Vivir sin amigos…
¬ Claudia Rodríguez miércoles 12, Sep 2012Acta Pública
Claudia Rodríguez
“Vivir sin amigos no es vivir”, es una de las frases más conocidas y legado de Marco Tulio Cicerón; escritor, político y orador romano a quien se le conoce sobre todo por sus tratados sobre la senectud y la amistad.
Cicerón no fue ningún improvisado antes de dedicarse de lleno a la literatura. Con estudios en derecho, oratoria y filosofía romana fue elegido senador e incluso llegó a gobernar la provincia de Sicilia, por lo que se entienden los elementos de los que el escritor disponía para decretar que vivir sin amigos, es no vivir.
El pasado lunes, Enrique Peña Nieto declaró que un presidente no tiene amigos.
El lugar y el momento en que Peña Nieto expresó lo anterior, vale la pena ser contextualizado.
En el Museo Nacional de Antropología y frente a más de 200 personas consideradas como los líderes más influyentes del país, así como de algunos de sus colaboradores más cercanos del grupo de transición, el Presidente electo advirtió que su estilo de gobierno será el consenso y que sólo buscará la ayuda de los presentes en la reunión para sacar adelante al país.
Es claro que Peña Nieto intentó subrayar que el “compadrazgo y el amiguismo” no reinará en su administración, como hemos visto y comprobado los mexicanos en los distintos gobiernos de cualquier color y partido, y cuya práctica ha beneficiado económicamente a sólo unas cuantas familias mexicanas, alejándolas cada vez más de la capacidad adquisitiva y el nivel de vida de casi todos los mexicanos.
Personalmente, creo que el priísta debe desde ahora ser claro en sus planteamientos, aunque diga que no gobernará con el discurso, ya que la amistad no tiene nada que ver con la conveniencia y es además -la primera claro-, signo de fortaleza, equidad, justicia, bondad y razón.
Así que espero que el decreto peñista sobre la amistad y el presidente, no sea un símbolo de su gobierno y que en este no se encuentre sino desigualdad, injusticia y sin razón.
Baltasar Gracián, filósofo español, nacido en 1601, acuñó la siguiente frase: “Triste cosa es no tener amigos, pero más triste debe ser no tener enemigos, porque quien enemigos no tenga, señal de que no tiene: ni talento que haga sombra, ni valor que le teman, ni honra que le murmuren, ni bienes que le codicien, ni cosa buena que le envidien”.
Acta Divina… Frente a los líderes más influyentes de México, Enrique Peña Nieto, presidente electo declaró: “Tengo claro que un Presidente de México no tiene amigos, un Presidente de México está comprometido con un único interés: el avance de la República; los beneficios para todos los mexicanos”.