Nuevo medicamento contra la diabetes
Elsa Rodríguez Osorio viernes 14, Sep 2012Cápsulas de la salud
Elsa Rodríguez Osorio
- 6º Congreso Nacional de Médicos Mexicanos
- Infecciones por arrojar chicles a la vía pública
La diabetes afecta a más de 7 millones de mexicanos, genera 227 muertes al día y su atención representa para el país un gasto aproximado de 8 mil millones de dólares al año. Boehringer Ingelheim y Eli Lilly informan que la (Cofepris) autorizó la comercialización en México de un nuevo medicamento de prescripción médica que se utiliza junto con la dieta y el ejercicio para mejorar el control de los niveles de glucosa en sangre. Se trata de una innovadora opción de tratamiento que combina dos antidiabéticos en un solo comprimido: Linagliptina y Clorhidrato de Metformina. La doctora María Elena Sañudo, gerente médico de la empresa, indica que debido a lo complejo de la enfermedad, muchos pacientes necesitan más de un fármaco para controlarla adecuadamente, por lo que la nueva opción terapéutica ofrece una opción simplificada que potencializa el efecto de ambas moléculas mejor que si se administraran por separado.
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Más de mil médicos asistirán al 6º Congreso Nacional de Médicos Mexicanos que se realizará el 27 y 28 de septiembre en el Centro Médico Nacional Siglo XXI del IMSS. El congreso se ofrece de manera gratuita a todos los médicos y tiene puntaje con valor a certificación. El objetivo es promover la educación continua y la actualización acerca de cuáles son los padecimientos más frecuentes que sufren los mexicanos, diagnóstico y tratamiento ideal para lograr el restablecimiento de la salud. Se tocarán temas como: cáncer prostático, cáncer de ovario, influenza, neumonía, enfermedad por reflujo, trastornos metabólicos, dolor y padecimientos pediátricos. Informes para inscribirse al congreso contacto@medicosmexicanos.com.mx, http://www.medicosmexicanos.com.mx
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Un chicle masticado y arrojado en la vía pública es un foco de infección y un riesgo para la salud, ya que alberga hasta 10 mil bacterias y hongos recogidos del medio ambiente en que se encuentra, afirma Víctor Calderón Salinas, científico del Departamento de Bioquímica del Cinvestav. Cada chicle contiene los microorganismos de la propia persona que lo masticó, por ejemplo, si ésta padece tuberculosis, salmonelosis o un estafilococo, al desecharlo en el piso esas bacterias se esparcen en el aire y también se le acumula polvo, tierra e inmundicias de la ciudad. La situación se vuelve preocupante, cuando se sabe que aproximadamente 20% de la superficie del Centro Histórico está cubierta de chicles, y a pesar de que existen máquinas especiales para desintegrarlos y removerlos del suelo, la cantidad supera el presupuesto para el mantenimiento de las máquinas y la velocidad con la que se vuelve a llenar de chicles la calle, no permite ver avances. Un chicle cuesta 25 centavos y eliminarlo del piso cuesta 75 centavos. El científico recomendó que en lugar de arrojarlos al piso, hay que envolverlo en un trozo de papel o envoltura del mismo producto y depositarlo en un contenedor de basura. ¡No hay que ser cochinos!
