La magia de la política
¬ Salvador Estrada martes 10, Ene 2017Folclor urbano
Salvador Estrada
En diez días más el mundo va a vivir un cambio y México lo resentirá, porque Donald Trump tomará posesión como presidente de los Estados Unidos, y nuestro canciller, Luis Videgaray, “como dijo no conocer la diplomacia”, no está preparado para enfrentarlo.
Se espera que haya tomado un curso extra rápido y con los que saben inicie su cargo de secretario de Relaciones Exteriores y no cometa una burrada.
La humildad que quiso demostrar al tomar posesión cayó mal a la sociedad, porque nadie puede desempeñar un cargo que no conoce y ahora “como no sabe” ¿qué va hacer?
Pero por la magia de la política ya está listo para enfrentar al presidente electo, Donald Trump. Ojalá que su contacto, el amigo del yerno de Trump “lo oriente” para poder frenar la expulsión de los mexicanos en Estados Unidos y evite el regreso a ese país de las empresas norteamericanas de la industria automotriz que están instaladas en México, porque son fuentes de trabajo para miles de mexicanos. Y, sobre todo, que negocie la no construcción del muro en la frontera.
Si quiere hacer un buen papel debe tomar un curso con su amigo, el factótum en el gabinete del presidente Peña Nieto, Pepe Meade, quien después de ser secretario de Hacienda, con Felipe Calderón, Peña Nieto lo llevó a Relaciones Exteriores y le entró sin pestañear a la diplomacia. Y la pasó de maravilla. Viajó por todo el mundo. Se codeó con los grandes políticos de Europa y con la nobleza. Bebió champaña, buenos vinos y saboreó las mejores viandas.
¡Ah!, pero después de pisar las alfombras rojas, el presidente Peña Nieto lo envió a ¡conocer a los pobres!, a pisar caminos pedregosos y a subir y bajar en las hondonadas donde viven muchos mexicanos carentes de recursos, a los cuales había que llevarles los productos alimenticios a través de la Secretaría de Desarrollo Social.
Y, como sirvió a los pobres, el Presidente lo premió con la Secretaría de Hacienda para que sorteara “el gasolinazo”. Sin embargo, mientras no se baje el precio del combustible, va a sufrir “la gota gorda”.
Lo expertos dicen que ese aprendizaje, tres secretarías en una misma administración, es un gran fogueo para “la grande”. Y si quiere seguir soñando tendrá que salir adelante con la problemática económica. La magia de la política todo lo puede.
Si Luis Videgaray cumple su cometido en Relaciones Exteriores, ¿lo cambiarán de secretaría para foguearlo y también convertirlo en aspirante a “la grande”?
