La cueva de Alí Babá
Alberto Vieyra G. viernes 29, Sep 2023De pe a pa
Alberto Vieyra G.
¡Nos volvieron a saquear…! ¿Pues no que vivimos en el régimen de “no mentir, no traicionar y no robar”? Pues sí, en el régimen de “los abrazos, no balazos” pareciera que revivimos la cultura sexenal del saqueo que además nos recuerda aquella película de 1954 en argentina en blanco y negro que se estrenó con bombo y platillo como La cueva de Alí Babá y los 40 ladrones.
En la película se cuenta que Alí Babá salió en busca de todos sus asnos y los reunió en la entrada de la caverna para cargar todo lo que pudiera llevarse, eligiendo entre aquellas riquezas los que más le convenía: el oro, la plata acuñados en relucientes dinares, tomanes, cequíes, piastras, escudos y libras. Había que llevarse todo porque los que llegarían serían muy ladrones.
La historia de Alí Babá retrata ni más ni menos que a un Andrés Manuel López Obrador que con sus burros disfrazados de obras faraónicas y de falta de medicamentos en los hospitales de México, que está cargando con todo en el año de Hidalgo o de Carranza, por aquello de que el de Hidalgo ya no alcanza y de pilón el 2024 será un año electoral y habrá que saquear a la nación para perpetuar al partido del Presidente en el poder y seguir avanzando hasta conformar una nación comunista de pobres.
¿De qué tamaño será el saqueo a la nación azteca que, hasta la “corcholata” favorecida por AMLO con el atolito con el dedazo se está gastando nuestros dineros públicos en pomposos anuncios panorámicos en la Quinta Avenida de New York, Estados Unidos, cuando la elección presidencial será en México? ¿Usted cree que, en esa urbe neurálgica del capitalismo salvaje, un anuncio panorámico cuesta un cacahuate? Pues claro que no y para ello AMLO pidió a la Cámara de Diputados un presupuesto con una carretada de deuda pública histórica y para ello fue el saqueo de la “estafa maestra” por más de 15 mil millones de pesos en Segalmex, más los multimillonarios fideicomisos desaparecidos por decreto y más lo que se acumule, pues tenemos como resultado otro saqueo a la nación azteca.
José López Portillo diría en su sexto informe “ya nos saquearon, pero no nos volverán a saquear”. Bueno, en ese sexenio porque en todos los demás nos han dejado una herencia maldita que pagarán los futuros mexicanos, pues de ahora en adelante todo chiquillo que nazca en México, traerá bajo el brazo no torta, sino una deuda percápita de 120 mil pesos.
AMLO pide un presupuesto de 9.07 billones de pesos, de los cuales 1.9 billones de pesos serán contratados en deuda externa, y aunque lo negó por muchos días, finalmente tuvo que aceptar que el gobierno tendrá un déficit equivalente a casi el 5% del PIB. ¡Qué bruto!
Pero, ¿qué es un déficit?
Trataré de explicarlo de la manera más simple para que lo entiendan hasta los niños de pecho. Supongamos que usted en su casa tiene un presupuesto de 5 mil pesos al mes y lo que gana no le alcanza para cubrir su presupuesto, luego, entonces, usted tiene un déficit y para cubrir ese déficit tendrá que pedir prestado al banco, utilizar las tarjetas de crédito si es que tiene o pedirle prestado a la suegra o vender su alma al diablo con tal de a completar para su gasto, que incluye además muchas deudas. Eso es lo que esta haciendo AMLO, pidiendo prestado para completar el gasto de sus faraónicas e inservibles obras que nos están costando un ojo de la cara a usted y a mí. Y de pilón, hay que gastarse una millonada en una elección de Estado para que doña Claudia no sufra la vergüenza de la derrota electoral en la presidencial de 2024.
Así que AMLO miente con su populista lema de “no mentir, no traicionar y no robar”.