Peña se reúne con gobernadores del PRD, y cierra el círculo
Roberto Vizcaíno jueves 25, Oct 2012Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
- El vocero de los mandatarios perredistas fue el gobernador de Morelos, Graco Ramírez
- EPN se mostró satisfecho por los resultados del encuentro y prometió una relación permanente con ellos
- El presupuesto de 2012 tendrá partidas para cumplir con los proyectos de los gobernadores perredistas
Al reunirse con los 4 gobernadores perredistas y el Jefe de Gobierno electo del DF, Enrique Peña Nieto dio quizá el paso político más importante previa su toma de posesión del 1 de diciembre próximo.
Con ello no sólo anula a Andrés Manuel López Obrador y su ya pequeño círculo de acelerados, sino que cierra el círculo de encuentros con todos los mandatarios estatales que gobernarán al parejo de su mandato, para definir el perfil democrático de su gobierno.
Este último encuentro, antes de asumir el gobierno federal, es sin duda el más importante golpe político que consolida la paz social y la gobernabilidad democrática que requiere México para comenzar a avanzar hacia su desarrollo.
Reunidos a puerta cerrada en un salón del hotel Marriott de la zona de Santa Fe, localizado a dos cuadras en línea directa a la Universidad Iberoamericana donde Peña Nieto vivió uno de sus episodios más desagradables y complejos durante su campaña electoral, el Presidente electo, sus coordinadores de transición y los mandatarios perredistas vivieron el encuentro más largo y quizá fructífero que haya tenido el mexiquense.
El encuentro con los gobernadores priístas apenas duró una hora y media y con los panistas no fue más allá de dos horas.
Luego de estas reuniones no se habló de temas como los abordados ayer con los perredistas.
Lo planteado por Graco Ramírez luego del encuentro, advierte que Peña Nieto se ganó a los mandatarios perredistas, que sus acuerdos satisficieron sus demandas y que lograron caminar sobre visiones similares.
El morelense advirtió que él y sus compañeros representan la segunda fuerza política en México y que esa fuerza tiene tras de sí cuando menos al 25 por ciento de los mexicanos.
Y que además estos están mayoritariamente ubicados en el sureste, una región por demás pobre y distante como distinta de las entidades del norte.
El reclamo entonces a Peña Nieto fue el de entrarle para disminuir la brutal asimetría que existe entre los dos Méxicos, el del norte y el del sur.
La obviedad indica que los gobernadores perredistas Graco Ramírez de Morelos, Arturo Núñez de Tabasco, Gabino Cue de Oaxaca, Ángel Aguirre Rivero de Guerrero y Miguel Ángel Mancera, Jefe de Gobierno electo del DF hablaron además de dinero.
Por ello al final Peña Nieto señaló que instruyó a Luis Videgaray que en el paquete presupuestal para 2013 que ya negocia junto con el equipo del presidente Felipe Calderón para ser presentado al Congreso, se incluyan los proyectos de los estados donde gobiernan o gobernarán los perredistas.
Graco, quien habló a nombre de los perredistas, subrayó que el encuentro con Peña Nieto se realizó bajo el principio de dejar de lado las diferencias para privilegiar nuestras coincidencias.
Y estas coincidencias parten de ir por una reforma fiscal y hacendaria más equitativa; de respetar el Estado de Derecho y de buscar el fortalecimiento de Pemex, empresa que deberá continuar bajo el dominio de todos los mexicanos.
“Planteamos el acuerdo hacia una gobernabilidad que reafirme la democracia y no la regresión política y que garantice el trabajo junto con todas las fuerzas del país, para establecer las bases de un nuevo régimen político en México.
“Hemos decidido con el presidente electo Peña Nieto realizar lo necesario para fortalecer al Estado mexicano, y por supuesto al Estado de Derecho y coincidimos en que la legalidad no es negociable.
