Con el corazón en la boca
¬ Claudia Rodríguez viernes 30, Mar 2012Acta Pública
Claudia Rodríguez
Lo sé. El dicho coloquial se construye de la siguiente forma: “Con el corazón en la mano”. Sin embargo para el caso que hoy ocupa este espacio, lo mismo da montar la frase con otro órgano del cuerpo humano, como lo es la boca.
Con el corazón en la mano advierte que se habla con sinceridad y lo mismo hizo el cardenal Juan Sandoval Íñiguez, cuando con el corazón en la boca pidió a los ciudadanos de este país, no tachar las boletas electorales del próximo 1 de julio en lo que respecta a Presidente de la República, sólo porque el que se evoca con el nombre elegido, esté “muy guapo o porque tiene el copete alto”
El jerarca católico quien el miércoles celebró sus 79 años de vida en la ciudad de Guadalajara, también solicitó que el voto sea razonado con base en las propuestas que realicen los candidatos presidenciales en materia de educación, trabajo y educación y que también se advierta, si los aspirantes hablan de más sólo por atraer adeptos –espero no se haya mordido la lengua el cardenal—.
Total que Sandoval, contrario a lo que marca el artículo constitucional 130, como ministro de culto, se entromete de forma pública en asuntos de índole política.
Pero a este ministro católico siempre le ha tenido sin cuidado saltarse abiertamente las disposiciones legales que marca la ley nacional para ejercer su culto.
A la Arquidiócesis de Guadalajara arribó Sandoval Íñiguez, luego del asesinato del Arzobispo Juan Jesús Posadas Ocampo ocurrido el 24 de mayo de 1993 en el estacionamiento del aeropuerto de Guadalajara, y a partir de ahí, la exposición del cardenal ha sido más por cuestiones legales y políticas que por sus mensajes espirituales:
En el 2003, el cardenal fue acusado por lavado de dinero y enriquecimiento ilícito por el ex titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Jorge Carpizo McGregor, pero al final, Sandoval Íñiguez fue exonerado.
En 2010 Sandoval Íñiguez enfrentó otra denuncia. Esta del jefe de gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, quien fue señalado por el cardenal de haber sobornado —en palabras de Sandoval “maiceado”— a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que aprobaran las uniones civiles entre personas del mismo sexo en terrenos administrativos de Ebrard.
Así que el cardenal, amigo entrañable del gobernador etílico, Emilio González, tiene por costumbre hablar con el corazón en la boca, de acuerdo a sus más terrenales intereses.
Acta Divina… Al desayuno para festejar los 79 años del cardenal Juan Sandoval Íñiguez, asistieron entre otros, Tomás Coronado Olmos, procurador de Justicia de Jalisco, el alcalde interino de la capital jalisciense, Francisco Ayón, así como Miguel Castro, alcalde con licencia de Tlaquepaque y ahora candidato del Partido Acción Nacional (PAN) al gobierno del estado.