Lo que mal empieza, mal acaba
¬ Claudia Rodríguez jueves 10, Nov 2011Acta Pública
Claudia Rodríguez
En septiembre del no muy lejano 2009, el ahora aspirante panista a la Presidencia de México, Ernesto Cordero Arroyo, entonces secretario de Desarrollo Social de la administración calderonista, afirmaba que la crisis económica que afectaba a nuestro país influía con marcada crudeza entre los sectores de la población más pobre, aunque igual, se resentía entre todas las familias de México.
Cordero entonces, en su papel de relator de la pobreza, comentaba que algunos mexicanos por tal situación, se veían forzados a saltarse hasta una comida al día y que otros ya habían sacado a sus hijos de la escuela para ponerlos a trabajar.
En febrero de este mismo año, con un nuevo cargo en el gabinete de secretarios, ahora como de Hacienda y Crédito Público, el señor Cordero Arroyo afirmó que “con ingresos de 6 mil pesos al mes, hay familias mexicanas que tienen el crédito para una vivienda, que tienen el crédito para un coche que se dan el tiempo de mandar a sus hijos a una escuela privada y están pagando las colegiaturas”.
Claro que con la declaración anterior, Cordero más que presumir bondades de la economía mexicana, lo que hacía era promocionarse como candidato panista a la Presidencia del país.
Ahora resulta que como lo habían venido anunciando, se lanza el programa titulado “El Buen Fin”, mediante el cual el gobierno federal adelanta a sus burócratas una parte del aguinaldo a entregarse el próximo 15 de noviembre, con la finalidad de que en los días 18, 19, 20 y 21 de este mismo mes, quienes recibieron este anticipo económico en su prestación, lo gasten en las también anunciadas ofertas que se presentarán para la adquisición de varios productos, servicios e incluso viajes.
¿Qué gana la administración de Calderón con esta acción tipo Thanksgiving Day?
Se dice que la reactivación económica y la no pérdida de empleos que cíclicamente se presenta a final de cada año.
Esta práctica muestra más que bondad, la verdadera precariedad económica nacional, que tiene que recurrir a estrategias comerciales de endéudese ahora y pague después, o como las famosas ventas nocturnas de tiendas departamentales.
¿Qué pasará por otro lado, con los millones de excluidos que no tendrán acceso a este beneficio magnánimo al estilo Calderón, tales como los millones de desempleados o millones de quienes viven en la extrema pobreza o incluso, quienes aún empleados no sean agraciados?
“El Buen Fin” es un engaño, porque lo que mal empieza, mal acaba.
Acta Divina…El presidente Felipe Calderón anunció “El Buen Fin” en el que se ofrecerán ofertas en comercios y servicios del 18 al 21 de noviembre en todo el país. Para tal efecto, los empleados del gobierno federal tendrán un adelanto de aguinaldo en noviembre y las otras partes serán entregadas en diciembre y enero.