Por qué Morena no
Carlos Ramos Padilla lunes 27, May 2024Se comenta sólo con…
Carlos Ramos Padilla
Bajo ningún estímulo de fanatismo o inclinación me han pedido señalar por qué Morena, el Presidente, su candidata y su “movimiento” han perdido credibilidad y aceptación. Enumeraré los más significativos, pero los más trascendentes.
Morena es la consecuencia de la traición de López Obrador a diferentes partidos que lo toleraron, la patrocinaron y promovieron como el PRI y el PRD.
Porque el activismo del Presidente siempre ha sido atentatorio al Estado de Derecho y juramentó gobernar para TODOS los mexicanos y ha incumplido.
Porque se impuso por una “ambición personal”, dicho por Sheinbaum.
Por su insistencia de ir a Badiraguato y no a auxiliar a las víctimas como la Línea 12, a los acapulqueños porque le tienden “emboscadas” o son “provocadores”. “Esas fotos eran usadas por gobiernos corruptos”, dijo.
Por liberar a delincuentes como Ovidio Guzmán, por imponer una amnistía muy a su estilo.
Porque usó a los pobres como “estrategia política”, declaración de AMLO.
Porque este será el sexenio más violento y corrupto de la historia contemporánea.
Porque se nos ha mentido intencionalmente: gasolina a 10 pesos el litro, no habrá cuates ni compadrazgos, regresaré a los soldados a sus cuarteles, se acabará con el huachicoleo, la rifa del avión presidencial, la revocación de mandato, el juicio político a los ex presidentes, cárcel a los corruptos por el aeropuerto de Texcoco.
Por intentar quedarse a las instituciones nacionales e internacionales: ONU y OEA.
Por hacer creer que las pensiones y programas sociales son de él y él es el que las otorga, no el Estado.
Por la tremenda radicalización y división social, usando menosprecio y descalificaciones.
Por usar los recursos nacionales para su ególatra promoción.
Por impulsar a una candidata mentirosa que vive bajo la sombra de muertos y que deja a la CDMX con contingencias ambientales diarias y crisis de agua.
Por justificar, defender y proteger a sospechosos de irregularidades como Marcelo Ebrard, Manuel Bartlett, Rocío Nahle, Epigmenio Ibarra, Mario Delgado, Florencia Serranía, Ana Gabriela Guevara, Clara Brugada, Hugo López-Gatell, Layda Sansores y muchos, muchos más. Ningún morenista está en la cárcel.
Por proteger a los delincuentes, sicarios, asesinos y narcos.
Por atacar, manipular e insultar al Poder Judicial de la Federación, INE, INAI, UNAM, mientras oculta los ilícitos en el Insabi o Segalmex o Pemex o CFE.
Porque no le importa que se carbonizaran a migrantes en una estación del gobierno federal.
Por estar investigados por la DEA.
Por destruir a la educación nacional, menospreciar a los aspiracionistas, dejar morir a mexicanos durante la pandemia, convertir al país en un enorme cementerio clandestino, tratar de humillar y censurar a columnistas, periodista, reporteros y medios de información.
Por asilar y proteger a tiranos, dictadores y hasta delincuentes colocando a la diplomacia mexicana en un lamentable descalabro.
Porque su propia familia es rechazada y bajo solicitudes de indagatorias judiciales.
Porque hay madres arañando la tierra mexicana buscando despojos de sus hijos.
Por hacer de Ayotzinapa un circo barato.
Porque AMLO dice que no quiere calles con su nombre, pero impulsa obras faraónicas costosísimas para su satisfacción personal.
Porque presionan a los ancianos, marginados y trabajadores a votar por el “continuismo”.
Por humillar a las fuerzas armadas y confrontar a las Iglesias.
Porque no pudo ni siquiera imponer al beisbol como deporte nacional.
Porque ven al pasado para flotar y dejan ir al futuro por un populismo insultante y anacrónico.
Por mentir y traicionar.
Porque hay homicidios, pero según AMLO son violencia.
Porque permiten que en este país un niño con tres tiros en su cuerpo grite “no me quiero morir”.
Y todos estos puntos no tienen escondites ni siquiera alguna motivación para el debate, son hechos comprobables e inobjetables.