El último grito, pero no el grito final de Calderón
¬ Claudia Rodríguez lunes 17, Sep 2012Acta Pública
Claudia Rodríguez
Tal vez la noche del sábado 15 de septiembre (minutos antes de las once de la noche, por aquello de que las Televisoras tenían que entrar a tiempo para la pelea estelar de boxeo originada en Las Vegas, Nevada), haya sido el último grito del señor Felipe Calderón con motivo del aniversario CII de la Independencia de México, pero seguro que no será el grito final que el panista dé, pues seguro muchos lo verán fuera de sus casillas e histérico por varios asuntos que durante su administración no fueron finiquitados.
A Calderón lo seguirá sin lugar a duda toda su vida y en el devenir de la historia, su estrategia de guerra o lucha en contra del narcotráfico y el crimen organizado.
La inimaginable cantidad de mexicanos muertos por esta acción —dejando de lado si fueron criminales o “bajas colaterales”—, y en el corto plazo, muchos manotazos habrá de dar el panista que aún habita la residencia de Los Pinos, por la posibilidad de que sea llevado ante el Tribunal de La Haya por las posibles violaciones de derechos humanos vinculadas a esta lucha a la que se vincularon policías, soldados y marinos.
Felipe Calderón también heredó un problema internacional —marca Genaro García Luna—, con el caso de la francesa Florence Cassez, acusada del delito de secuestro en México y sentenciada a 60 años de prisión en nuestro país, y de lo que aún no se ha dicho la última palabra sobre todo por el alto activismo al respecto que desde la Francia no pocos y sí muchas personalidades importantes tienen aún en la mira.
En el 2009, la administración calderonista dio lugar a la desaparición de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro (CLyFC) y con esto, la liquidación del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME); y aunque ya la Suprema Corte de Justicia validó estas acciones, los del Sindicato no se han dado por vencidos y para ellos el caso no está cerrado, por lo que Calderón tendrá que seguir dando explicaciones aún a su pesar y deslindado del Poder Ejecutivo que aún lo ampara.
Aunque ahora apena mucho llamar a cuentas al ex secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio como responsable de los festejos del Bicentenario de la Independencia y sobre todo, por el mega escándalo financiero y de corrupción respecto a la llamada “Estela de Luz”, es muy viable que Calderón en algún momento tenga que subir el tono de su voz y su discurso para deslindarse de tan vergonzosos gastos con cargo a la Nación. No pocos dentro del Partido Acción Nacional (PAN) y mexicanos, le exigen ya a Calderón, dé explicaciones sobre su grado de intervención en las pasadas elecciones federales y que dieron como presidente electo al priísta Enrique Peña Nieto.
La lista de asuntos pendientes para Felipe Calderón como responsable de esta administración federal, es aún mayor, pero lo importante es resaltar que al panista le quedan muchos momentos para mostrarse iracundo y soberbio, y sus gritos, continuarán.
Acta Divina…En su última aparición en el balcón central de Palacio Nacional, el pasado 15 de septiembre, el presidente Felipe Calderón lanzó las arengas del CII aniversario de la Independencia Nacional.