¿Quién viste a Josefina?
Elecciones 2012, Ramón Zurita Sahagún jueves 12, Abr 2012De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Vacío el trono que alguna vez ocupó Elba Esther Gordillo y Marta Sahagún Jiménez, Josefina Vázquez Mota es la principal aspirante para ocuparlo.
La candidata presidencial del PAN llama la atención de propios y extraños por la calidad de su vestimenta y de los accesorios con los que complementa sus atuendos, cual más de ellos de alto valor comercial.
No se trata de ropajes que como las modelos o actrices los lucen en pasarelas, como vehículo de promoción de los diseñadores y los regresan a sus dueños originales.
Lo de Jose va más allá, son adquiridos en tiendas exclusivas y cada uno de ellos es seleccionado escrupulosamente, para combinarlo perfectamente con zapatos, bolsos y demás accesorios.
Son prendas que por la etiqueta, el diseño y los terminados, alcanzan gran valor comercial y son sumamente codiciadas por quienes viven sujetas al mundo de la moda.
Josefina es una de ellas, por lo que cuida minuciosamente cada uno de esos aspectos, para envidia de las mujeres cercanas a ella, que no son tan meticulosas en ese rubro.
Pero no son solamente las de su entorno las que se sorprenden con los atuendos de la candidata presidencial del PAN, ya que mujeres acostumbradas al uso de esas prendas se dicen sorprendidas por la selección tan atinada de doña Jose.
Y así como reconocen la elegancia de su vestimenta, también hacen distinciones con las de Elba Esther y Marta, que siendo de la misma calidad y, tal vez, de las mismas marcas muestran grandes diferencias.
El estilo de Elba Esther y la forma de lucimiento de sus atuendos establecen distancia con Josefina Vázquez Mota, aunque se traten de diseños similares o de las mismas marcas.
Lo recargado de los accesorios y lo ostentoso de los mismos por parte de Marta Sahagún son las principales diferencias entre la ex primera dama y la que aspira a convertir a su esposo en el “primer damo” de la historia nacional.
No es que Jose no use accesorios de precios elevados, aunque nada comparable a los brillantes, esmeraldas y otras piedras preciosas engarzadas en oro de la señora De Fox.
Alguna vez se le cuestionó a la candidata presidencial del PAN, sobre el precio de sus atuendos, incluidos accesorios y desestimó el tema, aunque al ritmo de la campaña jalará mayor interés.
Es que doña Jose luce en forma elegante lo mismo con vestimenta formal que casual, en centro urbanos o en sitios marginados, ella trata de mantener el mismo estilo, aunque choque con los ropajes de los demás.
Para no ir tan lejos, doña Jose, la autodesignada “Jefa” mostró ese lado elegante y presuntuoso que le choca a sus detractores durante el relanzamiento de su campaña electoral. 24 horas después de los reacomodos en su equipo y de despedir de su staff a Karla Garduño, por haber escrito “Tlazcala”, la candidata presidencial visitó ese enigmático estado, en el que los ciudadanos son tan avanzados electoralmente que hacen ganar al PRD primero, al PAN después y al PRI seis años más tarde, aunque con puros candidatos de trayectoria tricolor.
En su visita a la entidad que gobierna Mariano González Zarur, doña Jose vistió sus elegantes galas, con un atuendo digno de socialité, sin tomar en cuenta que Tlaxcala (con x) es uno de los estados que padece mayores problemas y donde la expulsión de sus habitantes, en busca de mejores oportunidades es una constante.
Sin distinción, los trajes sastre, las chamarras, cazadoras, chaquetas y demás prendas de la panista son la envidia de las mujeres y seguramente darán tema para el debate público.
La candidata presidencial del PAN mostró su parte de atracción, luciendo una chaqueta de marca (tal vez Burberry), acolchada, de color claro, con cuello estilizado, con camisa con mancuernas, diferente a la de la mañana que era de siete octavos, azul y maravillosa, como dirían los reseñadores de moda.
Eso sí, en su visita a Apizaco, Tlaxcala, la poderosa “Jefa” se hizo acompañar del ex gobernador Héctor Ortiz, flamante candidato a senador por el blanquiazul y a quien se le señala por supuestos malos manejos.
Retomando el caso de los ropajes de doña Josefina, dicen los envidiosos que en cada viaje que realizaba a Europa, especialmente a España, país que visitó en ocasiones diversas durante su ejercicio como diputada federal, el surtido de ropa fue tan grande, que en no pocas ocasiones tuvo que pagar exceso de equipaje, aunque, finalmente, le convino, ya que cuenta con los atuendos suficientes para lucirlos en tiempos de campaña y pasar a la historia como la candidata presidencial más elegante en la historia de México.
SUBE LA INTENSIDAD
La intensidad de las campañas y de los dichos de las mismas continúan subiendo de intensidad y amagan con crecer el tono de reproches, acusaciones y denuncias.
Por lo pronto, el gran despliegue de espectaculares se vuelve objeto del oscuro deseo de las investigaciones.
Los perredistas señalan a los priístas por el abuso en la colocación de sus promocionales, pero los tricolores acusan el poco uso de los dineros públicos otorgados para los partidos de izquierda, ya que no se ve a dónde se destinan y les genera suspicacia.
Pero el cruce de acusaciones entre priístas y panistas prosigue, en demérito de sus candidatos presidenciales y el manejo de las campañas negras y de lanzamiento de lodo, amaga con ahogar a varios de los aspirantes a cargos de elección popular.