Volver a empezar
Ramón Zurita Sahagún viernes 12, Oct 2012De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Manuel Espino Barrientos está decidido a recuperar los espacios políticos perdidos en el pasado reciente.
El ex dirigente nacional del PAN, quien fue excluido de ese partido, busca nuevos caminos y el sábado habrá de ver si esa nueva ruta elegida lo conduce a la fundación de un nuevo partido político.
Como en el caso de Andrés Manuel López Obrador, Espino Barrientos pretende formar su nuevo grupo con algunos militantes actuales de Acción Nacional, partido donde mantiene amarres y amigos, a pesar de haber sido expulsado.
La intención de Espino conlleva medir si con los seguidores que tiene le bastan para realizar las asambleas necesarias en cada una de las 32 entidades del país, para organizarse y participar como partido, con candidatos propios en la contienda federal de 2015.
Al evento de lanzamiento del movimiento de Manuel Espino han sido invitados, lo mismo militantes panistas que de otros partidos y ex militantes de otros más que buscan mantener su estatus político. Sin embargo, no son pocos los panistas que definen que mantienen relaciones con Espino, pero que no están de acuerdo en sumarse a su causa de fundación de otro partido.
Incluso, hay quienes explican que sería mejor que Manuel buscara en su momento reingresar al PAN, una vez que termine la actual administración federal.
Varias veces diputado y poseedor de un estilo político frontal, cercano al afecto de la familia Fox-Sahagún, pero enemistado con varios de los grandes dirigentes del partido blanquiazul y un crítico certero del presidente Calderón, Espino terminó respaldando la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto, por encima de la de la abanderada propuesta por Acción Nacional, Josefina Vázquez Mota.
Con todo y ello, el propio Espino negó la posibilidad de ser incorporado al gabinete presidencial que iniciará funciones el 1 de diciembre, por lo que decidió explorar la vía de conformación de un nuevo partido político.
Espino y sus seguidores deberán definirlo pronto, ya que cuentan con tiempo perentorio, para realizar su solicitud en tiempo y forma, ya que los plazos fatales para ello se vienen encima.
En eso lo aventaja López Obrado0r, quien ya se encuentra a la búsqueda de los respaldos necesarios para pedir el registro de su partido y poder competir con las siglas del mismo en los comicios federales del 2015.
No son pocos los que consideran que, de decidirse Espino Barrientos y sus seguidores, el proceso electoral que habrá de realizarse en tres años podría contar con dos nuevos partidos políticos, los que vendrían a sumarse a los siete ya existentes: Revolucionario Institucional, Acción Nacional, de la Revolución Democrática, del Trabajo, Movimiento Ciudadano, Verde Ecologista y Nueva Alianza.
EN LA CORTE NO HAY EQUIDAD
Nuevamente, las mujeres parecen quedar marginadas de los espacios importantes de la vida del país, como lo es la Suprema Corte de Justicia.
Las ternas conformadas para elegir de cada una de ellas al sucesor de los dos ministros de la Corte que se retiran el mes próximo no traen como favoritas a las mujeres para alcanzar el alto rango.
El máximo tribunal del país cuenta con un total de 11 ministros, de los que solamente dos de ellos son mujeres (Olga Sánchez Cordero y Margarita Luna Ramos), lo que representa menos del 20 por ciento de los miembros. La equidad de género no parece ser una preocupación para el Ejecutivo saliente, como ha dejado constancia en los nombramientos realizados entre los miembros de su gabinete, en que la figura femenina no es muy recurrente.
Si dentro del gabinete del gobierno federal escasean las mujeres en los cargos de primera línea, también lo están en otros sitios como es la ya mencionada Suprema Corte de Justicia de la Nación.
La propuesta enviada por el Presidente de la República al Senado de la República incluye en su primera terna los nombres de Alberto Pérez Dayán, Pablo Monroy Gómez y Andrea Zambrano, de cuya terna saldrá el relevo de Aguirre Anguiano. Para reemplazar al ministro Ortiz Mayagoitia se tomaron en cuenta los nombres de Emma Meza Fonseca, Manuel Baráibar y Rosa María Temblador.
En ambos casos, los favoritos para adjudicarse la mención son Pérez Dayán, en el primero de ellos y Baráibar, en el segundo, aunque esa será tarea de los senadores definir cuáles de ellos son los nuevos ministros de la Corte.
Lo sorpresivo de las ternas es que no fueron incluidos los nombres que fueron filtrados en diversos espacios, como posibles componentes de cada una de las dos ternas.
Ni magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, ni mucho menos consejeros del IFE o abogados pertenecientes al Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, ni otros que se promovían solos, lograron colarse en las ternas. Los seis personajes propuestos son todos ellos magistrados de circuito, con larga carrera en el Poder Judicial. Los dos que sean escogidos por el Senado de la República, asumirán sus cargos a partir del 30 de noviembre, fecha fijada para el retiro de los dos ministros jubilados.
NO PRESTARÁN EL REGISTRO
Dante Delgado, fundador y guía moral del hoy Partido Movimiento Ciudadano asegura que no prestarán el registro para que desde esas siglas se edifique Morena (Movimiento de Regeneración Nacional), el partido que busca formar Andrés Manuel López Obrador. Siendo el hoy Movimiento Ciudadano uno de los partidos más beneficiados por las alianzas formadas con el PRD y aval de AMLO en cada una de sus elecciones, se pensó que a este partido le podría convenir ceder sus siglas al nuevo organismo, aunque, por ahora, Dante lo niega.