Grietas y filtraciones
Francisco Rodríguez jueves 15, Abr 2010Índice político
Francisco Rodríguez
¡CRACK! LA ESTRUCTURA institucional del país está agrietada, a punto de desplomarse. Hay, en efecto, cada vez más grandes grietas políticas a través de las cuales escurren filtraciones periodísticas que ponen en nuevo escandaloso jaque a la administración y a sus opacos personajes.
Dos filtraciones, dos, en menos de 24 horas.
En una primera, la agencia estadounidense AP da a conocer que la “guerrita” de Felipe Calderón contra el narcotráfico ya ha producido 22 mil 700 muertos, de acuerdo a documentos oficiales entregados la tarde del lunes a senadores de la República.
Se trata de una cifra muy superior a las muertes contabilizadas por los medios de comunicación. Una verdadera masacre, en la que están incluidos miles de civiles, y entre ellos, cientos de adolescentes y decenas de bebés e infantes. Lo peor: que no hay resultados positivos.
Filtración, por supuesto, achacada a alguno de los legisladores presentes en la reunión privada, quien habría hecho llegar a la Associated Press el documento sobre el que trabajaron los secretarios del despacho ahí presentes, ante los otrora llamados padres conscriptos.
Filtración, además, que provocó el enojo del cada vez más pálido -en todos los sentidos- Fernando Gómez Mont, cual hicieron sentir sus palabras en una conferencia de prensa convocada para reprender al gobernador coahuilense Moreira -por las declaraciones que éste habría hecho, lo que por demás es cierto- pero en la que se habló de todo, cual botica a la que han reducido a la dependencia alojada en el palacete de los Covián.
Otra filtración, tanto o más delicada que la anterior, se produjo justo cuando Gómez Mont hablaba en Bucareli.
En otro espacio geográfico, Genaro García Luna, titular de la SSP, platicaba con periodistas. Habían convenido que se haría off the record, que nada de lo que ahí se dijera se publicaría. No obstante, el colega Ricardo Alemán hizo ayer la crónica de las partes relevantes del encuentro, donde se citan las desarticuladas palabras del también desencuadernado personaje, quien se lanzó contra el fundador del semanario Proceso, Julio Scherer García, lo mismo que del alcalde de San Pedro, Nuevo León, Mauricio Fernández, y del aspirante priísta a la gubernatura de Sinaloa, Jesús Vizcarra.
García Luna quiere a los tres declarando ante la PGR.
A Julio Scherer hasta lo quiere encarcelar:
De Scherer, de acuerdo a Alemán, a quien cito: “yo lo hubiera llamado a declarar”. Y dice más; “cuando le preguntamos al procurador -al titular de la PGR-, dijo que analizaría bien el asunto”. Tampoco se quedó ahí el secretario de Seguridad Pública federal; “…si yo me entero del encuentro y existe flagrancia, los meto a la cárcel a lo dos”; al periodista y al narcotraficante.
Del alcalde neoleonés: “En el caso del panista Mauricio Fernández, dice García Luna que son tan abrumadoras las evidencias, y el propio alcalde declaró que contrató a criminales vinculados con el narco. Luego matizó: “Parece que Fernández ya declaró en tres ocasiones ante la PGR”.
De Vizcarra: Respecto a Jesús Vizcarra, García Luna dijo que hay muchas cosas poco claras, como su presunta relación con Ismael Zambada (El Mayo) -vínculo que se acredita en una fotografía tomada hace 20 años, donde aparecen Vizcarra y El Mayo-, además de una versión que presuntamente vincula a los dos anteriores con el encuentro de Scherer y El Mayo. Explica García Luna. “Una versión dice que la fotografía de Scherer y El Mayo busca quitarle lo caliente a la fotografía de El Mayo y Vizcarra… y la relación de eso se explicaría porque el hijo de Scherer estaría en el equipo de campaña de Vizcarra”. Y aclaró, “es una versión que corre”.
Enloquecido, García Luna tiene para todos. Principalmente en contra del periodista Scherer -y de su hijo-, cuya revista ya fue presentada alguna vez como “arma mortífera” en fotografías difundidas por la SS.
¡Crack! Hay grietas. Por eso se dan las filtraciones.
¡Cuidado! ¡Esto se va a caer!
Índice Flamígero: Una vez más, las instalaciones de la revista Contralínea fueron allanadas y robadas. Su director, Miguel Badillo, sufrió le pérdida de su equipo de cómputo, lo que hace sospechoso este nuevo robo de equipo y materiales de contabilidad. En esa publicación en la que se denuncia la corrupción oficial se desempeña también la colega Ana Lilia Pérez, autora del libro “Camisas azules, manos negras”, que en una democracia auténtica ya hubiese provocado la caída de Felipe Calderón y de César Nava. Ambos sufren represión física y judicial. Ahora, este otro asalto. Abrazo solidario a todos los colegas de Contralínea.