Elecciones 2012 • (junio 3)
Elecciones 2012 lunes 4, Jun 2012Augusto Corro
El ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano (CCS) se integró de lleno a la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador.
Al fin, el michoacano se dignó bajar de su pedestal de soberbia para encabezar los mítines del candidato presidencial del Movimiento Progresista (MP).
Con esta acción, el perredista buscará lavar su imagen de traidor y convenenciero que se forjó en las elecciones del 2006.
Los errores políticos que cometió CCS lo llevaron a ser el foco de críticas que le afectaron su investidura moral de los perredistas.
Entre otras cosas, no defendió con valentía su triunfo electoral ante Carlos Salinas de Gortari. El priísta se alzó con la victoria, ante la pasmosa pasividad del ingeniero.
Posteriormente negó su apoyo a López Obrador cuando este más lo necesitaba en las controvertidas elecciones del 2006.
Después de su afán protagonista, el michoacano aceptó una chamba que le ofreció Vicente Fox para encargarse los festejos del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución Mexicana.
El líder moral aceptó el hueso y al poco tiempo tuvo que renunciar porque el gobierno panista no le proporcionó los medios suficientes para el desempeño de su cargo.
La incorporación de CCS a la campaña de las izquierdas es tardía e ineficaz. No será de gran ayuda al lópezobradorismo, como no lo fue en la lucha política de Michoacán. En esta entidad perdieron el poder los perredistas a pesar de la influencia de la familia Cárdenas.
Los cardenistas michoacanos pasaron a ser la tercera fuerza política, después del PRI y el PAN. ¿Las razones de su derrota? Ni Lázaro Cárdenas Batel, ni Leonel Godoy supieron desempeñar su papel de gobernadores.
Una prueba de ello es el dominio de la delincuencia organizada que prevalece en el estado.
GUERRA DE LODO
Triste papel el que desempeña el Instituto Federal Electoral (IFE). Nos referimos a su impotencia para frenar la guerra de lodo entre los partidos políticos. Además de su inutilidad, salta a la vista su lentitud.
Por ejemplo, el caso del pase de charola de los representantes de López Obrador será analizado y las determinaciones de posibles ilegalidades se conocerán después de las elecciones del próximo mes de julio.
La guerra de lodo es un insulto para la sociedad que está harta de propaganda desorientadora. ¿Y las leyes electorales?
En lugar de que el IFE exija a los candidatos presidenciales una mayor dedicación a sus proyectos de gobierno, lo que hace es dejar correr la bola de lodo que cada vez se hace más grande.
Bien a bien no se sabe en qué consiste la función del IFE. Porque su condición de organizador de eventos como las comparecencias, resulta muy caro, económicamente. Son miles de millones de pesos destinados a ese instituto en temporadas electorales. ¿Qué beneficios obtiene la sociedad? Se ignora. En las elecciones presidenciales del 2006, su papel fue desastroso. Todos lo sabemos.
En el primer debate de los presidenciales, no se notó la presencia del IFE, eso sí todos los encargados del evento obtuvieron utilidades económicas. El formato de la comparecencia fue acartonado y sin sentido.
Es posible que lo mismo ocurra en el segundo debate de los presidenciales que se efectuará en Guadalajara el próximo domingo.
¿En qué consiste la verdadera función del IFE? Algún día lo sabremos.
FOCOS ROJOS
Javier Lozano Alarcón, candidato panista al Senado por Puebla, afirmó que la campaña presidencial de Josefina Vázquez Mota se encuentra en focos rojos, ante la caída al tercer lugar.
Esta situación fue calificada como “preocupante” por Lozano Alarcón, uno de los voceros a nivel nacional del PAN.
Llama la atención que el aguerrido político poblano acepte poco a poco la derrota de su partido.
Desde luego, el asegura que la mencionada caída de Vázquez Mota en la preferencia del electorado no lo va a “arrastrar” en la intención del voto.
EL TORITO
Manuel Espino Barrientos, ex presidente del PAN, no pasó la prueba del alcoholímetro y tuvo que ser enviado a El Torito. De este lugar salió amparado
La historia empezó cuando Espino llegó al cruce de Félix Cuevas y Gabriel Mancera, en la colonia del Valle.
Le marcaron el alto y lo invitaron a hacerse la prueba. Registró 0.50 grados de alcohol, diez grados más de lo permitido. No le permitieron seguir al volante. Un juez cívico sancionó al político con un arresto inconmutable de 20 horas.
Luego de ocho horas de estancia en El Torito, sus abogados le promovieron un amparo para obtener la libertad.