Los nuevos ministros
Ramón Zurita Sahagún viernes 23, Nov 2012De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Finalmente, los senadores se pusieron de acuerdo y en la segunda intentona consiguieron elegir a los dos nuevos ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
No hubo sorpresa alguna, ya que los personajes seleccionados fueron los favoritos Alberto Gelasio Pérez Dayán y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, ambos con la currícula suficiente para acceder a esos cargos.
Alberto Gelasio tuvo 104 votos favorables de los 128 componentes del Senado de la República, mientras que Alfredo Gutiérrez registró uno menos (103).
En el expediente del nuevo ministro Gutiérrez se encuentra un apellido de prosapia política, Ortiz Mena, ya que Alfredo es nieto del legendario Antonio Ortiz Mena, dos sexenios secretario de Hacienda y uno más director del IMSS, además de eterno dirigente del BID. También es sobrino político de José Patrocinio González Garrido y un poco más lejano de Carlos Salinas de Gortari.
Uno, Pérez Dayán, relevará a Guillermo Ortiz Mayagoitia, y el otro, Gutiérrez Ortiz Mena, hará lo propio con Salvador Aguirre Anguiano, ya que ambos ministros pasan a retiro.
No es la primera ocasión en que las ternas presentadas en primera instancia son rechazadas desde comisiones por los integrantes del Senado de la República, por lo que se hace necesario incluir nuevos nombres, que le parezcan más convincentes a los legisladores.
Para conformar esta nueva terna, fue necesario que Gutiérrez Ortiz Mena renunciara al SAT, donde venía desempeñando una estupenda labor, aunque se acercaba ya el término de su gestión, ante la eventualidad de una nueva baraja propuesta por la administración entrante. Lo interesante de estas dos selecciones, es que la SCJN dejó de ser ya el cementerio de políticos caducos que encontraban refugio en el Poder Judicial, una vez que veían concluidas sus aspiraciones.
Se privilegia ahora la carrera judicial -con sus excepciones- y se pretende que la Corte tenga un nuevo rostro, con personajes experimentados, pero al mismo tiempo que aporten frescura.
Eso sí, las mujeres siguen quedando marginadas de los espacios de ministro, donde solamente se ubican un par de ellas, Olga María del Carmen Sánchez Cordero y Margarita Beatriz Luna Ramos, sin que en los últimos ocho años pudiese incorporarse otra más. Cada una de las ternas presentadas en esos ocho años ha contado con la propuesta de alguna mujer, pero los senadores no han dejado pasar ni una de ellas y se recuerda que en el caso de la ministra Luna Ramos, pasó en una segunda ronda.
Por eso, algunos se preguntan sin restar méritos a los seleccionados una y otra vez, si los senadores padecerán algún problema de misoginia o qué.
Sin embargo, los senadores hacen caso omiso de ello y decidieron desempolvar una minuta de la Cámara de Diputados, en la que se establece que los directores generales de las dependencias del gobierno federal dejarán de formar parte del Servicio Civil de Carrera.
Con esto, se busca que el nuevo gobierno que asume el 1 de diciembre tenga libertad para designar a cerca de 4 mil nuevos servidores públicos en esos cargos. De los actuales, solamente poco más de 400 aprobó los exámenes correspondientes y se quedarán en los cargos, aunque los otros 4 mil serán despedidos.
Emilio Gambo Patrón, coordinador de la bancada del PRI, negó que se trate de una revancha contra simpatizantes y militantes panistas y refirió que hace 12 años, en ocasión del triunfo de Vicente Fox Quesada, los priístas que se encontraban en esos cargos públicos, presentaron sus renuncias y se fueron sin ninguna objeción.
Hoy les corresponde hacer lo propio, para dejar las vacantes, aunque se hará mediante una reforma legal, para desterrar del Servicio Civil de Carrera las direcciones generales y las adjuntas, que hasta ahora pertenecían a ese núcleo, que pretendía mejorar la eficiencia dentro del sector público. La nueva administración pública federal debe encontrar espacios (libres) para los funcionarios que reúnan los requisitos y ser contratados, explicó la presidenta de la Comisión de Gobernación, la priísta Cristina Díaz. Con la reforma a la Ley Federal de Servicio Profesional de Carrera, que elimina el inciso A, del artículo 5, deberán dejar sus plazas 3 mil 937 funcionarios.
De acuerdo con las cifras del tricolor, quedarán fuera del próximo gobierno mil 914 directores generales y 2 mil 495 directores generales adjuntos.
La reforma fue aprobada en comisiones, gracias a los votos de los senadores del PRI y PRD, quienes criticaron los resultados que han entregado las administraciones del PAN.
Durante la discusión, los senadores de Acción Nacional consideraron que se trata de una reforma regresiva, ya que el Servicio Profesional de Carrera ha servido como una herramienta para la contratación y permanencia de profesionales, cuya labor no está relacionada con criterios políticos o partidistas. El panista Javier Corral lamentó la aprobación de los cambios, por considerar que representan una regresión en el combate a la corrupción. Pero si de trabajo legislativo se trata, los diputados del PRI rechazaron la iniciativa de Felipe Calderón para cambiar el nombre de nuestro país.
A Calderón Hinojosa le pareció importante que una semana antes de que se vaya, se cambie el nombre actual y pase a ser, simplemente México, en lugar de Estados Unidos Mexicanos, como se llama el país desde 1824.
La simplificación del nombre ya había sido planteada por algunos con anterioridad, aunque no se había plasmado en una iniciativa de ley.
Sin embargo, los diputados priístas de la bancada que encabeza Manlio Fabio Beltrones la desecharon, por considerar que hay otras iniciativas de mayor importancia que deben ser analizadas, antes que ésta.