“Los ciudadanos, en esta última elección, votaron mayoritariamente por un cambio y nosotros somos la plataforma progresista, somos gobernadores progresistas que tenemos clara nuestra responsabilidad con los ciudadanos que representamos en nuestro país que por cierto es el 25 por ciento de la población…
“Somos la segunda fuerza política, y entendemos que ese rumbo es el que también plantearon los ciudadanos en las urnas en la pasada elección.
“Vamos a trabajar por una reforma fiscal y haciendo de Pemex una empresa estatal fuerte y competitiva, que siga siendo de los mexicanos y hemos planteado la necesidad de un nuevo pacto social para que no se excluya a millones de jóvenes de la expectativa de estudio y del empleo… vamos a invertir en educación y a gastar menos en persecución”, indicó Ramírez.
Acompañado de Peña Nieto, el gobernador Ramírez recordó que además de la ciudad de México, los otros 4 gobernadores perredistas presentes, gobiernan el sureste mexicano cuya asimetría con las entidades del norte del país es brutal.
“Hemos coincidido en que la asimetría del sur y el norte es muy grande y que urge atender esa simetría y fortalecer al sur del país… es el compromiso de la equidad y es el nuevo federalismo que queremos construir y por supuesto hemos planteado que, en el marco de la Conferencia de Gobernadores vamos a trabajar todos para construir un nuevo pacto federalista y una reforma hacendaria con mayor equidad fiscal.
“Queremos decirles (anunció) que hemos tomado la decisión de asistir el 1 de diciembre a la toma de posesión del presidente constitucional Enrique Peña Nieto en el Palacio Legislativo de San Lázaro”, concluyó.
CIVILIDAD Y MADUREZ
El Presidente electo agradeció a los gobernadores y al Jefe de Gobierno electo, su disposición para asistir al encuentro y para establecer un diálogo franco a pesar de las diferencias existentes entre ellos.
Colocados al centro del gran salón del hotel Marriot de Santa Fe, todos ellos coincidieron con Peña Nieto es que:
“No obstante las diferencias políticas que son parte de nuestra normalidad democrática, también demostramos que podemos trabajar por objetivos compartidos, de privilegiar nuestras coincidencia para lograr condiciones de mayor bienestar para los mexicanos”, indicó.
El mexiquense explicó que durante este encuentro se abordaron los temas que están en la agenda de prioridades del gobierno que él habrá de encabezar a partir del 1 de diciembre como son los de seguridad, desarrollo económico y el social.
“Y en alcance a este último en particular, he dejado mi compromiso de apoyar e impulsar proyectos de infraestructura y de desarrollo social para el sureste de México, reconociendo que el sureste mexicano es donde está el mayor rezago y pobreza de México”.
El compromiso fue entonces, dijo, “para que juntos asumamos las tareas que nos permitan superar las condiciones de pobreza y para revertir esta condición”.
E informó que instruyó a Luis Videgaray, quien está encargado de planear el paquete presupuestal para 2013 conjuntamente con el equipo del presidente Felipe Calderón, para que en este paquete se incluyan los proyectos de los gobernadores Ramírez, Núñez, Cué, Aguirre y Mancera a fin de comenzar a caminar juntos en el esfuerzo de sacar adelante los programas económicos de sus estados.
“Es la muestra de que podemos trabajar en beneficio de todos de que, en democracia y en pluralidad, sí es posible dar mejores resultados.
“De que en un clima de acuerdo y civilidad política es posible dar forma al diseño de proyectos y objetivos que incidan en elevar las condiciones de bienestar y calidad de vida de los mexicanos”, precisó.
Señaló que el encuentro marca el inicio de una relación positiva y constructiva.
Al concluir sus intervenciones ante decenas de reporteros, corresponsales, fotógrafos y camarógrafos los gobernadores, sonrientes, se despidieron con abrazos del Presidente electo y prometiendo encuentros futuros tanto en grupo como en forma individual.