Nuestro propio Hugo Chávez
¬ José Antonio López Sosa jueves 22, Nov 2012Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Ayer en una de las últimas giras de Felipe Calderón por La Piedad, Michoacán, el Presidente dio muestra de sus dotes de cantante, tal como lo hiciera en repetidas ocasiones el mandatario venezolano Hugo Chávez, tomó el micrófono y cantó frente a un auditorio, que así hubiese berreado, se volcó en aplausos hacia él. De este simpático hecho, me cuestiono con seriedad ¿qué tanto parecido hay entre Hugo Chávez y Felipe Calderón?
Comenzaré por definir sus diferencias, Hugo Chávez cree en la reelección perpetua y Calderón respeta (o no le queda más que respetar) el sistema presidencialista mexicano de la no reelección y el plan sexenal.
Ahora bien, Hugo Chávez a lo largo de su gestión ha tomado al ejército como bandera política por su procedencia militar, Calderón sin ser militar, ha tomado al Ejército también como su bandera política a lo largo de su mandato.
En la administración del presidente Chávez, la corrupción ha privado por doquier, las nacionalizaciones son cosa del diario y el control de los medios de comunicación existe simulando una libertad de expresión. En la administración de Felipe Calderón, la corrupción empató o inclusive rebasó los niveles que existían antes del año 2000, las privatizaciones son el espíritu de este gobierno, cosa casi tan dañina como las expropiaciones, asimismo, los medios de comunicación están controlados por los presupuestos de comunicación social con la simulación de una libertad de expresión.
El presidente Chávez siempre tiene la razón, regaña periodistas y jamás se le ha escuchado decir “me equivoqué”. Felipe Calderón siempre tiene la razón, no se atreve a confrontarse a los periodistas que le critican en serio y jamás en su mandato hemos escuchado un “me equivoqué”.
Chávez tiene como herramienta la retórica populista para decir que todo va bien y es por el bien del pueblo, el presidente Calderón tiene la misma retórica, asegurando que vivimos mejor y que tenemos un México más sólido y más seguro.
Así podría continuar narrando similitudes, uno a la extrema izquierda y otro a la extrema derecha, ambos sin cumplir los postulados de ambas ideologías, Chávez haciendo un capitalismo de Estado bajo el nombre de socialismo y Calderón haciendo un capitalismo de cuates bajo el lema de vivir mejor.
¿Quién se parece a quién?, me pregunto entonces.
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