Aquí bien, ¿y allá?
Salvador Martínez García jueves 18, May 2023Aunque pese
Salvador Martínez García
Nadie hubiere imaginado que la moneda mexicana pudiera apreciarse hasta llegar a lograr cotizaciones frente al dólar similares a las que tenía hace 7 años, cuando los augurios de los fatalistas eran los de una devaluación y crisis económica para estos tiempos del sexenio.
La verdad ha sido otra y el lunes de esta semana el dólar interbancario cerró en su nivel más bajo desde abril de 2016, con una cotización de 17.42 pesos por divisa verde.
No obstante, en los últimos días el peso se ha depreciado un poco ante la incertidumbre generada por la posibilidad de impago de Estados Unidos para su deuda, así como los riesgos de recesión en el país vecino para el segundo semestre del año.
Hoy, las condiciones económicas en México han permitido la revisión al alza de los pronósticos de crecimiento para este año, por lo que el desarrollo anual pudiera llegar y quizás hasta rebasar el dos por ciento.
La inversión extranjera directa, las remesas y los ingresos por turismo dan certidumbre a la economía nacional, misma que no se ha alterado con las turbulencias políticas buscadas por la oposición.
Las negociaciones para ampliar el techo de endeudamiento en Estados Unidos parecen avanzar hacia una solución satisfactoria y alejar el fantasma del impago. Aun así, no alejan los riesgos de recesión con sus nocivas repercusiones para México, lo cual podría elevar el tipo de cambio.
Así, el superpeso pudiera debilitarse para cerrar el año con cotizaciones de 19 unidades por dólar, lo cual, incluso, sería conveniente para la economía mexicana.
Susurros
El conocido inversor estadounidense Jim Rogers no es nada optimista en cuanto al futuro de su país y advierte que, sin caer en el impago, la creciente deuda de la aún nación más poderosa del mundo la llevará a graves problemas.
Recordó que hace cien años, en 1923, el Reino Unido era el país número uno en el mundo, el más rico y poderoso, pero 53 años después, en 1976, estaba en bancarrota. El FMI lo rescató con préstamos de emergencia, pero lo salvó el petróleo descubierto en el Mar del Norte.
Ahora Estados Unidos está en crisis, “sin petróleo en el Mar del Norte”, lo que provocará un descenso gradual en el nivel de vida de sus habitantes y el debilitamiento de su posición en el mundo. Les pasa a todos los países que solían ser el número uno, cometieron errores y gastaron mucho, entraron en deudas y comenzó su decadencia, concluyó.