En víspera de la encuesta y palabras mayores
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 12, Jun 2023Como veo, doy
Jorge Luis Galicia Palacios
- ¿Quién para candidato a “la silla del águila”?, Qué nervios
La víspera que se vive en torno a la encuesta para definir el candidato presidencial de Morena, nos lleva a evocar el título de una película mexicana de los años 80 del siglo pasado, el director y guionista es el reconocido cineasta Alejandro Pelayo, donde la trama del filme es algo así como un acercamiento psicológico a la vida de un político que vive momentos de angustia ante lo que parece un inminente nombramiento en su persona como secretario de Estado, un nombramiento que alguien le filtró supuestamente de parte del Presidente electo quién está a punto de nombrar a su gabinete.
Por la narrativa, por los personajes, la historia no hizo pensar en algo semejante de los que está pasando en nuestros días, sobre todo ante la expectativa que el pasado fin de semana generó la convocatoria para que el Consejo Político del partido en el poder se reuniera y emitiera los lineamientos para la sucesión presidencial rumbo a la madre de todas las elecciones en 2024, ritual que adelantó la renuncia al cargo actual de uno de los aspirantes al tiempo que se metió presión para que el resto de los contendientes hicieran lo mismo una vez que se conocieran la reglas a seguir y acorde con los estatutos del referido partido político.
En ese contexto, en sentido figurado, algunos de los observadores de este proceso imaginamos a los interesados posesionarse de su butaca con todo y palomitas, para ver el inicio de esta historia que, desde muchos días antes, ha provocado simpatías hacia una u otra “corcholata”, y por un momento guardaron banderas, matracas, playeras, gorras y todo el material que implica una estrategia de propaganda, difusión y promoción, para, ahora sí, ya con banderazo oficial de por medio, salir con todo en busca de que su abanderado tenga la aprobación ciudadana, de la militancia y simpatizantes al gobierno de la 4T.
Las reglas, sí es que las había, han cambiado respecto a procesos anteriores de la sucesión presidencial. No hay tapados ni dedazos, las “corcholatas” están a la vista, pero en el imaginario popular no percibimos que las angustias o nervios entre los aspirantes sean diferentes al de otras épocas como la narrada en el filme de Alejandro Pelayo o como el relato que magistralmente hace el escritor mexicano Luis Spota en su novela Palabras Mayores.
La Víspera y Palabras Mayores, sin duda, dos obras de ficción pero que permiten acercarnos a la figura del poder, en ambas historias se habla de una realidad en la que los políticos de cualquier época ven reflejada su propia historia.
Quien será el ungido del partido Morena para buscar la silla del águila, pronto lo sabremos, por lo pronto no descartamos que las escenas mostradas en la película La Víspera o la narrativa hecha en Palabras Mayores se repitan en torno al proceso sucesorio, porque lo de Coahuila y Estado de México fue como un pequeño adelanto de lo que viene, allá hubo de todo, traiciones, deslealtades, besamanos, compra de voluntades, disciplinados e indisciplinados, golpes bajos, pero hay quien dice que eso apenas es una pequeña probadita y para ver el desenlace hay que esperar sin comer ansias.
La encuesta es un ingrediente relativamente nuevo en la sucesión presidencial y ese proceso pone más interesante el desarrollo, el clímax, el desenlace, y en general toda la historia política actual y en ella está puesta la atención del espectador. Ora si que, veremos.
LAS CARTAS HABLAN.— La Víspera es una película mexicana que sitúa al ingeniero Manuel Miranda a un día de tomar el puesto de secretario de Estado, fue dirigida por Alejandro Pelayo y se estrenó en 1982. La trama gira en torno a la víspera de un proceso para la toma de posesión como secretario de Estado del nuevo presidente, que está a 24 horas de asumir el cargo.
En tanto que, con Palabras Mayores, Luis Spota, fallecido en 1985, describe una historia en un país imaginario, pero muy parecido al de cualquier época del mundo de la política donde la voz de un Presidente decidía a su sucesor y donde los procesos sucesorios eran pura simulación, y en ese juego más de uno de los aspirantes deseaba escuchar las “palabras mayores.
Una película, y una lectura, muy recomendables en estos tiempos, sea para recordar tiempos idos o para ambientar tiempos presentes.
VA MI RESTO.— Palabras Mayores, La Víspera o cualquier otro título que retrate la vida de los políticos pueden ser historias ficticias, pero con significados intrínsecos atemporales, porque se pueden cambiar los personajes, pero los ambientes se conservan y nos describen realidades que no dejan de parecerse. Es cierto, no hay “tapados”, no hay “dedazo”, pero vaya que -en víspera de la contienda por la sucesión presidencial- las encuestas también estresan y sin duda pondrá de malas y con los nervios de punta a más de uno de los aspirantes presidenciales, digo, y hasta ahí porque como veo doy.