Definición de métodos
Ramón Zurita Sahagún martes 27, Sep 2011De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Los próximos días serán de suma importancia para los partidos políticos, especialmente para los que guardan posibilidades de ganar los comicios presidenciales del año próximo.
Es que en unas cuantas semanas más se conocerá el método que usará cada uno de los partidos para seleccionar a su candidato presidencial y las alianzas que habrá de establecer con los partidos considerados como minoritarios.
De los tres partidos principales, uno de ellos, el PRD, ya definió el método del que surgirá su candidato presidencial. El mecanismo será el de encuestas, mismas en las que el principal aspirante presidencial no confía.
Se recuerda que las encuestas y sondeos son métodos que para Andrés Manuel López Obrador son “cuchareadas”, por lo que no se explica el porqué aceptó contender bajo ese mecanismo en el que no cree.
Por el contrario, su adversario interno, Marcelo Ebrard, sí confía en las encuestas, por lo que fue su grupo el que las propuso en uno de los tantos consejos que realiza este partido.
Sin embargo, son pocos los que esperan que AMLO acepte el resultado de las encuestas si éstas no le favorecen, por lo que el método puede resultar en el punto de quie
bre de este partido y de sus dos presidenciables.
El tabasqueño es propenso a las consultas directas, por lo que ésta era su propuesta, aunque los consejeros de su partido, decidieron que el mejor método era el de encuestas, lo que no le satisfizo plenamente.
A partir del 7 de octubre, los perredistas podrán precisar si van o no en alianza con los otros partidos considerados de izquierda, Trabajo y Movimiento Ciudadano (antes Convergencia) o si cada uno va por su lado con candidato propio, ya que se inicia el año electoral.
Los otros dos partidos con posibilidades de ganar la elección presidencial, aún no definen el método de seleccionar a su candidato, aunque el mismo se encuentra casi “planchado”.
Para los panistas será muy difícil abrir el proceso a toda la ciudadanía como plantean algunos de sus aspirantes, por lo que nuevamente se recurrirá al ya probado método de votación de los militantes y adherentes con que cuenta el partido.
Hace seis años, Santiago Creel Miranda pidió que se abriera la votación a toda la ciudadanía y el rechazo fue inmediato. Hoy Josefina Vázquez Mota pide lo mismo y Ernesto Cordero Arroyo la respalda, pero se advierte sumamente difícil cualquier posibilidad para ello.
Por eso, el método será el consabido de que sean los militantes y adherentes de este partido, los que decidan quién de entre Creel Miranda, Vázquez Mota y Cordero Arroyo, será el que compita con las siglas del PAN.
Los priístas se encuentra listos para que en las semanas por venir se defina también su sistema de selección del candidato presidencial.
Serán los integrantes del Consejo Político Nacional los que definan el método por el que surgirá su abanderado con el que pretenden regresar a Los Pinos, de donde fueron sacados en julio del 2000 y que desde el 1 de diciembre de ese mismo año no habitan.
Para cumplir con el protocolo, se eligieron nuevas figuras de ese consejo político, donde predominan las sembradas por los dos aspirantes presidenciales: Enrique Peña Nieto y Manlio Fabio Beltrones.
Hasta el momento, son solamente estos dos personajes los que han manifestado su intención de competir por la nominación presidencial, por lo que se considera improbable que alguno otro de los personajes que en un principio manifestaron interés decida de último momento participar.
Los dos aspirantes (Manlio y Enrique) se muestran de acuerdo con realizar una consulta abierta a toda la ciudadanía, para que sean estos los que decidan cuál de las dos propuestas es la que apoyará el partido tricolor.
Sin embargo, las bases de esa consulta, o de cualquier otra, son las que deben definir los consejeros priístas.
En el pasado reciente, los priístas seleccionaron de esa forma a sus candidatos presidenciales y en ambas perdieron la elección presidencial.
Francisco Labastida Ochoa le ganó a Roberto Madrazo Pintado, Manuel Bartlett Díaz y Humberto Roque Villanueva, bajo un sistema que hacía triunfador al que ganara el mayor número de distritos federales del país.
Labastida superó por mucho a Madrazo, situado en segundo lugar, aunque fueron muchos los que protestaron por la singular cargada a favor del sinaloense y acusaron de inducir el voto desde Los Pinos.
El sistema fue el mismo seis años más tarde, donde la ciudadanía pudo votar libremente por el candidato tricolor. Roberto Madrazo Pintado y Everardo Moreno Cruz, fueron los contendientes, bajo el sistema de voto directo y contado, luego de que se produjo el escándalo de Arturo Montiel Rojas, quien fue bajado de la competencia, al conocerse la presunción de corrupción en su paso por la política.
Madrazo apabulló a Moreno, siendo la diferencia mucho más amplia que la de seis años antes entre primero y segundo lugar.
El resultado es de todos conocidos, los priístas no ocuparon el segundo lugar como seis años antes, sino que se ubicaron en un tercer sitio, muy distantes del primero y del segundo.
Las experiencias de los métodos de selección de sus candidatos por parte de los partidos políticos están a la vista y los partidos deberán revisarlos para ver la conveniencia de seguirlos aplicando u optar por otros que les resulten más adecuados para sus propósitos.
REBATINGA PANISTA
Los aspirantes presidenciales panistas se encuentran a la pepena de los seguidores de Alonso Lujambio y Emilio González, los dos más recientes aspirantes presidenciales bajados del proceso interno.
Sin embargo, los más importantes serán los del otro prospecto que se descarte en fecha próxima o cuando se den cuenta de que la contienda es solamente entre dos.
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