Los muertos también votan
¬ Claudia Rodríguez jueves 3, Nov 2011Acta Pública
Claudia Rodríguez
Aunque muchos no lo deseábamos, ni siquiera pensábamos cercano, aunque siempre latente, la nación está en guerra.
Y más preocupante es el asunto cuando ya la aún superpotencia estadounidense mete mano, opina y regula sobre aspectos de seguridad en nuestro país. Las elecciones federales para el relevo de presidente de México, están muy cercanas, y sería innegable que los más de 50 mil muertos –entre los que se cuentan niños y mujeres—, no pesen en los próximos comicios.
La violencia desatada en todo el país desde el 2006, a causa de la declaración de “guerra contra el narcotráfico” realizada por el señor Felipe Calderón, ha llevado a la pérdida de padres, madres e hijos en no pocas familias, derivando en muchos casos en la desintegración familiar y hasta al abandono de su comunidad.
Los estudiosos documentan y advierten cómo la violencia influye en el comportamiento de los electores. Las reacciones de rechazo son más vehementes en el caso que la violencia se instale en el propio territorio y no sólo se resienta con políticas de restricción económica o social.
Para documentar lo antes señalado, ya ni siquiera es necesario recurrir a datos transfronterizos o de nuestra historia pasada.
Elecciones de distintas entidades federativas en los años recientes y bajo la administración calderonista, muestran cómo hay regiones en donde la misma integración de las mesas directivas de casilla son una utopía y la recepción de votos, aún más.
Pero también hay localidades en donde los sufragios alcanzan hasta el 60 o 70 por ciento de la lista nominal, como respuesta a una oferta que se percibe con capacidades de cambio, o simplemente, como un gran castigo a quienes fallaron en sus políticas de gobierno.
La violencia en el sexenio incidirá en la decisión del voto en el próximo julio del 2006 y es por esto que ya unos y otros endosan responsabilidades.
No es casualidad, que el señor Felipe Calderón haya fincado una campaña de responsabilidad por la alta incidencia de cuerpos encontrados en la entidad veracruzana, misma que en cuestiones de votos posibles es muy jugosa.
Tampoco es fortuito que Calderón, en su última reunión de Seguridad Nacional con los gobernadores de todo el país, les acusara de lentitud en sus procesos de certificación de las policías, como si sólo cada entidad tuviera responsabilidad en tal proceso.
Si es cierto que los Estados Unidos y la administración de Calderón han pactado ya, hacer aparecer en la escena pública y esposado al archifamoso y dizque buscado narcotraficante Joaquín Guzmán Loera “El Chapo”, por allá de febrero del 2012, queda claro que el narco, la estrategia, la violencia y los muertos, pesan ya en la decisión del sufragio de cada ciudadano mexicano.
Como cualquier nación en guerra, no olvidemos a nuestros muertos en julio como en noviembre.
Acta Divina… Miembros del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad comandado por el poeta mexicano Javier Sicilia, solicitaron al presidente Felipe Calderón la construcción de un memorial en honor a los más de 50 mil muertos a causa de la violencia en nuestro país.
