En la justicia, la mediación transita: juez Jaime Armendáriz Orozco
* Especiales, Seguridad miércoles 5, Oct 2011- El titular del Juzgado Vigésimo Sexto de lo Civil del DF asegura que es la forma más segura para la solución de un conflicto
Gloria Carpio
(Primera de tres partes)
Desde hace un par de años, el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF) ha impulsado el sistema de mediación en la capital del país, como un mecanismo que pueda reducir la carga de trabajo del Poder Judicial, al tiempo que se promueve entre la sociedad una sana resolución de sus controversias, sin la necesidad de entablar un juicio formal.
La principal característica de esta modalidad de justicia alternativa es que las partes en conflicto tienen la oportunidad de entablar un diálogo directo, en presencia de un mediador profesional, en el que buscan llegar a un acuerdo que resulte satisfactorio para ambas partes, en el que sean ellos mismos quienes planteen los términos y plazos en los que habrán de saldar su disputa, o las vías a través de las cuales darán por concluido el problema en cuestión.
El trabajo de los mediadores que forman parte de este proceso es el de facilitar el encuentro de voluntades entre los sujetos en controversia y explicarles, conforme a la ley, cuáles son las mejores alternativas a su disposición para alcanzar una solución, para que, una vez alcanzado el acuerdo, el mediador será el encargado de verificar que dicha solución quede plasmada por escrito, como una muestra del compromiso que las partes adquirieron.
Gracias a la flexibilidad de este medio de justicia, un caso que en los juzgados tarda meses o años en ser concluido (debido a los tiempos procesales que exige la ley), puede estar resulto a través de la mediación en cuestión de días o semanas, lo que claramente es un importante beneficio para aquellos que están interesados en poner fin a sus conflictos legales.
En cuestión económica, el sistema de justicia alternativa es generalmente más barato que un juicio ordinario, pues idealmente, un abogado debe cobrar menos por llevar a su cliente ante el mediador, que ante el juez, ya que como se ha dicho, en la mediación son los mismos interesados quienes dan respuesta a sus propias controversias.
Con la intención de promover este sistema como una vía rápida y sencilla de atención a los posibles desacuerdos entre miembros de la sociedad, el TSJDF inauguró el año pasado el Centro de Justicia Alternativa del DF, que se encuentra frente a las instalaciones de los juzgados civiles, en la calle Niños Héroes. A la fecha, este espacio ha demostrado su efectividad, reduciendo de manera significativa la cantidad de asuntos que el tribunal atiende diariamente.
La mediación ha comenzado a operar la válvula de escape de una olla exprés a punto de estallar, en la que (con los años) se convirtió la impartición de la justicia.
Y es que esta olla exprés, en sentido figurativo, la constituye el rezago que ha sido imposible abatir por los tribunales, en razón de que a cada juzgado, sea civil, mercantil o familiar, ingresan anualmente en promedio 2 mil 500 asuntos, los que se acumulan porque al mismo tiempo los jueces deben continuar con los trámites de los asuntos rezagados de años anteriores.
De ahí que aquella iniciativa, que al ser lanzada se interpretó como quimera o utopía, ha comenzado a mostrar sus bondades y a liberar las circunstancias que genera el rezago en la impartición de justicia.
El fenómeno es digno de reflexión porque al paso que vamos muchos asuntos que se creían “trabados” o sentenciados a dormir el sueño de los justos, han comenzado a despacharse dejando satisfechas a las partes y resolviendo el factor que implica el desgaste emocional y económico de un litigio, pero sobre todo, dejando intacta la certeza en el estado de Derecho.
Para los estudiosos de las ciencias jurídicas analizar la mediación como medio autónomo de solucionar conflictos, debe ser elemental y equivalente a los principios que rigen el derecho positivo mexicano.
A ello obedece que decidimos exponer algunos comentarios de quienes han sido estudiosos de esta nueva forma de impartir justicia, el abogado Jaime Armendáriz Orozco, con larga trayectoria dentro de la Judicatura, al haber recorrido todos los peldaños de la estructura judicial, desde secretario de acuerdos, juez de paz, del arrendamiento inmobiliario y actualmente es el titular del Juzgado 26 Civil del Distrito Federal.
Sus palabras tienen contenido en este tema, en razón de que Armendáriz Orozco tiene nombramiento de árbitro y mediador en materia mercantil internacional, otorgado por la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin).