supo tejer los acuerdos necesarios y mostró ser un personaje sumamente voluble.
Estableció contacto con el gobernador mexiquense, Enrique Peña Nieto (hoy Presidente de la República), pero mantuvo distancia con el Ejecutivo federal, Felipe Calderón Hinojosa, durante más de cuatro años.
Intentó, pero jamás pudo construir una base de seguidores dentro del propio partido y fracasó en impulsar un coordinador de los diputados, tampoco consiguió introducir a su candidato (Mario Delgado) a sucederlo y optó por un aliado. Y aunque anunció que dedicará tiempo para construir su candidatura presidencial, son muchos los que opinan que será una tarea sumamente difícil de realizar.
Eso sí, el gobierno del Distrito Federal le sirvió a Marcelo para cambiar de estado civil en varias ocasiones. Con el triunfo trocó su estado de soltero a casado, a soltero y nuevamente a casado.
Por eso, el ahora ex jefe de gobierno se va satisfecho y con una nueva ilusión, su reciente matrimonio con Rosalinda Bueso, con la que podrá pasar ahora sí todo el día e ir a los eventos que elijan.
Desde su matrimonio con su tercera esposa, Marcelo decidió que lo acompañaría a todos lados y así lo hizo sentir en cuanto lugar se veía su presencia.
Si eso hacía como jefe de gobierno, como ciudadano lo podrá disfrutar más.
Como todo gobernante que se precie de serlo, Ebrard deja el gobierno con un gran número de obras inconclusas, pero inauguradas por él, para que la ciudadanía lo recuerde, aunque no se sabe si con gusto o disgusto. La fiebre de las inauguraciones le ganó y la línea 12 del Metro, la Supervía, la ampliación del segundo piso, entre otras, las entregó, sin importar que no estuvieran terminadas.
Ahora le corresponderá a Miguel Ángel Mancera concluirlas.
El nuevo jefe de gobierno asumió con los mejores augurios, en una ceremonia lucidora, de gran pluralidad, con invitados de alto nivel político.
Asistieron gobernadores de distintas tendencias, priístas, panistas y perredistas, coordinadores legislativos, ex jefes de gobierno que le antecedieron en el cargo y aunque no acudió el Presidente de la República, sí envió un representante de nivel, el llamado supersecretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.
Después de muchos decires, Mancera Espinosa pudo constituir su gabinete, donde repitieron algunos nombres (Héctor Serrano, Gobierno y Armando Ahued, Salud) y causó sorpresa la incorporación de Salomón Chertorivski, ex secretario de Salud federal, hasta hace unos días, quien fungirá como secretario de Desarrollo Económico, aunque la gran sorpresa es Cuauhtémoc Cárdenas, quien asume la Secretaría de Asuntos Internacionales. El gabinete de Mancera es novedoso, aunque incluye personajes como el ex senador perredista Carlos Navarrete, secretario del Trabajo; Miguel Torruco Marqués, secretario de Turismo y Hegel Cortés, Desarrollo Rural.
Mara Robles, secretaría de Educación; el ex procurador, Jesús Rodríguez Almeida, Seguridad Pública y Rosa Icela Rodríguez, Desarrollo Social.
El coordinador de Comunicación Social es Fernando Macías.
MANZUR, POR MURILLO
La salida de Jesús Murillo Karam de la Cámara de Diputados provocó que la LXII Legislatura se quedara sin un representante de alto nivel del círculo cercano del presidente Enrique Peña Nieto.
El nuevo titular de la PGR desempeñó esa tarea de manera exitosa, por lo que hay quienes se apuran para ocupar esa vacante, aunque habrá que ver si tienen el nivel para ello.
José Manzur, coordinador de los diputados federales del Estado de México, trajina en esa ruta, aunque deberá mantener mesura para ello, ya que de otra forma será visto como un simple recadero.
El mexiquense recorre el salón de sesiones de un lado a otro, llevando y trayendo mensajes entre los coordinadores y así no se tejen las alianzas, ni mucho menos se desarrollan las estrategias.
Es cierto que tiene relación con el círculo cercano al Ejecutivo federal, pero de no mostrar las aptitudes para ello, le será difícil concretar algo.
MÁS MEXIQUENSES AL GABINETE
Dos mexiquenses más se incorporan a la administración pública federal. Se trata del alcalde de Huixquilucan, Alfredo del Mazo Maza y el secretario de Gobierno del Estado de México, Ernesto Nemer Álvarez.
El primero rindió su III Informe de Gobierno el martes pasado y quedó libre de compromisos, aunque culmina su gestión el 31 de diciembre. Se habla que irá a Banobras o Fonatur.
Nemer Álvarez renunció a la Secretaría General de Gobierno y fue nombrado subsecretario de la Sedesol.
Lo cierto es que se trata de dos de las caras más conocidas de la estructura del gobierno del Estado de México y será buena su contribución en el gobierno federal.
LUJOS DE GOBERNADORES
Cuántos fueron los gobernadores que llegaron de manera elegante en sus respectivos helicópteros para asistir a la toma de posesión de Miguel Ángel Mancera Espinosa. Fueron varios, aunque se desconoce el costo por el aterrizaje de sus naves en el helipuerto de una cadena radiofónica.
Entre los que ahí descendieron se encuentran Mariano González Zarur, Tlaxcala; José Calzada, Querétaro; Francisco Olvera, Hidalgo, y Rafael Moreno Valle, Puebla.