Descaro parejo
Freddy Sánchez martes 20, Jun 2023Precios y desprecios
Freddy Sánchez
Emparejar gastos y revisiones al gasto, pero sobre todo castigo parejo para quien no respete las reglas de la contienda.
Eso y nada menos que eso significa “terreno parejo” en cualquier competencia entre iguales.
Cosa que uno se pregunta si desde que comenzaron las precampañas electorales (que lo han sido a todas las luces las exposiciones en público de las “corcholatas”), se ha tenido un marco regulatorio que evite excesos y en especial tratos en lo oscurito” con grupos ajenos al orden constitucional: mafiosos para ser claros.
Porque lamentablemente en torno a los actos de proselitismo en el país, desde hace varios sexenios se ha hecho notar la presencia de organizaciones delictivas, ya no sólo grupos económicos interesados en apoyar candidaturas para después sacar alguna clase de provecho.
Así que, sin lugar a dudas, es fundamental que las actividades políticas en México y en especial tratándose de tiempos electorales la vigilancia sobre el quehacer de los políticos (los de la llamada vieja guardia, los novatos y los nonatos ahora que muchos surgen de la nada atraídos por las riquezas que suele dar el poder) es indispensable extremar precauciones.
Y hay que decirlo como es: por desgracia la política se ha venido sumergiendo en una connivencia nociva con las peores causas o sea de plano delincuentes con mucho dinero que se han dado cuenta que pueden ser actores políticos o por lo menos manipular a quien sea con tal de influir en sus decisiones cuando llegue el momento de ejercer los cargos electorales que su poder económico ayude a conseguir.
En esas condiciones (tristes y lamentables en los menesteres políticos actuales), resulta de primera necesidad que el partido en el gobierno con mayores posibilidades de seguir manejando la Presidencia de la República deje sobradas muestras de que en su filosofía y praxis de ninguna manera se ha permeado el interés de los más bajos fondos de la sociedad.
No se trata de disculpar a la oposición con respecto a conductas dudosamente honorables en el manejo de asuntos electorales (el PRI,PAN, PRD, MC, Partido Verde y PT tienen su propia historia), y justamente por eso Monera al haberse convertido en el “partidazo” que ahora es, inequívocamente, debe ser el principal imán de atracción para quienes buscan poder desde los oscuros rincones del lucro económico desmedido y la impunidad de delito.
Así las cosas, no sobra decir que los aspirantes presidenciales del partido gobernante ameritan un meticuloso cuidado sobre su manera de hacer campañas proselitistas y como parte de esta vigilancia hace falta no sólo lo que piden los mismos aspirantes que es “suelo parejo”, con respecto al manejo de apoyo para sus tareas proselitistas.
Más bien y primordialmente en lo referente al origen de dónde están recibiendo dinero los que se han dedicado desde hace mucho tiempo a hacer grandes erogaciones para proyectar su imagen nacionalmente mediante actos multitudinarios y promocionales de todo tipo, volúmenes y obviamente costos.
La única premisa defendible debe ser entonces que en apoyo oficial nadie tenga más que otros y tampoco menos supervisión respecto a sus relaciones con grupos de dudosa honradez.
Y para que así sea es preciso poner de manifiesto qué está permitido y qué no lo está para que nadie se equivoque ni se confunda.
Porque ningún aspirante presidencial de Monera debe ignorar que suelo parejo no es descaro parejo.
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