La Llorona, los presagios para el fin de una era
Espectáculos jueves 1, Nov 2012- ¡Ay, mis hijos!.. Te espera en Cuemanco
- Xochimilco se reivindica con un montaje teatral que muestra el valor de sus chinampas con teatro, danza y música, disfrutada a bordo de sus trajineras
Gloria Carpio
Venta de boletos en Ticketmaster ($231.00) y en taquilla del Embarcadero de Cumenaco ($190.00). El costo del boleto incluye el paseo en trajinera.
Hay lujos que sólo podemos usufructuar quienes vivimos en el Distrito Federal y en este momento, de cara a las festividades del “Día de Muertos”, existe un montaje de teatro único en el mundo que fusiona: el agua de los canales de Xochimilco, el viento nocturno que se convierte en idioma al peinar los ahuejotes, los sonidos de las aves que moran en las chinampas y una obra teatral basada en la leyenda con más arraigo en la cultura mexicana: La Llorona.
El ballet cuenta con 30 elementos, que interactúan con los tres actores que escenifican la leyenda, una actriz, Patricia Ordaz, interpreta a “Meztli”, que es La Llorona, otro actor interpreta a Andrés de Castilla y otra más a la narradora, que concluye cuando la mujer se ahoga en el lago.
Y es que La Llorona continúa penando por barrios, chinampas y pueblos de Xochimilco y sus habitantes se niegan a dejar morir su cultura, sus tradiciones y sus creencias.
La obra está dirigida por el maestro José Delgado Castillo, director del grupo multidisciplinario “Mez-Me Música Teatro y Danza”.
A lo largo del montaje usted podrá escuchar música prehispánica y contemporánea, con instrumentos anteriores a la colonia, cantos en náhuatl y coreografías de danza.
Destaca también la participación de más de cien remeros xochimilcas, que aunque usted no lo crea, forman parte del espectáculo, pues el montaje comienza desde el momento en que las personas se embarcan en las trajineras en Cuemanco y se dirigen a la laguna de Tlilac, en forma de comando, para observar una singular iluminación de las chinampas a base de antorchas y luego contemplar la pirámide de 12 metros de altura que fue construida por los pobladores como una coreografía y aporte a este montaje.
Y otro valor agregado es la pirotecnia que se ofrece al final de la función y el vestuario de los danzantes a base de plumas. En la producción de este montaje participan casi 500 personas, entre vecinos, remeros, policías, vendedores de distintos antojitos, toda vez que otro atractivo es la amplia gastronomía que se ofrece en esta temporada.
Los organizadores recomiendan dos cosas. Primera, no llegar al centro de Xochimilco, pues el embarcadero de Cuemanco se encuentra sobre Periférico y segundo, no ir “comidos”, ya que no podrán resistirse a la gastronomía que se ofrece, entre cuyos antojitos se hallan las enchiladas “trajineras”, los esquites, las más de 20 variedades de camote y frutas en almíbar, los tlacoyos y las quesadillas.
El montaje comenzó a ofrecerse todas las noches desde el pasado 20 de octubre y sólo habrá funciones hasta el 18 de noviembre, con una función y dos los sábados y domingos. Allá nos vemos..
